(ElDebate/InfoCatólica) El día 23 de julio de este año se celebrará la III Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores, la cual será presidida por el Papa Francisco desde la Basilica de San Pedro. La Santa Sede ha emitido un comunicado para hacer del conocimiento público el Decreto de la Penitenciaría Apostólica que será otorgada a todos los participantes de dicha celebración.
También explica que podrá ser otorgada como sufragio a las almas del purgatorio, así como a los fieles que dediquen su tiempo a la visita y atención de los hermanos ancianos necesitados o en dificultad.
La acción de rezar el rosario es otra forma de obtener la indulgencia.
Explica que se podrá obtener dicha indulgencia «siempre que se desprendan de cualquier pecado y se propongan cumplir cuanto antes las tres condiciones habituales, a los ancianos enfermos y a todos aquellos que, no pudiendo salir de casa por un motivo grave, se unan espiritualmente a los sagrados servicios de la Jornada Mundial, ofreciendo al Dios misericordioso sus oraciones, sus penas y los sufrimientos de su vida».
La Santa Sede informa que este decreto tendrá validez durante la III Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores «no obstante cualquier disposición en contrario».
El Catecismo de la Iglesia Católica y el Código de Derecho Canónico definen como indulgencia plenaria «la remisión ante Dios de la pena temporal de los pecados».
