Torres Queiruga debe callarse en San Isidro y Buenos Aires

El amigo y compañero de tareas blogueras, don Francisco José Fernández de la Cigoña, señalaba el pasado día 5 en su blog que el mal llamado teólogo Torres Queiruga iba a dar una charla en Rosario, en Argentina. El obispo local acabó prohibiendo ese acto que tenía lugar en un colegio de los hermanos Maristas de aquella ciudad.

El lunes y martes próximos el mismo charlista Torres Queiruga, que hace las Américas como los toreros hispanos, tendrá otras dos charlas en el Instituto del Divino Maestro, de los hermanos de La Salle, en las diócesis de San Isidro y Buenos Aires.

Ahora, como dice Paco Pepe, existen dos obispos: “El de San Isidro, Oscar Vicente Ojea, y el arzobispo de Buenos Aires, Jorge Mario Bergoglio“, quienes deben hacer como el de la ciudad de Rosario: prohibir las charlas de Torres Queiruga, porque está censurado por la Conferencia Episcopal Española.

¿Qué motivos tuvieron los obispos españoles para llamar al orden a este escribiente?

La Notificación contra los escritos y el pensamiento de Torres Queiruga se publicó el 29 de febrero pasado. Consta de 28 puntos. Al final se resumen los puntos en los que la llamada teología de Torres Queriruga choca frontalmente con el Magisterio de la Iglesia Católica. Son los siguientes:

“A modo de síntesis, los elementos de la fe de la Iglesia que quedan distorsionados en los escritos del profesor Torres Queiruga son los siguientes:

• La clara distinción entre el mundo y el Creador, y la posibilidad de que Dios intervenga en la historia y en el mundo más allá de las leyes que Él mismo ha establecido.

• La novedad de la vida en el Espíritu que Cristo nos alcanza, con la consiguiente distinción entre naturaleza y gracia, entre creación y salvación. Así como, la necesidad de la gracia sobrenatural para alcanzar el fin último del hombre.

• El carácter indeducible de la Revelación, mediante la cual Dios ha dado a conocer al hombre su designio salvífico, eligiendo a un pueblo y enviado a su Hijo al mundo.

• La unicidad y universalidad de la Mediación salvífica de Cristo y de la Iglesia.

• El realismo de la resurrección de Jesucristo, en cuanto acontecimiento histórico (milagroso) y trascendente.

• El sentido genuino de la oración de petición, así como el valor de la intercesión y mediación de la Iglesia en su oración por los difuntos, especialmente en la Eucaristía.

• La distinción real entre el momento de la muerte personal y el de la Parusía, entendida ésta como culminación y plenitud de la Historia y del mundo.

Con la presente Notificación, la Comisión para la Doctrina de la Fe quiere salvaguardar aspectos esenciales de la doctrina de la Iglesia para evitar la confusión en el Pueblo de Dios y contribuir al fortalecimiento de su vida cristiana; espera igualmente que el Prof. A. Torres Queiruga siga clarificando su pensamiento y lo ponga en plena consonancia con la tradición de fe autorizadamente enseñada por el Magisterio de la Iglesia.”

Como tengo constancia que en la nación argentina existen lectores de este Blog, espero que surta efecto este post para que los obispos citados arriba hagan de verdaderos pastores de su rebaño y lo aparten de comer hierba mala y de beber agua contaminada.

Fuentes

Blog del Instituto Divino Maestro:

http://institutodivinomaestro.blogspot.com.es/2012/09/una-gran-alegria-viene-torres-queiruga.html

Notificación sobre las obras de Torres Queiruga

http://www.conferenciaepiscopal.es/index.php/actividades-noticias-doctrina/2682-notificaciones-sobre-algunas-obras-del-prof-andres-torres-queiruga.html

Tomás de la Torre Lendínez

10 comentarios

  
Caminant
Si sus problemas de fe le han llevado a este punto,creo que debería aclararlos en lugar de expandirlos. Es un error sembrar tus dudas en lugar de las certezas.
Un abrazo,pater.
09/10/12 7:50 AM
  
