(EP/InfoCatólica) "Esta ley se sitúa al margen de la razón y elude toda evidencia científica sobre la vida humana", aseguró el presidente de Profesionales por la Ética, Jaime Urcelay. Así, criticó que el Gobierno "manipula el lenguaje" a través de un proyecto que "no ha sido socialmente reclamado" y recordó que el Tribunal Constitucional afirma en su jurisprudencia que "la vida humana es un devenir que comienza con la gestación y que finaliza con la muerte".
En este sentido, el manifiesto recalca que la práctica del aborto basada en una decisión exclusiva del gestante "contradice la doctrina de la Constitución, que sostiene que los derechos de la mujer no pueden tener primacía absoluta sobre la vida del gestante". Para Urcelay, esto "contradice el ordenamiento constitucional y deja al margen del debate los derechos del no-nacido".
Por su parte, la portavoz de Derecho a Vivir, Gádor Joya, denunció que la petición de las clínicas abortistas de prohibir las concentraciones de las organizaciones provida ante sus centros "constituye una muestra más del totalitarismo reinante". Asimismo, destacó que el lema feminista 'nosotras parimos, nosotras decidimos' "ha quedado desfasado" y que ya "no tiene sentido".
Otro de los puntos principales que recoge el texto presentado afirma que el proyecto de ley "puede poner en cuestión los derechos fundamentales de los profesionales sanitarios". En esta línea, los ponentes acusaron al Ejecutivo de no tener en cuenta al sector sanitario ni al científico y remarcaron "la exigencia constitucional de respetar la objeción de conciencia de estos profesionales ante cualquier tipo de aborto".
La píldora poscoital, "no sin receta"
Preguntados acerca de la venta en las farmacias de la píldora poscoital, los ponentes coincidieron al asegurar que su naturaleza química y de componente hormonal "hace que no puede ser expedida sin prescripción médica" y alertaron de que en numerosos casos tiene un efecto abortivo. Por ello, pidieron al Gobierno que reconsidere la medida y la contemple "no sólo desde un punto de vista político, sino también social y ético".
Finalmente, exigieron la retirada de un proyecto "que no ha sido objeto de un debate digno de tal nombre" y que, según criticaron, "no tiene en cuenta los verdaderos derechos de la mujer". Además, recordaron que "no ha recibido ningún parecer favorable fundado en el Derecho" y advirtieron de que se seguirán concentrando, como vienen haciendo cada semana, "en defensa de la vida humana".