(Fides) En la catedral de Notre-Dame de la Paix de Yamoussoukro, durante la peregrinación nacional celebrada en el marco del Jubileo de la Misericordia, el prelado ha añadido que «para reconciliarse es necesario ser libre, para ser libres, hay que tener la posibilidad de moverse sin sentir angustia».
Costa de Marfil ha sufrido una década de crisis política militar, entre 2002 y 2011, que terminó con el enfrentamiento entre el actual presidente Alassane Ouattara y el ex presidente Laurent Gbagbo, que se negó a reconocer la victoria del primero en las elecciones presidenciales de noviembre de 2010. El enfrentamiento político se ha convertido en una confrontación militar entre los partidarios de ambos lados, con más de 3.000 muertes en cinco meses. Gbagbo fue detenido cuando las tropas de la ONU y las tropas francesas asaltaron el palacio presidencial donde se había atrincherado.
Varios partidarios de Gbagbo han sido detenidos por la violencia posterior a las elecciones, mientras que ninguno de los seguidor del actual presidente ha sido conducido ante la justicia por los actos violentos cometidos, dado que, según los observadores independientes, ninguna de las partes puede considerarse inocente de lo ocurrido en ese período.