(Agencias/InfoCatólica) «Deploramos, en este momento de la campaña electoral, la intensificación de la explotación de la fe y la religión como medio para recoger votos en la segunda vuelta». La Presidencia de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB) ha publicado el 11 de octubre un comunicado para expresar su firme repulsa a ciertos episodios que se están produciendo en la segunda vuelta de la Presidencia de la República del 30 de octubre.
El 2 de octubre se celebraron elecciones generales en Brasil para elegir al Presidente y al Vicepresidente de la República, renovar la Cámara y el Senado y elegir a los 27 gobernadores de los estados. La campaña electoral, profundamente polarizada, se centró principalmente en la elección del nuevo Presidente de la República. Entre los 12 candidatos, se enfrentaron el presidente saliente, Jair Bolsonaro, de extrema derecha, y Luiz Inácio Lula da Silva, conocido por todos como «Lula», durante décadas líder de la izquierda, que ya fue presidente entre 2003 y 2011. Sin embargo, ninguno de los dos candidatos logró obtener el 50% de los votos necesarios para ganar en la primera vuelta: Luiz Inácio Lula da Silva tuvo el 48,43% de los votos y Jair Bolsonaro el 43,20%. Por tanto, según las normas electorales, la segunda vuelta se celebrará el 30 de octubre.
«En particular, los momentos religiosos no pueden ser utilizados por los candidatos para presentar sus propuestas electorales y otras cuestiones relacionadas con las elecciones», subraya la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil, en su nota, que cita al principio una cita del libro del Eclesiastés: «Hay un tiempo para todo» (3,1). «La manipulación religiosa siempre distorsiona los valores del Evangelio y desvía la atención de los verdaderos problemas que deben ser discutidos y abordados en nuestro Brasil», denuncian los obispos, recordando cómo es fundamental un auténtico compromiso con la verdad y el Evangelio.
En la parte final del texto, se reitera que «la CNBB condena firmemente la utilización de la religión, por parte de todos los candidatos, como instrumento de su campaña electoral» y se invita a todos los ciudadanos, «a hacer de este momento una oportunidad para la reflexión y la propuesta de acciones que pongan en el centro la dignidad de la persona humana y la búsqueda de un país más justo, fraterno y solidario».
Este es el trasfondo de la nota emitida por el Arzobispo de Aparecida, Orlando Brandes, con motivo de la fiesta de Nuestra Señora de Aparecida, Reina y Patrona de Brasil, organizada por el Santuario Nacional, que es visitado por miles de devotos que acuden a honrar a la Virgen María, especialmente el 12 de octubre, día de la fiesta. El Arzobispado ha publicado una aclaración sobre la anunciada visita del presidente saliente de la República y candidato a la reelección, Jair Bolsonaro. Según el texto, al igual que otros años, el Santuario acogerá la visita del Jefe de Estado, disponiendo todo lo necesario y tratando de garantizar, al mismo tiempo, la visita habitual de los peregrinos.
Sin embargo, aclara el comunicado, la participación de Jair Bolsonaro en el rezo del Rosario que tendrá lugar en la ciudad de Aparecida, no forma parte de las festividades organizadas bajo la supervisión del Arzobispado de Aparecida, «la iniciativa es de un grupo independiente, que no tiene ninguna relación con el Santuario Nacional y su programación para este día».