José Carlos
Torres Queiruga Debería abandonar la barca de Pedro Y convertirse en el mejor teólogo de la historia de los testigos de Jehová
09/10/12 8:13 AM
  
José Carlos Enríquez Díaz
La teoría de la alucinación está largamente rebatida en la literatura científica. El problema de fondo de Queiruga es su soberbia racionalista. Respira por la herida cuando repite la palabra "Impensable" (para él). Para un materialista como él, lo es. ¡Ojo!, él no es empirista, pero sí materialista. En el fondo tiene una especie de síndrome de Estocolmo con respecto al Idealismo moderno.
Por otra parte es interesante saber que las razones de la Comisión Episcopal para la Doctrina de la Fe son compartidas por Roma. Una Nota así no se publica sin consultarlo. Otra cuestión de interés es la siguiente: La Iglesia Evangélico - Luterana Alemana le ha retirado la venia docendi hace un par de años a un famoso exegeta de la Universidad de Göttingen, Gerd Lüdemann. Lo curioso del caso es que aporta las mismas razones que se dan contra la obra de Queiruga. Tanto uno como otro, por mucho que digan lo contrario, quitan toda base a la fe específicamente cristiana y ello, naturalmente, suscita preocupación también en el Protestantismo alemán, que está viviendo una profunda crisis.

09/10/12 8:16 AM
  
Rufo
Ha tenido la mala suerte don Julián de que se ha convertido su archidiócesis en el corralito de moda de lo mejor de cada casa de la contestación eclesiástica. A lo mejor, podría suponerse que ha faltado algo de claridad para romper desde el principio. Pero a lo hecho pecho. Ahora se trata de otro tema.

Yo me pregunto: ese buen hombre del Torres Queiruga, no va a tener a nadie –como en el evangelio, el enfermo de la piscina- con un par de narices que le ayude a no hacer el ridículo. Ya no se trata de evitar la difusión de ideas estrambóticas -lo que no estaría nada mal, dada la confusión ambiente- sino de cogerse a don Andrés del brazo y explicarle que ese es el caminito del infierno. Vamos a rezar, porque en el hereje se mezcla algo de orgullo ciego y de obcecación ilógica. Visto desde fuera, el espectáculo es grotesco. Pero tengo mis dudas de si valdría la pena obligarle a retractarse o un gesto parecido: estamos hartitos de medio mártires mediáticos. La solución –me parece- está en aconsejarle el silencio: anda, Andresiño, majo, ¿por qué no te callas un rato y piensas? Quién sabe si no le hacemos un gran favor a las entendederas de los fieles y a la pobre alma de ese pobre diablo. Podríamos probar.
09/10/12 8:25 AM
  
Ferdustre
Este sujeto es un hereje, heterodoxo y maniqueo situado claramente fuera de la sana Doctrina de la Santa Iglesia Católica. Es un Pseudoteólogo aberrante y equivocado, y no debe permitirsele que exponga sus errores y desviaciones doctrinales en ningún local de la Iglesia. Supongo que sus superiores no lo permitirán. Este sujeto es dañino para la verdadera FE.
09/10/12 10:28 AM
  
pacomio
Ni el arxobispo de Buenos Aires ni el de San Isidro les importa un bledo la fe católica. Como tantos otros son burócratas y administrativos. Pero no Pastores.
09/10/12 2:23 PM
  
Universario
La jerarquía, no se diga más, ríete de la retrosía de hace 50 años; la iglesia de los pobres, el sacerdocio de la mujer, el derecho a la propia opinión, sobre todo cuando huele que apesta a azufre, como es el caso. Todo ha enfilado según los cánones de los mejores tiempos de la contestación.

Y, por contraste, el pobre Mons. Juan Antonio Reig Pla, obispo de Alcalá de Henares, insultado y amenazado impunemente, por defender la fe de los débiles, por oponerse valientemente a los dogmas de la mayoría. Estas escenas me traen a la memoria las declaraciones recientes del Obispo de Nueva York: yo moriré en la cama; mi sucesor, lo hará en la cárcel, pero el que venga después será mártir.
09/10/12 3:23 PM
  
Epaminondas
Triste ver esa mezquina satisfacción del autor del artículo, celebrando el que Torres Queiruga no pueda hablar.

