Estrella del mar
La Virgen María es invocada como “Estrella del mar” (Stella Maris). Santo Tomás de Aquino escribe: “También se llama a María Santísima Estrella del mar, porque de la misma manera que por la estrella se dirigen los navegantes al puerto, así, por medio de María se dirigen los cristianos a la gloria”.
En los Evangelios, Jesús manifiesta su poder divino dirigiéndose a los suyos caminando sobre el mar (Mc 6,49s), o calmándolo, con una palabra que lo exorciza: “¡Calla! ¡Enmudece!” (Mc 4,39s). En el libro del Apocalipsis, al describir el trono de la gloria de Dios, se menciona “una especie de mar transparente como el cristal” (Ap 4,6). Es decir, en la nueva creación desaparecerá el mar en cuanto abismo o fuerza de desorden para transformarse en símbolo de una paz luminosa en el universo renovado.