(LifeNews/InfoCatólica) Operación Rescate ha obtenido una impresión de Despacho Asistido por Ordenador (CAD) del Departamento de Policía de Reno, Nevada, que señala que la política de Planned Parenthood es no notificar a los padres cuando una hija menor de edad es víctima de un delito sexual.
La llamada al 911 fue realizada el 2 de agosto de 2021 por Katherine Schopp, que es enfermera practicante de Planned Parenthood Mar Monte, la filial que gestiona el centro de abortos de Reno Planned Parenthood. Schopp informó de que una menor de entre 10 y 17 años había sido víctima de una agresión sexual por parte de un hombre adulto.
El CAD declaró, en el típico estilo de los 911, que «la paciente está teniendo relaciones sexuales con un varón de 18 años. No se sabe dónde está ocurriendo, salvo en Reno, la joven no quiere proporcionar el nombre del varón ni su ubicación actual a los empleados, por lo demás la joven está cooperando».
El CAD continúa diciendo que Planned Parenthood «se puso en contacto» con los Servicios de Protección Infantil para hacer un informe antes de notificar a la policía.
Sin embargo, la única persona que no fue notificada de la victimización sexual de la menor fue su madre, quien también se encontraba en las instalaciones de Planned Parenthood en el momento de la llamada.
«La madre de la menor está en el lugar, pero no sabe que la policía de caminos está respondiendo y va en contra de la política de Planned Parenthood de no notificar a los padres», declaró el CAD.
Se cree que esta política de «no avisar a los padres» no se limita a las instalaciones de Planned Parenthood Mar Monte, sino que es probablemente sistémica en toda la red de Planned Parenthood a nivel nacional.
«Debería perturbar a todos los padres saber que, si su hijo menor de edad es víctima de un delito sexual, los empleados de Planned Parenthood les ocultarán esa información», dijo Troy Newman, presidente de Operation Rescue. «Este es otro intento de fracturar la familia y mantener a los padres en la oscuridad sobre asuntos relacionados con la salud y el bienestar de sus hijos. Es inconcebible que puedan tener a la madre sentada allí mismo en la oficina de Planned Parenthood y no le informen de que su hija menor de edad ha sido agredida sexualmente».
En Nevada, un niño debe tener al menos 16 años para dar legalmente su consentimiento a una conducta sexual, lo que significa que la menor implicada en el incidente de agosto de 2021 tenía quince años o menos, quizá hasta 10 años. Nevada tampoco tiene exenciones de «edad cercana». Cualquier contacto sexual con una niña de 15 años o menos es procesable como estupro.
«Todos los padres deberían tener derecho a saber cuándo su hijo es víctima de un delito, especialmente de un delito sexual», dijo Newman. «Ese tipo de delitos puede tener un efecto devastador en los niños, que necesitan el amor y el apoyo de sus padres para superar esa prueba».
