(ABC/InfoCatólica) Se trata del Colegio Público César Barrios de Lepe, en Huelva, y su director, Joaquín Hernández, explicó en entrevistas a los medios que tomaron la decisión después de enterarse que un menor del colegio «estaba sufriendo insultos y algunas vejaciones por parte de otros compañeros». Al hablar con el pequeño, este confesó que no sufría maltratos solo en el colegio sino en su vida diaria y que, dada esta situación, «llevaba un año sin salir a la calle por las tardes».
Asimismo, Hernández ha afirmado que esta acción es el inicio de muchas, y que se han puesto en contacto con asociaciones y el Ayuntamiento de Lepe para la creación de un nuevo proyecto, al que se unirán todos los centros de la localidad.
De este modo, César Barrios, director del CEIP, recalcó la intención de estas iniciativas, que es «crear conciencia en las comunidades para que no sucedan nuevamente situaciones como las de este niño».
Respecto al niño acosado de 11 años, Hernández explicó que es «tímido» pero que acude al colegio con normalidad y, cuando le consultaron cómo se sentía, dijo que estaba de acuerdo con la iniciativa de los profesores y que «sabía que había nacido niño, pero que se siente y quiere ser niña».
Hernández informó también que los acosos desaparecieron desde el inicio de la campaña y que, cuando la jefa de estudios conversó con los niños sobre lo que sucedía, notó que no se trataba de «un acoso continuado» y que muchos de ellos no eran conscientes del verdadero daño que causaban, por lo que «muchos se desplomaron, lloraron y se dieron cuenta del daño» y, posteriormente, muchos de ellos se unieron a la campaña, acudiendo también con las uñas pintadas.
Al finalizar, recalcó que el trabajo debe hacerse a nivel local, puesto que, aunque «se haya acabo en el centro, si cuando salga a la calle sigue con los mismos problemas, esto no sirve de nada».
Estela Villalba, delegada de Educación de la Junta en Huelva, ha expresado su «completo apoyo» a esta iniciativa el viernes pasado, y recordado que tenemos que «avanzar en que los niños acepten la diversidad como un rasgo más que enriquece la sociedad, aceptando todas las diferencias y eliminado todo tipo de fobias hacia lo diferente».
El director del Colegio no explicó cómo tipo de muestras de «solidaridad» que no están basadas en la aceptación de la realidad podían solucionar los problemas del alumno de raíz.
Tampoco explicó qué opina de que este tipo de soluciones, cuando se acompañan de tratamientos hormonales terminan afectando gravemente la salud de los menores. En algunos países, como en el Reino Unido, ya este tipo de tratamientos no es opcional.