(Zenit/InfoCatólica) Señalan que el país se prepara a la celebración de la Semana de la Paz 2009, que tendrá como tema: ¡Vivo por la vida!, "porque cada vida es irrepetible, cada persona es irremplazable, cada muerte es irreversible, y ¿tú?", preguntan.
Recuerdan las palabras que el Papa Pablo VI propuso como tema de reflexión para la Jornada de la Paz, el 1 de enero de 1977: "Si quieres la Paz, defiende la vida". En esa ocasión dijo el Papa en su mensaje "Para encontrar la clave de la verdad en este conflicto, que de teórico y moral se convierte en trágicamente real, que profana y tiñe de sangre aun hoy día tantas páginas de la convivencia humana, hay que reconocer sin duda el primado de la vida, como valor y condición de la paz. Esta es la fórmula: 'Si quieres la paz, defiende la vida'. La vida es el vértice de la paz".
Recuerdan también que hace muy poco el Papa Benedicto XVI entregó su encíclica "La caridad en la verdad" y que refiriéndose a los grandes problemas del presente afirma: "Uno de los aspectos que se ha de enfrentar con nuevas fuerzas es el tema de la vida: Uno de los aspectos más destacados del desarrollo actual es la importancia del tema del respeto a la vida, que en modo alguno puede separarse de las cuestiones relacionadas con el desarrollo de los pueblos. Es un aspecto que últimamente está asumiendo cada vez mayor relieve, obligándonos a ampliar el concepto de pobreza y de subdesarrollo a los problemas vinculados con la acogida de la vida, sobre todo donde ésta se ve impedida de diversas formas. La situación de pobreza no sólo provoca todavía en muchas zonas un alto índice de mortalidad infantil, sino que en varias partes del mundo persisten prácticas de control demográfico por parte de los gobiernos, que con frecuencia difunden la contracepción y llegan incluso a imponer también el aborto. En los países económicamente más desarrollados, las legislaciones contrarias a la vida están muy extendidas y han condicionado ya las costumbres y la praxis, contribuyendo a difundir una mentalidad antinatalista, que muchas veces se trata de transmitir también a otros estados como si fuera un progreso cultural..." (nº 28).
"Leyendo los hechos que hemos antes enunciado -subrayan los obispos colombianos--, deseamos levantar nuestra voz para defender la vida humana, desde su nacimiento hasta su término natural".
"Vemos la necesidad -añaden- de despertar la conciencia de nuestras comunidades para que volvamos a meditar los llamados del Papa Pablo VI y el Papa Benedicto XVI. La próxima Semana por la Paz nos ha de encontrar luchando muy decididamente en la tarea de la defensa de una vida digna para todos nuestros hermanos, aún aquellos que inician su existencia en el seno materno".
Reiteran un llamamiento "a la concordia, al diálogo y a la solución pacífica de los conflictos en nuestros territorios".
Invitan también a los "gobernantes, a los dirigentes, a todos los fieles a defender la vida humana. La vida humana es sagrada. Queremos recordar las palabras del Siervo de Dios Juan Pablo II: "Somos el pueblo de la vida y para la vida" (Evangelium Vitae, nº 79).
Y concluyen pidiendo que "Nuestra Señora de la paz nos muestre los caminos de la defensa de la vida".