(EP) Correa considera "un grave retroceso y pérdida de derechos" los recortes en materia laboral, de salud y educación y, concretamente, rechaza el copago farmacéutico, la subida de los transportes públicos, de los combustibles, la reducción del número de becas en Educación, el incremento de la ratio por aula y la subida de los precios de las matrículas universitarias, entre otros.
Además, ha advertido de que las familias más afectadas por la crisis son "aquellas que ya se encontraban en riesgo de exclusión social por sus mayores cargas familiares, escasos recursos económicos y falta de redes de apoyo" como las familias monoparentales, familias con personas dependientes o con discapacidad, familias inmigrantes, con personas mayores o con mujeres víctimas de violencia de género.
Contradición entre el discurso y la práctica
Por su parte, el presidente del Instituto de Política Familiar (IPF), Eduardo Hertfelder, ha pedido al Gobierno menos "contradicción" entre su discurso teórico de apoyo a la familia y su política en la práctica que, a su juicio, es de "total abandono" a la misma.
Según ha indicado, en la actualidad, España es "el país de la Unión Europea que menos ayuda a la familia" y ha denunciado que esta situación sumada a los recortes en las ayudas, se produce precisamente en una época de crisis en la que las familias son "las que más ayudas necesitan".
Igualmente, Hertfelder ha reclamado que mejore la conciliación laboral pues, según ha apuntado, España tiene unos horarios "muy extensos" y "no racionales" en comparación con el resto de países europeos, que no permiten a los padres atender a su familia. Además, según ha añadido, a esto se suma que, debido a la crisis, "hay que trabajar más y cobrar menos".
Legislación injusta con la familia
En la misma línea, el presidente del Foro de la Familia, Benigno Blanco, ha destacado que España tiene una legislación "injusta con la familia" y ha subrayado que, sin apoyo a la familia, "es imposible que España avance hacia una sociedad justa y solidaria".
Así, reclama al Gobierno que "priorice" la política familiar "si quiere superar la crisis y que España no se enfangue en la crisis demográfica, la exclusión social y el desamparo de los jóvenes parados de larga duración, los ancianos y los dependientes".
"Sin familias fuertes y estables no es posible afrontar los problemas de fondo de nuestra sociedad vinculados a la crisis demográfica como el de las pensiones, la pobreza femenina o los niños privados de un ambiente de acogida amoroso", ha concluido.