El fin último: la gloria objetiva y gloria formal.
Para iniciar esta breve reflexión sobre el fin último como gloria objetiva y gloria formal, es necesario inicar diciendo que Santo Tomás afirma que, en términos muy generales, la palabra fin significa el término de una cosa. Y con relación a las actividades de un agente cualquiera, el fin es aquello cuya consecución le hace descansar y cesar en su actividad[1].