(Efe/InfoCatólica) Según la Acadèmia, hace siete años se presentó al cardenal García-Gasco una traducción al valenciano del misal para su aprobación canónica, algo que no se llegó a producir.
Monseñor Osoro, preguntado sobre esta cuestión, ha señalado que la decisión en torno a este asunto "no es una cuestión solo del arzobispo de Valencia". "Ahí se tienen que poner de acuerdo todos los obispos de la provincia eclesiástica para hacerlo, y pedirlo primero, pero tenemos que estar de acuerdo todos", ha insistido para señalar que él estará "a favor" de "todo lo que venga bien para anunciar a Jesucristo".
Por otra parte y en relación a su predecesor en el cargo, el Arzobispo defendió la labor del cardenal García-Gasco y añadió que "cada uno hacemos lo que podemos; llegaré hasta donde pueda llegar".
En cuanto al balance de sus siete meses al frente del Arzobispado de Valencia, lo califica de "positivo" por haberse encontrado "en un momento muy bonito y privilegiado" a una Iglesia "muy viva" y "muy metida en el entramado social", así como a una sociedad "con necesidad de lo religioso y de que se le hable con sinceridad de Dios".
En la Comunidad Valenciana, a su juicio, "existe una cultura de la fe" que se plasma tanto en parroquias rurales como urbanas y que se "estropearía" si se separara de las "costumbres del pueblo".
Por otra parte, en respecto a las relaciones entre el Arzobispado y las instituciones políticas de esta región, ha dicho que "con todas" con las que se ha reunido desde abril, tanto las de ámbito autonómico como estatal, ha encontrado "una actitud positiva".
Sobre la visita del Papa a Valencia en 2006 para clausurar el quinto Encuentro Mundial de las Familias, Monseñor Osoro ha asegurado que esta ciudad "se hizo famosa en el mundo entero" por un acontecimiento del que "todos" los valencianos "tendrían que estar muy agradecidos" y que demostró el "muy importante" movimiento familiar cristiano español.
Por último, sobre la investigación judicial y policial del caso "Gürtel", ha afirmado desconocer si "alguien" ajeno a la Iglesia ha hecho negocio con la visita papal.