Feo espectáculo ver la ruindad y el miedo que se pretenden hacer pasar por una supuesta religiosidad que no es más que militancia.
09/10/12 5:27 PM
  
José Carlos Enríquez
Para Aclarale a Epaminondas las alucinaciones de Torres Queiruga:

Es imposible que dos personas tuviesen la misma alucinación al mismo tiempo, e igualmente imposible que unas 500 personas de estado mental y temperamento promedio, en número variados, en tiempo diferentes, y en situaciones muy variadas experimentaran toda clase de impresiones sensoriales, táctiles, auditivas y visuales, y que todas estas estuvieran basadas en una supuesta alucinación colectiva.

Las alucinaciones generalmente están restringidas a un tiempo y lugar en que ocurren, precisan de una atmósfera nostálgica, o en una ocasión en la que se adopte una postura reminiscente, exigen que la gente tenga un espíritu ansioso, que es la causa de que su deseo llegue a ser el padre del pensamiento...., pero ninguno de estos casos se aplica a la realidad de Cristo resucitado. Ellos no entendían la resurrección, fueron sorprendidos por esta realidad, anunciada con anterioridad pero incomprensible en aquel entonces.

Las apariciones en realidad fueron contra la voluntad de los discípulos

La teoría de alucinación no es plausible pues contradice ciertas leyes y principios a los cuales deben conformarse las visiones, de acuerdo con los psiquiatras.

Sólo cierta clase particular de personas tiene alucinaciones. Están los que uno describiría como “super- sensibles”, son altamente imaginativos y muy nerviosos.
Las apariciones que hizo Cristo no estuvieron restringidas a personas de una constitución psicológica especial.

Hubo variedad de estados de ánimo:

“ María Magdalena estaba llorando”

“ las mujeres estaban temerosas y sorprendidas”

“Pedro estaba lleno de remordimientos”

“ Y Tomas de incredulidad”

“La pareja de Emaux estaba preocupada por los eventos de la semana..”

Es imposible desechar estas revelaciones del Señor como alucinaciones de mentes desquiciadas.

Las alucinaciones están ligadas en el subconsciente del individuo a sus experiencias particulares del pasado.

Heinrich Kluerer en Psychopathology of perception cita a un famoso neurobiólogo: (Raoul) Mourge, en su trabajo fundamental sobre neurobiología de las alucinaciones, llegó a la conclusión de que la variabilidad e inconstancia representan las características más constantes en los fenómenos alucinatorios y sus derivados para él, la alucinación no es un fenómeno estático sino esencialmente un proceso dinámico, la inestabilidad del cual refleja la misma inestabilidad de los factores y condciones asociados con su origen (Neurobiología de l hallucinación, Bruxelles, lamertin.

Entoces es imposible, entonces, que dos personas tuviesen la misma alucinación al mismo tiempo.

Las apariciones que hizo cristo fueron vistas por muchas personas.

Fue visto por más de quinientas personas en doce ocasiones diferentes; Jesús era de carne y hueso Lc 24:39, comió pescado 42,43, y desafió a los escépticos para que lo tocaran y vieran v.39

Esta clase de contacto imposibilita la sugerencia de que era un espíritu o una ilusión.

13. A María Magdalena Jn 20:11
14. A otras mujeres Mt 28:9,10
15. A Pedro Lc 24:34
16. A dos discípulos Lc 24:13-32
17. A diez apóstoles Lc 24:33-49
18. A Tomás y a los otros apóstoles Jn 20:26-30
19. A siete apóstoles Jn 21
20. A todos los apóstoles Mt 28:16-20
21. A todos los apóstoles Hech 1:4-9
22. A quinientos hermanos 1ª Cor 15:6
23. A Santiago 1ª Cor 15:7
24. A Pablo 1ª Cor 15:7

Pablo desafía a cualquiera que dude de esta veracidad , sencillamente a que pregunte a cualquiera de los testigos que estaban todavía vivos 1ª cor 15:6.

