(CNA/InfoCatólica) Comentando el arresto de Gianluigi Torzi el 5 de junio, el ex-sustituto de la Secretaría de Estado dijo que no conocía al empresario italiano acusado por los fiscales del Vaticano de fraude, extorsión, lavado de dinero y otros crímenes. Becciu también defendió la inversión de cientos de millones de euros en la propiedad londinense de 60 Sloane Avenue, y aseguró que sigue pensando que de daba una buena relación calidad-precio.
«No conozco a Torzi, ya no era un sostituto cuando ocurrieron los hechos que se le atribuyen [a Torzi]», dijo Mons. Becciu a la agencia de noticias Adnkronos tras el anuncio del arresto de Torzi.
Antes de ser nombrado cardenal en junio de 2018, Becciu era Sustituto de la Secretaría de Estado del Vaticano -o sea, el nº 2 tras el cardenal Parolin-, cuando se invirtieron cientos de millones de euros en edificios de Londres entre 2014 y 2018. Torzi actuó como corredor, -intermediario que ganaba comisiones- para la Secretaría de Estado.
Un reportaje de Adnkronos apoya la tesis de Becciu, que insiste en que la participación de Torzi en el proyecto se produjo después de que el Papa le nombrara Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos en el verano de 2018..
«¿Está seguro de que ese edificio era un desperdicio? No hay duda de que si se vende ahora será por el doble de lo que costó - 148 millones de euros- cuando yo estaba allí. Si ha habidto otros gastos adicionales entonces pregunte quién es el reponsable porque yo ya no estaba allí»
El cardenal descartó la idea de que el arresto de Torzi causaría un «terremoto» más amplio en la curia, tildándola de «fantasía periodística».
La entrevista de Becciu concluyó con su declaración de que «[Torzi] tendrá que responder por un crimen específico del que sólo él es responsable. Y el Vaticano continuará como antes»
