(Protestante Digital/Reuters/Charisma news) Ed Buckner fue quien tuvo la idea, después de pasar sus vacaciones alquilando una cabaña en un parque estatal de Georgia. Encontró hasta nueve Biblias en el albergue, lo que le parecía una ofensa.
«Yo pedí desde el principio que en los parques estatales no haya ningún tipo de literatura religiosa», dijo Buckner, ex presidente del grupo de Ateos Estadounidenses. Por ello reclamó a las autoridades que retirasen los ejemplares bíblicos.
¿Vulnera la Constitución?
Buckner puso la reclamación, pero el gobernador Nathan Deal respondió que «una Biblia en el cajón de la mesita de noche no me parece una intromisión del Estado en un asunto religioso», porque las obras eran donadas. Además dijo que cualquier grupo religioso podía donar literatura.
En respuesta, los ateos estadounidenses dijeron que donarían libros populares sobre ateísmo, como 'Dios no es bueno', de Christopher Hitchens, o 'The God Delusion' de Richard Dawkins.
«Los ateos estadounidenses no creen que el Estado de Georgia debe estar poniendo Biblias o libros ateos en las cabinas de parques estatales, sin embargo, si el Estado va a permitirlo, estaremos encantados de ofrecer nuestros materiales», dijo el actual presidente del grupo, David Silverman.
El portavoz del Gobierno Brian Robinson dijo que redactarán un protocolo sobre qué hacer con la literatura donada, pero que este aún está en proceso.
Buckner, de 67 años, dijo que no va a presentar una demanda contra Georgia por motivos constitucionales si el Estado puede desarrollar una política que trate a todos los grupos por igual. Pero él dijo que no habría muchos problemas prácticos y políticos para la creación de una política de «todo incluido».
«Creo que se han metido en un lío y ahora lo tendrán difícil para salir», concluyó el ateo militante.