Dos monjes benedictinos alemanes publican un libro para orientar a hombres que quieren entrar en una comunidad religiosa
Fr. Maximiliano, Fr. Melchor y Fr Silvester en el jardín del monasterio benedictino de de Memlebe (Alemania) ©Katolisch.de

«Uno de los objetivos es dar una imagen realista de la vida religiosa»

Dos monjes benedictinos alemanes publican un libro para orientar a hombres que quieren entrar en una comunidad religiosa

Dos monjes benedictinos alemanes han escrito un libro para orientar a los hombres que están discerniendo la posibilidad de consagrarse a Dios en una orden o congregación religiosa. Nuestro objetivo es que usted descubra su vocación, no que una orden concreta gane un nuevo miembro», aseguran.

(Katolisch/InfoCatólica) «Himmelsstürmer» es el título del libro de Fray Thomas Fässler y Fray Philipp Steiner es excepcionalmente diferente.publicado recientemente por la editorial de Friburgo Herder, probablemente se clasifique en la sección de «ayuda para la vida» en la mayoría de las librerías, sobre todo porque los dos autores mismos subrayan que su libro pretende precisamente eso. Sin embargo, no dan respuestas aparentemente sencillas a preguntas complejas. Al contrario: Fässler y Steiner admiten incluso que no tienen respuestas a muchas de las cuestiones tratadas en su obra de 208 páginas, sino que el lector debe buscarlas por sí mismo.

«Guía vocacional de la vida religiosa».

Con «Himmelsstürmer», Fässler y Steiner han escrito una «guía vocacional de la vida religiosa», como reza el subtítulo. Los dos autores, que han vivido durante muchos años como monjes benedictinos en el monasterio suizo de Einsiedeln, quieren orientar con su libro a los hombres -sí, la obra se dirige explícitamente a los hombres- que están pensando en entrar en una comunidad religiosa y vivir en un monasterio. El libro pretende ayudar a los lectores que se lo están planteando a conocerse mejor a sí mismos y a descubrir lo que realmente quieren.

Al hacerlo, Fässler y Steiner subrayaron varias veces que su objetivo no es persuadir a los lectores para que se unan a una orden que en realidad podría no ser la adecuada para ellos: «Nuestro objetivo es que usted descubra su vocación, no que una orden concreta gane un nuevo miembro», escribieron los autores, dirigiéndose directamente al lector individual. Tampoco quieren prometer el azul del cielo ni engañar a los lectores para que se crean algo. «Por el contrario, uno de los objetivos de este libro es dar una imagen realista de la vida religiosa para aclarar algunas de sus preguntas sobre ella», dicen los dos benedictinos. Al fin y al cabo, un conocimiento profundo es un requisito importante para tomar una buena decisión. Sin embargo, el paso a una comunidad religiosa sigue siendo un riesgo. «Pero eso también es bueno», escriben Fässler y Steiner.

El libro se divide en diez capítulos y un apéndice más extenso. Tras el prefacio, en el que los dos autores también relatan con más detalle sus propias historias vocacionales, el primer capítulo sustantivo aborda la cuestión de la vocación y cómo encontrarla. «Cada uno de nosotros sabe lo esencial, incluso inevitable, que es la cuestión de la propia trayectoria vital. Por eso es importante tomarse el tiempo suficiente para ello y ser completamente sincero con uno mismo. Al fin y al cabo, se trata nada menos que de tu vida», subrayan los autores sobre la importancia de esta cuestión. Para poder responderla, Fässler y Steiner recomiendan a los lectores que realicen una seria autoevaluación. Preguntas como «¿qué me interesa?», «¿en qué soy especialmente bueno?» o «¿cuándo soy feliz?», así como tratar las supuestas objeciones a entrar en una orden religiosa, deberían ayudar.

El libro también aborda con detalle las dificultades a las que se enfrentan hoy en día las personas que están pensando en ingresar en la Orden. El cuarto capítulo es un ejemplo de ello. Bajo el título «¿Quién entra hoy en una orden religiosa? - Siete direcciones desde las que sentirás el viento en contra», Fässler y Steiner despejan tópicos y prejuicios que circulan sobre la Iglesia en general y la vida en un monasterio en particular. En cuanto al tópico de que como monje hay que vivir encerrado y aislado del mundo tras los muros del monasterio, los autores escriben, por ejemplo: «Si la vida religiosa fuera realmente lo que mucha gente imagina que es, tú y yo seguramente nunca la habríamos elegido. Después de todo, ¿quién querría pasar todo el día en una pequeña cámara sin ventanas sin hacer nada más que rezar el rosario?»

