(Agencias/InfoCatólica) Según el cardenal Urosa, los venezolanos ya tienen una guerra interna, que es la de la delincuencia contra la ciudadanía. “Esa es la guerra que deberíamos resolver porque está en nuestras calles”, agregó.
El prelado venezolano insistió en la necesidad de buscar la mediación de organismos multilaterales para superar la grave crisis diplomática entre Colombia y Venezuela.
Con la guerra todo se pierde
Por su parte el Arzobispo de Coro y segundo Vicepresidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, Mons. Roberto Luckert, hizo un llamado a la paz entre ambas naciones y recordó que "con la guerra todo se pierde, con la paz todo se gana".
Tras resaltar que estas naciones "tienen muchos puntos comunes para poderse unir y bregar por la gran estabilidad sociopolítica", el prelado crítico la "actitud agresiva" de Chávez que atribuyó a una presunta baja de popularidad y a la asesoría cubana.
"Todo esto debe tener alarmados a los cubanos de la sala situacional que Chávez tiene allí y que son los que le están dando las normas y las líneas de trabajo para poder aún más atreverse a convocar una guerra", dijo el Arzobispo.
En caso de guerra, cuestionó el Prelado, "¿dónde va a meter Chávez a los 4 millones de colombianos que hace más de cinco generaciones viven con nosotros?".
