(Servimedia/InfoCatólica) El padre Eduardo Robles Gil, nuevo director general de la Legión de Cristo, considera que «los medios no han difundido una buena imagen ni de la Iglesia ni del sacerdocio, ni de nosotros en particular. Y eso, definitivamente, no ayuda» en la nueva etapa que emprende la congregación. Sin embargo, añadió: «Es parte del desafío».
En declaraciones a Servimedia, el nuevo director -que fue confirmado por la Santa Sede el pasado 6 de febrero- recordó su compromiso en la protección de la infancia, como refleja el documento que los padres capitulares firmaron recientemente sobre la figura de su fundador, Marcial Maciel, en el que pedían perdón por los casos de abusos y otros escándalos protagonizados por miembros de la congregación.
«Queremos tomar en serio el daño que hemos podido hacer como institución. Solamente con la claridad y con la caridad se puede volver a tener confianza», insistió.
Ese documento, añadió, “tiene que aplicarse”, especialmente, como les pidió el Papa, en lo referente a la revisión del carisma, el ejercicio de la autoridad y la formación de sus religiosos. “En el capítulo hemos hecho la primera parte, que se sintetiza en las constituciones en los primeros capítulos. Y nos queda como tarea el ejercicio de la autoridad y la formación de nuestros religiosos. Eso no se acaba con el capítulo ni con las constituciones”, agregó.
Robles Gil también destacó el “punto fuerte” con el que cuentan la congregación y el Regnum Christi en esta nueva etapa de renovación impulsada desde el Vaticano: “Son los hombres y las mujeres” que la forman y que, “a pesar de este momento de crisis, quieren ser sacerdotes, quieren ser legionarios y quieren trabajar por la Iglesia”.
El reto de la unidad
El máximo responsable de la congregación también apuntó, como “reto muy importante”, el de la unidad interna: “En estos momentos hay hermanos nuestros que han salido y eso hace ver que había un cierto malestar. Todavía hay algo de malestar”.
Y prosiguió que, como miembros de la Iglesia católica, también tienen como objetivos la nueva evangelización, salir a las “periferias existenciales de las personas” como recomienda Francisco y el “desafío” de las vocaciones en un momento en el que también la Iglesia “ha perdido credibilidad”.
“Hace unos días el Evangelio decía que JesuCristo llegó a Galilea y que sintió pena porque vio que estaban como ovejas sin pastor. Pues esa es una descripción de lo que puede ser hoy la Iglesia. Entonces es un gran desafío”, apostilló el sacerdote legionario.
También destacó que, una vez que termine el Capítulo General, el próximo 25 de febrero en Roma, la Legión de Cristo iniciará esta nueva etapa apoyándose en otros puntos fuertes con los que cuenta. Estos son, según Eduardo Robles Gil, la fidelidad al Papa, una formación “muy sólida”, y que hay “miles de miembros del movimiento Regnum Christi que quieren trabajar en la evangelización”. De ahí que el sacerdote mexicano se felicite por el clima de “entusiasmo” y “optimismo” con que afrontan el futuro, aunque teme que la debilidad sea “no salir suficientemente decididos”.
Constituciones
Una vez que concluya el capítulo se presentarán a la Santa Sede los textos definitivos por los que se rigen los legionarios, para los que, según su nuevo director, se están aplicando las recomendaciones del Vaticano de volver a los principios de la congregación.
“Teníamos unas constituciones de 1994 que tenían 880 números. Ahora estamos proponiendo una cuarta parte, más o menos, de los números. Es mucho más sintética porque son textos redactados con un estilo jurídico; antes tenían un estilo más motivacional y espiritual. Se trata de ir a lo esencial. Y de alguna manera, al ir a lo esencial nos volvemos más flexibles, porque no está tan reglamentado todo”, añadió.
Por eso, el padre Eduardo Robles Gil considera que el capítulo “no es sólo un punto álgido”, pues “de alguna manera es también el punto final para tener un nuevo inicio”. Y ese nuevo inicio será como “buscar la unidad sinfónica”: “Hay diversidad, pero hay armonía y esto nos da mucha confianza”.
Según explicó a Servimedia, esa unidad se refleja en el “consenso” que se está demostrando estos días en Roma, ciudad desde donde el sacerdote coordinará los nueve territorios que configuran la Legión (“todos muy activos”, y que le han hecho llegar “muchísimas propuestas”) y a los sacerdotes que forman parte del consejo que también se ha elegido en el capítulo, entre los que se encuentran cuatro sacerdotes españoles.
