(Zenit/InfoCatólica) Según el Pontífice, "una tarea importante que queda" es la de "recoger los resultados del diálogo católico-luterano, iniciado de modo prometedor tras el Concilio Vaticano II". Espero profundamente que la continuación del diálogo luterano-católico, tanto en los Estados Unidos de América como en el plano internacional, ayudará a construir sobre los acuerdos alcanzados hasta ahora”, añadió.
"Para construir sobre lo logrado juntos desde entonces, el ecumenismo espiritual debe estar fundado en la oración ferviente y en la conversión a Cristo, fuente de gracia y de verdad”, aseguró el Papa. “Que el Señor nos ayude a valorar lo que se ha logrado hasta ahora, para guardarlo con cuidado, y para fomentar su desarrollo”.
El Papa citó la Encíclica de Juan Pablo II Ut Unum Sint, en la que su predecesor definía la relación entre católicos y luteranos como una “fraternidad reencontrada”. Asimismo, recordó lo que Juan Pablo II dijo en el discurso a los obispos luteranos el 26 de septiembre de 1985: "Ustedes son bienvenidos aquí. Alegrémonos de que un encuentro como este puede tener lugar. Hagamos el propósito de estar abiertos al Señor para que pueda utilizar esta reunión para sus propósitos, para lograr la unidad que él desea. Gracias por los esfuerzos que están haciendo para la plena unidad en la fe y la caridad".
La Iglesia Evangélica Luterana de América fue fundada en 1988. Tiene más de 4 millones de fieles y está presidida por el obispo Mark Hanson, presente hoy en la audiencia general con el Papa.