(Catholic Herald/InfoCatólica) Si bien la medida no tendría consecuencias legales, asentaría que la pornografía perpetúa un «ambiente sexualmente tóxico que daña todas las áreas de nuestra sociedad».
La resolución fue presentada el 7 de febrero por la congresista estatal republicana Michelle Udall. La medida será votada por toda la Cámara de Reresentantes de Arizona.
«Al igual que la industria tabacalera, la industria de la pornografía ha creado una crisis de salud pública», dijo Udall a los legisladores. «La pornografía se usa de manera generalizada, incluso en menores».
Dan Oakes, terapeuta que ayuda a pacientes con adicción a la pornografía, testificó en apoyo de la resolución. Expresó la esperanza de que eso «abriría la puerta» a futuras resoluciones con mayor importancia legal.
La resolución propuesta destaca los riesgos de la pornografía, destacando sus efectos adictivos, nefastas consecuencias sexuales e influencia en la juventud.
«Los posibles efectos perjudiciales para los usuarios de pornografía incluyen comportamientos sexuales tóxicos, enfermedades emocionales, mentales y físicas y dificultad para formar o mantener relaciones íntimas».
La medida establece que, debido al avance de la tecnología y de Internet, los niños han podido acceder al material clasificado X con facilidad. También advierte que la pornografía puede reemplazar la educación sexual adecuada, dando forma a la comprensión de los jóvenes de lo que es normal de una manera desordenada.
«Los niños están expuestos a la pornografía a un ritmo alarmante, lo que lleva a una baja autoestima, trastornos de la alimentación y un aumento de la actividad sexual desordenada a edades cada vez más jóvenes», dice la resolución.
«La pornografía normaliza la violencia y el abuso de mujeres y niños al tratarlos como objetos, aumentando la demanda de tráfico sexual, prostitución y pornografía infantil».
Algunos congresistas demócratas rechazaron el proyecto de ley, argumentando que no hay pruebas suficientes para justificar que la pornografía sea catalogada como una crisis de salud pública, y sugirieron que los legisladores se centren en ampliar los programas de educación sexual.
«Si realmente queremos analizar esto, deberíamos comenzar con la educación. Es vergonzoso que seamos uno de los estados que no tiene educación sexual médicamente precisa. El testimonio presentado intentaba culpar de todo a la pornografía. Eso es un parte del problema», dijo la representante demócrata Pamela Hannley, de acuerdo con la CNN.
La pornografía ya ha sido declarada una crisis de salud pública en Arkansas, Florida, Idaho, Kansas, Kentucky, Louisiana, Pennsylvania, Dakota del Sur, Tennessee, Utah y Virginia.