(Register/InfoCatólica) El arzobispo de Chicago, el cardenal Blase Cupich, anunció la decisión de Durbin en un comunicado emitido el 30 de septiembre, revelando que el senador le informó de que «había decidido no recibir premio» durante la celebración archidiocesana Keep Hope Alive, prevista para el 5 de noviembre. Durbin iba a recibir un «Premio a la Trayectoria por su apoyo a los inmigrantes» en dicho acto.
El anuncio del cardenal Cupich pone fin a un caótico mes de septiembre, durante el cual varios obispos estadounidenses criticaron la decisión de conceder el premio a Durbin, citando su largo historial político en favor del aborto.
Varios obispos y arzobispos estadounidenses criticaron la decisión. El obispo de Springfield, Illinois, Thomas Paprocki, responsable de la diócesis a la que pertenece Durbin, describió al senador como «indigno de recibir ningún honor católico».
El Papa no se oponía
Cabe señalar que ayer mismo el papa León XIV dio su parecer sobre este asunto.
«No estoy muy familiarizado con el caso en particular. Creo que es importante analizar el trabajo general que ha realizado un senador durante, si no me equivoco, 40 años de servicio en el Senado de Estados Unidos», declaró a la prensa ayer martes en respuesta a una pregunta de EWTN News.
«Entiendo la dificultad y las tensiones. Pero creo que, como yo mismo he dicho en el pasado, es importante examinar muchos temas relacionados con las enseñanzas de la Iglesia», indicó el Pontífice.
«Quien dice estar en contra del aborto pero a favor de la pena de muerte no es realmente provida», explicó el Papa León. «Quien dice estar en contra del aborto pero a favor del trato inhumano a los inmigrantes en Estados Unidos, no sé si eso es provida».
«Son temas muy complejos y no sé si alguien tiene toda la verdad al respecto», continuó, «pero les pido, ante todo, que se respeten mutuamente y que busquemos juntos, como seres humanos y, en ese caso, como ciudadanos estadounidenses y del estado de Illinois, así como católicos, que abordemos con atención todas estas cuestiones éticas y que encontremos el camino a seguir como Iglesia. La enseñanza de la Iglesia sobre cada uno de estos temas es muy clara».
«La condena total no es el camino a seguir»
En su extenso comunicado del martes, el cardenal Cupich explicó que la decisión de conceder el premio a Durbin «se debía específicamente al reconocimiento de su singular contribución a la reforma migratoria y su inquebrantable apoyo a los inmigrantes, tan necesario en nuestros días».
El prelado afirmó que las divisiones dentro de la Iglesia católica se han «profundizado peligrosamente» a lo largo del medio siglo que lleva como sacerdote y del más de cuarto de siglo que ha ejercido como obispo.
«La tragedia de nuestra situación actual en Estados Unidos es que los católicos se sienten políticamente sin hogar», afirmó. «Las políticas de ninguno de los partidos políticos recogen plenamente la amplitud de la doctrina católica».
El purpurado se mostró contrario a una «condena total» de los políticos católicos que no cumplen con los «elementos esenciales» de la doctrina social católica. Tal crítica generalizada, dijo, «bloquea el diálogo».
«Pero los elogios y el estímulo pueden abrirlo, al pedir a sus destinatarios que consideren cómo ampliar su buena labor a otras áreas y cuestiones», señaló. «En términos más generales, un enfoque positivo puede mantener viva la esperanza de que vale la pena hablar entre nosotros —y colaborar unos con otros— para promover el bien común».
El cardenal Cupich expresó su esperanza de que la celebración Keep Hope Alive sirviera para concienciar sobre la similitud entre la defensa que hace la Iglesia de los migrantes y su defensa de «los vulnerables en la frontera entre la vida y la muerte». Argumentó, no obstante, que la Archidiócesis de Chicago no estaba «rebajando» su postura sobre el aborto.
«Los obispos católicos respondieron heroicamente cuando el derecho a la vida del no nacido fue negado por las decisiones del Tribunal Supremo de 1973», afirmó. «Ese derecho a la vida aún debe defenderse sin concesiones». Asimismo, los obispos estadounidenses «hace tiempo que dedicamos nuestra energía y recursos» a la defensa de los inmigrantes, añadió.
En su declaración, el arzobispo propuso la celebración de «encuentros sinodales» para que los católicos puedan «escucharse mutuamente con respeto sobre estos temas, permaneciendo siempre abiertos a madurar más plenamente en su identidad común como católicos». El cardenal Cupich indicó que buscaría aportaciones sobre dichos encuentros.
«Podemos avanzar si mantenemos viva la esperanza», concluyó.







