5 datos para compartir acerca del sínodo de la familia
#4. Qué podría decir el sínodo
Con lo dicho hasta ahora, debería quedar claro que el sínodo no podría decir nada que fuera en contra de la posición de la Iglesia en asuntos doctrinales, porque su función es esencialmente consultiva y pastoral.
Por muy fuertes que sean las opiniones de los padres sinodales en uno u otro sentido, ni ellas representan a la Iglesia en su conjunto (pues eso corresponde a un concilio ecuménico), ni el sínodo se considera como un órgano del magisterio de la Iglesia.
Es el Papa quien emite un pronunciamiento oficial acerca de las materias tratadas en el sínodo, a través de la referida exhortación apostólica, pero incluso esta clase de documentos eclesiales tradicionalmente han tenido un carácter esencialmente pastoral y pragmático, y no doctrinal. Para asuntos de doctrina y moral, lo habitual es que el Papa se pronuncie a través de una encíclica, tales como ordinatio sacerdotales o humanae vitae, por mencionar solo un par que son recientes.
#5. Qué podemos esperar entonces
Dado que hoy se le exige a la Iglesia mayor apertura, podemos esperar que las noticias del sínodo se filtren a los medios de comunicación. Ya estamos viendo como los cardenales que reiteran la doctrina inmutable de la Iglesia acerca de la familia y su rol en la sociedad son tildados de conservadores, y la prensa se encargará de pintarlos como un partido retrógrado pero influyente, según el análisis político secular al que están acostumbrados los periodistas.
Todas las cuestiones que interesan a la prensa son asuntos de índole doctrinal y bíblica. Tal como decía San Jerónimo, no es la política eclesial lo que impide la comunión de los que se han casado por segunda vez, sino la naturaleza del sacramento y la enseñanza clara de NSJC. Puesto que nada de ello va a cambiar, mucho menos en un sínodo, la prensa intentará explicarlo, imaginando que existe una fuerza tradicionalista, enquistada en los pasillos de la curia romana, que paralizó incluso al Papa Francisco en realizar los “cambios que evidentemente él quería”.
Puesto que la exhortación apostólica que recoge los resultado de un sínodo es una labor que consume tiempo (entre el sínodo de 2008 y la verbum domini pasaron casi dos años, y que en 2015 hay otro sínodo (ordinario, esta vez) también dedicado a la familia, es posible que el Papa decida englobar las conclusiones de ambas instancias, en un único documento. Así, podemos esperar conocer la opinión del Papa Francisco recién en un par de años más.
Desde luego, los sectores que han creado expectativas de un cambio radical en la Iglesia se verán decepcionados, y seguramente intentarán lidiar con esa decepción apelando al “espíritu del sínodo” o “la intención del Papa”, ignorando su mensaje escrito. Será nuestra labor, entonces, leer, conocer y explicar lo que diga el Papa, para que no nos demoremos 20 años en implementar su mensaje, como nos ocurrió con el Concilio Vaticano II.
Enlaces de interés
Organización y desarrollo del Sínodo de los Obispos
Synod In The Modern Church: History and Hope
Don’t worry about Cardinal Kasper’s flaky ideas
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16 comentarios
Ni siquiera voy a utilizar el argumento de "darle el dinero a los pobres", pero los pobres obispos, muchos ancianos, ¿qué necesidad tienen de ir a encerrarse lejos de su tierra, si todo está ya dicho?
Como no aparezca la Virgen con el milagro del sol transmitido 24 horas por CNN, el Sínodo no va a ningún lado, según dicen los entendidos.
Es curioso que algunos pocos se quejen de tanta especulación mediática espantosa y a la vez hablen tanto de este este tema en un medio (que es parte de "mediática") y que nada habrá de traer novedoso a la Iglesia atinada y 100% practicante que somos, aportando toda clase de posibles resultados menos, claro, cambio de puntos y comas. Me parece que tanto aquí como "allá" se especula por exactisimamente igual. Tiempo al tiempo. Usen corta uñas. Saludos.
Viva nuestra Iglesia con papa Francisco a la cabeza.
Las homilías son importantes, y en 2008 hubo un sínodo respecto a la palabra de Dios, así que no hay más que implementarlo, pero para los niños más importante es el ejemplo de sus padres.
Al día siguiente, asistimos con estupor a la noticia de Antena 3 sobre el mismo Sínodo... o más bien habría que decir sobre otro Sínodo: en el de la noticia, la búsqueda de las mejores formas de enfocar la cuestión familiar en el marco de la Nueva Evangelización había pasado a ser una especie de pugilismo entre obispos conservadores y progresistas, y la temática había pasado de ser el Evangelio a ser la clásica retahila de "logros" progres: abortismo, divorcismo, homosexualismo, degradantismo, corrompismo...
La pregunta automática fue: "Estos de Antena 3... ¿Qué se han fumado? ¡Deberían cambiar de camello!".
En fin, no hay lente más deformante que "los medios" del mundo a la hora de conocer las cuestiones de la Iglesia.
PD: Hay que reconocer que lo que publican los medios de comunicación se parece cada vez más a un test de Rorschach: apenas dice nada del hecho narrado, pero lo dice todo de quien lo narra.
Un saludo.
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