El capítulo «Siete cosas que hay que hacer y no hacer cuando se piensa en entrar en una orden religiosa» apunta en una dirección similar. Aquí, Fässler y Steiner enumeran en primer lugar siete puntos que las personas interesadas deberían hacer definitivamente para averiguar si están realmente llamadas a una vida en un monasterio. Entre otras cosas, se aconseja a los lectores que configuren su propia vida a partir de una relación con Dios, que busquen un compañero espiritual y que hablen con sus padres y amigos cercanos. Por otro lado, los interesados deben evitar nuevas relaciones («Si estás considerando seriamente entrar en la Orden, no debes iniciar una relación junto a ella. Esto sería cualquier cosa menos honesto y justo») y la búsqueda de la comunidad perfecta («No intentes buscar sin cesar una comunidad religiosa perfecta; ¡no la encontrarás en el resto de tu vida!»).

Pasos concretos

Por último, en otro capítulo, se presentan diferentes comunidades religiosas, sus características especiales, así como las rutinas diarias típicas de un monasterio. Además, los autores explican a los lectores los pasos concretos para entrar en una orden religiosa: desde el primer contacto hasta la solicitud de admisión, el ingreso y los años siguientes hasta la profesión solemne, con la que los religiosos suelen decidirse finalmente a vivir en un monasterio después de unos cinco años. Por último, el libro se completa -de forma similar a los capítulos individuales anteriores, cada uno de los cuales tenía una oración al final- con un apéndice espiritual con meditaciones sobre historias bíblicas de vocación, sugerencias de oración para el rosario y una «Invitación a una vida reconciliada», en la que se invita a los lectores a esforzarse por la perfección cristiana incluso antes de entrar posiblemente en la orden.

 

 

7 comentarios

Ramón Montaud
El tema de la vocación religiosa es muy simple, Dios llama y uno responde.
Cualquier ayuda para descubrir la vocación religiosa será bienvenida.
En la práctica responder a la llamada es una situación complejísima.
Los autores del libro recomienda que busquen un compañero espiritual o lo que yo conozco un guía espiritual. Es esencial está ayuda.
4/11/21 12:06 PM
Roberto
Ramòn Montaud

Sinceramente, no veo que eso de la vocación religiosa (ni ninguna) sea tan simple; de hecho hay que estar años de discernimiento en seminarios o noviciados, y aún asi............. a no ser que uno tenga revelaciones o locuciones privadas donde todo está muy claro.
Dios no llama de una forma inmediata, sino a través de muchas mediaciones, que también hay que discernir que sea válidas.
4/11/21 2:46 PM
Verónica
Qué buena iniciativa de estos padres alemanes. Llena una necesidad de orientación en un ámbito donde no es fácil hallar respuestas.
4/11/21 9:18 PM
Adamastor
Pues yo creo que vocaciones, lo que se dice vocaciones hay ahora tantas o hasta más que nunca. Lo que pasa es que antes había quienes iban al seminario o a un convento por otras razones, y, por lo menos en el llamado primer mundo, ya no existen.
4/11/21 11:47 PM
Chico
San Alfonso Maria de Ligorio escribe que nos llenariamos de admiración si viéramos la cantidad de Bautizados llamados a la V R.
5/11/21 2:13 AM
Marta de Jesús
(«No intentes buscar sin cesar una comunidad religiosa perfecta; ¡no la encontrarás en el resto de tu vida!»).
Me ha interpelado esta frase por tema personal.

Esos religiosos en mis oraciones, los de verdadera vocación.

Resto fiel 💓✝️🕊️🛐
5/11/21 8:49 AM
Marta de Jesús
Creo que tenemos las vocaciones justas y necesarias para la Fe que hay. Si esa Fe estuviera bien atendida, de ahí se pasaría a más cristianos, con el aumento proporcional de las vocaciones. Como les pasó a los primeros cristianos. Nosotros vivimos la experiencia inversa, una crisis de Fe brutal desde hace siglos y se está percibiendo. Lo que pasa es que hoy muchos sacerdotes han de cubrir puestos para suministrar tradiciones a los neopaganos orientalizados del llamado 'cristianismo cultural'. No saben lo que son los sacramentos y no los viven como tales en gran número. Está permitido por Dios, con el tiempo veremos a dónde nos lleva este tiempo.
Los que dicen que hay muchas vocaciones perdidas entre los bautizados, por esa regla de tres, también habría muchos cristianos de verdad perdidos entre los bautizados y que viven como paganos, con su consumismo, hedonismo, poco respeto a la vida, al matrimonio, etc. También es cierto, como dice Ada, que en otras épocas la cristiandad tiró de imaginación para cubrir puestos, no siempre asentándose en una vocación real y bien meditada.
5/11/21 9:04 AM

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