Y lo cierto es que los enemigos de Cristo no refutaron la resurrección, con la ocasión de la predicación de Pedro en el día de Pentecostés, únicamente callaron, ¿Por qué? Por cuanto sabían que la evidencia del sepulcro vacío era una realidad que podía ser comprobada por cualquiera.

Las vidas transformadas de los discípulos son una evidencia de la resurrección.

Santiago, el hermano de Jesús, antes menospreciaba todo cuanto Jesús defendía, ahora él mismo se describe como “siervo de Dios y del Señor Jesucristo.”
Santiago 1:1

Todos con la excepción de Juan murieron en el martirio.

Las vidas transformadas de millones de hombres y mujeres a lo largo de casi 2.000 años de historia corroboran la veracidad de la resurrección de Cristo.

Thorburn declara: “ es absolutamente inconcebible que unas quinientas personas, de estado mental y temperamento promedio, en números variados, en tiempos muy diferentes, y en situaciones muy variadas, experimenten toda clase de impresiones sensoriales – visuales, auditivas, táctiles- y que todas estas experiencias estuvieran basadas enteramente en alucinación subjetiva. Decimos que esto es increíble, pues si se aplicara una teoría semejante a cualquier otro hecho histórico que no fuese de carácter “sobrenatural” sería rechazada como una explicación ridículamente insuficiente”

Theodore Christilieb ( modern Doubt and Christiam Belief, p 493) dice:

“ No negamos que la ciencia pueda contarnos respecto de casos en los cuales asambleas enteras vieron visiones al mismo tiempo; pero donde se ha presentado, tal caso, siempre ha estado acompañado de una excitación mórbida de la vida mental, así como una coordinación corporal mórbida, especialmente por afecciones nerviosas. Ahora, aún cuando uno o varios de los discípulos hubiesen estado en condición mórbida, eso no nos justificaría para pensar que todos estaban en esa condición. Ellos eran, con seguridad, hombres de más variados temperamentos y constituciones. Y sin embargo, se supone que uno después de otro cayeron en esta condición mórbida; no solamente las excitadas mujeres, sino que aún pedro, ese fuerte y duro pescador que con seguridad estaba tan lejos del nerviosismo como ninguno, Santiago, los dos caminaban hacia Emaús, y continuando de este modo hasta el sobrio y dudoso Tomás, sí, y los once al mismo tiempo, y aún más de quinientos hermanos juntos. La suposición es que todos estos cayeron súbitamente en una especie de auto-sugestión, y eso debe notarse, en los tiempos y lugares más diferentes, y durante las más variadas ocupaciones (en la mañana junto a la sepultura; en conversación en el camino; en el círculo confidencial de amigos que trabajaban en el lago); en los cuales sus lindes mentales han sido con seguridad muy diversos y su tendencia a las visiones muy desigual. ¿Y podían ellos, todos, haberse puesto de acuerdo para anunciar al mundo estas visiones como apariciones CORPORALES del Cristo resucitado? Y si así fuera, ¿podría tratarse puramente de auto-gestión y de engaño intencional? Con seguridad, uno u otro de ellos debe haberse preguntado después seriamente si la imagen que había visto era una realidad. Schleiermacher dice con mucha certeza,, “Quienquiera suponga que los discípulos se engañaron a sí mismos y confundieron lo interno por lo externo, los acusa de una debilidad mental de tal naturaleza como anular la validez de la totalidad de su testimonio concerniente a Cristo, y crea la impresión de que Cristo mismo, cuando escogió tales testigos, no sabía lo que había en el hombre. O, si el mismo hubiese deseado y ordenado que aquellos confundieran las apariencias internas por las percepciones externas, habría sido autor de error, y se produciría una confusión de todas las ideas morales, si esto fuera compatible con su alta dignidad”

