(El Punt /Mario Solsona/ Infocatólica) La coordinadora que quiere organizar una consulta popular sobre la independencia de Cataluña en el municipio, Canet Decide!, celebró el pasado día 24 de octubre su presentación oficial en la población en el centro parroquial. "Pedimos permiso a la parroquia, porque el local es un buen espacio para hacer reuniones y no tuvimos ningún problema", recuerda uno de los portavoces de la plataforma, Xavier Espàrrech. Cinco días después, un escrito firmado por el obispo de Gerona, Francesc Pardo, y por el consejo episcopal se hacía llegar no sólo a la parroquia de Canet sino a todo el resto de la demarcación con una orden bien clara: “No hay que realizar ni las reuniones preparatorias ni la consulta posterior en ninguno de los locales o dependencias parroquiales”. El comunicado hace mención del "respeto al derecho de algunos ciudadanos de preguntar a otros conciudadanos sobre las cuestiones que procedan”, pero precisa que siempre que “se ajusten a la legislación vigente en Cataluña”.
En la carta del Obispado de Gerona también se incide en que la consulta “lleva o puede llevar a una división de la comunidad parroquial, y del pueblo, sea por la pregunta a responder, sea por la oportunidad, sea por el lugar donde se hace”. En todo caso, desde el obispado se pide a los responsables de las coordinadoras que impulsan los referendos soberanistas que "respeten la libertad, y sobre todo la identidad de nuestra Iglesia, y a la vez la opinión, manifiesta o no, de los miembros de nuestras parroquias que es suficientemente variada”.
Xavier Espàrrech lamentó ayer la orden surgida del Obispado, pero aclaró que desde la parroquia de Canet "en ningún caso nos han prohibido nada, pero desde la coordinadora queremos evitar los enfrentamientos y buscaremos otros locales alternativos”.