(El Debate/InfoCatólica) Lo que parecía una imparable penetración de la foránea Halloween parece haberse detenido. Probablemente impulsada por las celebraciones en los colegios, en la edad adulta no termina de tomar cuerpo pasado el tiempo.
Una investigación reciente del Observatorio de los Servicios Funerarios, elaborada por Sigma Dos y publicada este mes, revela información reveladora sobre el limitado arraigo de Halloween en España y su tendencia descendente. En contraposición, se observa una clara inclinación de los ciudadanos hacia las costumbres autóctonas: la conmemoración del Día de Todos los Santos, los encuentros familiares y las visitas a los difuntos en los camposantos.
Los resultados del estudio, según informa El Debate, muestran un creciente rechazo hacia esta celebración foránea. A pesar de la proliferación de calabazas, vestimentas tenebrosas y ornamentación macabra, esta festividad resulta progresivamente menos llamativa para la ciudadanía.
Halloween en retroceso
La investigación indica que el 50,9% declara no participar jamás en esta celebración, comparado con el 42,8% del ejercicio precedente, lo que supone un incremento del 8,1 puntos en la falta de interés.
Paralelamente, el reducido porcentaje que sí participa en esta festividad cada año también experimenta un descenso. En 2025, únicamente el 11,1% manifiesta celebrarla anualmente, en contraste con el 15,6% documentado en 2024.
La investigación completa expone la valoración ciudadana respecto a esta jornada. Solamente el 26,9% de los consultados mantiene una visión favorable de Halloween, mientras que en 2024 esta proporción era superior, alcanzando el 33,5%. La mayoría expresa posturas indiferentes como «no me interesa en absoluto» o adversas «no me gusta y no la celebro».
Aumenta la indiferencia y el rechazo
En 2025 se ha intensificado la opinión de que España no debería adoptar Halloween. El respaldo a la preservación de las costumbres nacionales asciende al 39,8%, frente al 31,3% del año precedente. La mayoría de los españoles, el 51,2%, declara sentirse más vinculado con el Día de Todos los Santos.
Simultáneamente, disminuye el porcentaje de quienes valoran positivamente la festividad: solo el 23,9% considera que constituye una forma adecuada de incorporar nuevas costumbres, frente al 28,9% registrado en 2024.
Día de Todos los Santos
Para la mayoría de los consultados (42,8%), esta jornada tiene como propósito rememorar a los familiares fallecidos. Adicionalmente, un 23,4% le confiere un significado y una tradición de naturaleza religiosa. Sin embargo, una amplia mayoría (84,3%) considera que el sentido cristiano de esta festividad se está diluyendo progresivamente.
Durante esa jornada o en fechas próximas, sobresale la tradicional visita a los cementerios. Según los resultados, esta práctica es particularmente frecuente entre católicos, practicantes y personas de edad avanzada.
Aunque el 27,2% afirma no realizar actividad alguna para conmemorar este día, quienes sí lo hacen mantienen tradiciones consolidadas como visitar y depositar flores en las sepulturas (46,8%). En segundo término, destacan costumbres como consumir dulces característicos --huesos de santo o buñuelos--, encender velas o acudir a misa.
El Observatorio de los Servicios Funerarios
El Observatorio de los Servicios Funerarios, es una «plataforma asesora y consultiva de las organizaciones funerarias, además de think tank y plataforma de acción y comunicación del sector».
Como entidad, no solo acompañan y atienden a las empresas de su ámbito; constituyen también un respaldo para las familias que acuden a ellos en momentos difíciles de pérdida.
El rigor de los expertos profesionales y de las instituciones independientes que integran el observatorio posibilita reunir conocimientos y propuestas de estudio.







