(Fides) El punto que hace referencia a las víctimas ha sido uno de los más conflictivos de toda la negociación. «De manera coherente con nuestro deseo de poner el tema de las víctimas en el corazón del acuerdo, como se afirma en la declaración conjunta hecha pública en La Habana, Cuba, donde se celebran las negociaciones, el gobierno colombiano y las FARC han aceptado el constituir un sistema integral de verdad, justicia y reparación así como de garantías de que no se repetirá la violencia» comenta el Arzobispo.
Mons. Castro Quiroga insiste sobre la necesidad de acoger las diferencias entre justicia transicional y justicia penal: «No se pueden confundir las dos cosas. Es importante que sobre la base de esta distinción se lea también todo lo demás y se vea que no hay impunidad, cosas indebidas, sino simplemente que hay dos caminos. Uno el de la justicia penal y otro el de la justicia transicional».
Respecto a la elaboración del acuerdo, que consta de 63 páginas, como se lee en la nota enviada a la Agencia Fides por la Conferencia Episcopal Colombiana, el arzobispo ha subrayado que tiene que haber una colaboración mutua para que todo lo que se ha firmado sea traducido a un lenguaje sencillo para que todos los colombianos tengan claridad de lo que allí está plasmado. De este modo «la gente se animará más a apoyar el proceso de paz».
El proceso de paz está entrando en la fase final, con el objetivo de llegar a un acuerdo, incluso en el último punto de la agenda, el del final del conflicto, que determinará las condiciones del alto el fuego. El presidente Santos ha hecho una propuesta para concluir el diálogo el próximo mes de marzo.