(Zenit/InfoCatólica) En el avión el Pontífice saludó brevemente a los periodistas y le agradeció por el trabajo en este viaje de «unidad y hermandad»:
«La cobertura que darán ayudará a mucha gente a saber de que se habló, porque hay gente que nos sigue. Este viaje tiene una expectativa especial porque hecho por el presidente por el patriarca Tawadros II, por el patriarca católico copto y por el gran imam de Al-Azhar. Es un viaje de unidad y de hermandad. Les agradezco por vuestro trabajo porque en estos casi dos días será muy intensoi. Los saludó después uno a uno».
Tras aterrizar en El Cairo, el santo padre Francisco se dirigió al palacio presidencial en el barrio de Heliópolis. Se trata del palacio Qars al-Orouba, que en las dos guerras mundiales fue utilizado como hospital y posteriormente también como hotel.
El presidente Abdel-Fattah Al-Sisi, militar de 62 años, salió a su encuentro. Después de los himnos y honores militares entraron el el edificio, en donde el presidente saludó a la delegación vaticana. Después fue la conversación privada , seguida por un intercambio de reglados.
El regalo del Papa es una medalla que representa la fuga de la Sagrada Familia a Egipto. En el fondo se ven elementos característicos del país: palmas, pirámides y sobre el lado derecho El Nilo. La obra de Daniela Longo se inspira en una ícono copto.