(RNS/InfoCatólica) Los líderes de la comunión anglicana en África no aceptan que se bendiga a las uniones homosexuales aunque no se les conceda el sacramento del matrimonio.
Los arzobispos de Uganda, Kenia y Nigeria, que juntos representan a más de 35 millones de anglicanos, publicaron su condena a la decisión de la Iglesia de Inglaterra en las webs de sus archidiócesis.
«A la Iglesia de Inglaterra se le da muy bien hacer declaraciones contradictorias y esperar que todo el mundo crea que ambas pueden ser ciertas al mismo tiempo. Eso es lo que han hecho con esta decisión», declaró el arzobispo de Uganda, Stephen Samuel Kaziimba Mugalu.
Kaziimba dijo que, a pesar de la insistencia de los anglicanos ingleses en que no están cambiando su doctrina sobre el matrimonio, están haciendo exactamente eso, siendo la única diferencia significativa la terminología de boda frente a un servicio de bendición.
«La Iglesia de Inglaterra... se ha apartado de la Biblia y su mensaje es el contrario», dijo Kaziimba. «Incluso se ofrecen a bendecir ese pecado. Eso está mal. Como Iglesia de Uganda, no podemos aceptarlo. Dios no puede bendecir lo que llama pecado».
Después de que la Iglesia Episcopaliana de Estados Unidos apoyara la instalación del obispo Gene Robinson, un hombre gay, como obispo de New Hampshire, dijo Kaziimba, la provincia de Uganda rompió la comunión con ellos y desde entonces ha mantenido que fueron los estadounidenses los que abandonaron la Comunión Anglicana.
«No estamos abandonando la Comunión Anglicana; somos la Comunión Anglicana», afirmó el primado ugandés, refiriéndose a la Conferencia Mundial Anglicana del Futuro, conocida como GAFCON, y a la Fraternidad Mundial Sur de Anglicanos, coaliciones de diócesis anglicanas socialmente conservadoras que se formaron en respuesta a la aceptación del colectivo LGBTQ en el anglicanismo.
«No hay manera de que caminemos juntos», dijo Kaziimba. «Estas son las provincias que se han alejado, pero rezamos para que se arrepientan».
En su declaración, el arzobispo Jackson Ole Sapit, primado de la Iglesia de Kenia, atribuyó la medida al «desafortunado auge del artero liberalismo eclesiástico dentro de la Comunión Anglicana».
Y añadió
«Hacemos una humilde petición a estas iglesias: ¡Despertad! Fortaleced lo poco que queda, porque incluso lo que queda está casi muerto».
Según el arzobispo de Nigeria, Henry Chukwudum Ndukuba, en una declaración el domingo (12 de febrero), «la historia está a punto de repetirse. La Iglesia Anglicana está en el umbral de otra reforma, que debe barrer el liderazgo impío que actualmente respalda el pecado, desviando las vidas de los fieles anglicanos de todo el mundo».
El primado instó a la diócesis de GAFCON y a otros grupos ortodoxos de la comunión a mantenerse firmes en la defensa de la fe.