Según dos destacados psiquiatras, L. E Hinisie y J. Shatski (Psiqchiatric dictionary, Oxfor University 1948) “ (una ilusión es) una percepción erronea, una falsa respuesta a un estímulo sensorial.. Pero en un individuo normal esta falsa creencia generalmente trae el deseo de verificar a menudo otro sentido, u otros sentidos pueden acudir al rescate y hacer saber que todo ha sido meramente una ilusión” P 26/280

Las apariciones que Cristo hizo no podían ser apariciones “erroneas”

Wibur Smith escribe referente a las observaciones de Lucas. Le describe como “un hombre acostumbrado a considerar científicamente cualquier asunto que tenga bajo estudio. Lucas dice al comenzar su segundo libro, los Hechos de los Apóstoles, que nuestro señor se mostró vivo después de su pasión “con muchas pruebas indubitables” o m´s literalmente, “ en muchs pruebas”

Smith continúa; “… la misma especie de evidencia en la cual la ciencia moderna y aun los psicólogos insisten tanto para determinar la realidad de cualquier asunto que se tenga bajo consideración es la clase de evidencia que se nos presenta en los Evangelios referente a la resurrección de nuestro sEñor Jesús, es decir, las cosas que se ven con el ojo humano. A esto es a lo que llamamos evidencia empírica” p 58/389,390

Sparrow- Simson continua: “Y primeramente en cuanto al sentido de la vista. Este naturalmente el primero, puesto que es la forma inicial de conseguir su atención. En los Evangelios se les describe por medio de varis expresiones:

“Jesús les salió al encuentro” Mateo 28:9

“ Le vieron, pero esta experiencia debe ir incluida
A los que dudaban. Mateo 28:17

“Le reconocieron” Lucas 24:31

“Pensaban que veían un espiritu” Lucas 24:37
“Mirad mis manos y mis pies, yo mismo soy;
Palpad y ved; porque un Espíritu no tiene carne ni huesos,
Como veis que yo tengo. Y diciendo
Esto les mostró las manos y los pies Lucas 24, 39 40

Les mostró las manos y el costado Juan 20:20

“Se regocijaron viendo al Señor” Juan 20:20

“Si no viere en su mano la señal de los clavos” Juan 20:25

“Porque me has visto” Juan 20:29

¿Acaso Pablo no llegó a creer en la resurrección de Jesús basándose simplemente en una aparición? Tampoco en este caso las cosas son tan sencillas, a monos que pasemos por alto el testimonio de Hechos, debemos concluir entonces que la tumba vacía de Jesús, y la reiterada insistencia en que su cuerpo NO SE HABÍA DESCOMPUESTO, fueron de importancia central y fundamental en la predicación y en la vida de los cristianos a los que pablo HABÍA ESTADO PERSIGUIENDO.

De la misma manera, la historia del encuentro con María con Jesús en Juan 20, 11-18 incluye el a menudo desconcertante “NO ME TOQUES”

¿A QUÉ CONCLUSIÓN PODEMOS LLEGAR?

“Los discípulos no eran crédulos, sino más bien cautelosos, escépticos y “tardos de corazón para creer”. No eran susceptibles a alucinaciones. Ni habrían quedado satisfechos con visiones extrañas.

TJ Thorburn escribe que las alucinaciones nunca han “estimulado a la gente a asumir una obra de gran magnitud, y, mientras han estado en este empeño, a llevar vidas de la más rigida y constante auto-negación, y padeciendo todavía. En una palabra… somos constreñidos a concordar con el Dr Danday, quien dice, “ninguna aparición, ninguna mera alucinación de los sentidos, ha logrado jamás mover el mundo P 65/136

09/10/12 7:53 PM
  
Juan
¿"Torres Queiruga DEBE CALLARSE..."? No se si tengo más miedo o preocupación por lo que pueda decir Queiruga, o por la nota y los comentarios que leí en este blog "católico". No, sinceramente me preocupa más lo leído aquí que las conferencias de Queiruga.
PD: Sí, pensé dos veces antes de escribir esto, por miedo a ser censurado o tratado como loco. Si alguien se ofende por lo que escribí, pido disculpas: tal vez la próxima deba pensar y expresarme con "más autorización".
11/10/12 4:23 PM

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