(Zenit/InfoCatólica*) En la ordenación episcopal del nuevo secretario de la Congregración para la Doctrina de la Fe, Monseñor Luis Francisco Ladaria Ferrer, S.I, el Cardenal Secretario de Estado, monseñor Tarsicio Bertone, afirmó que los obispos tienen una tarea siempre actual: hacer que su enseñanza, fundada en el Señor resucitado, llegue a la inteligencia y al corazón de la gente.
Monseñor Ladaria Ferrer, hasta ahora profesor en la Universidad Pontificia Gregoriana y secretario general de la Comisión Teológica Internacional, fue ordenado obispo junto a monseñor Ambrogio Spreafico, nuevo obispo coadjutor de la diócesis italiana de Frosinone-Veroli-Ferentino, hasta ahora rector de la Pontificia Universidad Urbaniana de Roma.
Durante la ordenación, celebrada en la tarde del sábado 26 de julio, en la basílica papal de San Juan de Letrán, el secretario de Estado ofreció una reflexión sobre la triple misión de maestro, pastor y sacerdote, ejercida por el mismo Cristo y continuada a través de los apóstoles y de sus sucesores.
"Si evangelizar es la misión de todo cristiano, lo es aún más para los pastores del Pueblo de Dios", dijo el cardenal Bertone, recordando una reciente catequesis de Benedicto XVI en la que explicaba que la palabra obispo, cuya raíz griega es epìscopos, indica la tarea de quien "tiene una visión desde lo alto, que mira con el corazón".
«Mirar desde lo alto --añadió el secretario de Estado-- es una imagen que recuerda las alturas de la Sagrada Escritura, ese alimento de vida que ofrece la palabra de Dios. Mirar con el corazón significa mirar al centro de la persona humana; el hombre entra en relación con todo lo que existe con el corazón".
Participaron en la catedral del Roma familiares y hermanos en religión de los dos nuevos obispos.
Monseñor Ladaria, quien entró en la Compañía de Jesús en 1966, ha sido profesor de teología dogmática en la Universidad Pontificia de Comillas en Madrid y después en la Gregoriana, de la que fue vicerrector de 1986 a 1994.
Deberá ejercer su servicio como secretario de la Congregación para la Doctrina de la Fe, dijo el cardenal Bertone, "con esa competencia que todos le reconocen y con esa fidelidad a Cristo, a la Iglesia y al sucesor de Pedro que es típica del fundador del instituto religioso al que pertenece", la Compañía de Jesús, fundada por San Ignacio de Loyola.
