(Ecclesia Digital/InfoCatólica) Deseando «que cese cualquier forma de odio y de violencia» el Papa ha devuelto al centro de la escena internacional los ataques a las comunidades cristianas en Nigeria y en la República Centroafricana. Al finalizar la audiencia general del miércoles 9 de agosto el Pontífice hizo un nuevo y sentido llamamiento por «nuestros hermanos y hermanas» de los dos países de África, exhortando a los peregrinos presentes en el Aula Pablo VI a orar por ellos.
«Me he quedado profundamente dolido –declaró– por la masacre sucedida el domingo pasado en Nigeria, dentro de una iglesia, donde fueron asesinadas personas inocentes». De aquí el deseo de que «no se repitan más crímenes tan vergonzosos, perpetrados en lugares de culto, donde los fieles se reúnen para rezar». Y desgraciadamente –añadió al texto preparado – esta mañana ha llegado la noticia de violencias homicidas en la República Centroafricana».
El domingo pasado un hombre armado atacó una iglesia católica en Nigeria dejando un saldo final de 11 personas fallecidas y 18 heridas. El acontecimiento ocurrió durante la Misa dominical en la iglesia St. Philips Ozubulu, en Ekwusigo, área del gobierno local del estado de Anambra, al este de Nigeria.