(NoticiasMVS) «Hay pocos espacios o casi ninguno para un encuentro privado o particular», dijo Lira a Radio Fórmula, si bien consideró que «probablemente» un momento de encuentro pudiera darse en la Misa que se celebrará en la norteña Ciudad Juárez, fronteriza con EE.UU., el 17 de febrero, con la que se cerrará la visita de casi una semana.
Señaló que se ha abordado la posibilidad de que allí estén «presentes los papás de los jóvenes estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa» por el tema que el pontífice abordará en dicha ceremonia litúrgica.
El Santo Padre hablará de la migración, «una realidad que nos preocupa a todos», y ofrecerá un mensaje a «quienes han sido víctimas de alguna forma de violencia», declaró desde Roma el coordinador de la visita papal.
Seguramente «tendrá una palabra de consuelo, de ánimo, de esperanza y, por qué no, también de exigencia», apuntó Lira, quien insistió en que la agenda del Papa es «muy intensa considerando también su edad».
Explicó que «los espacios que aparentemente están libres son para los traslados que (...) hará en el papamóvil recorriendo las calles, por ejemplo, del Distrito Federal, de San Cristóbal de las Casas, de Tuxtla Gutiérrez, de Morelia y de Ciudad Juárez».
El P. Solalinde critica la falta de sensibilidad
El padre Alejandro Solalinde, quien el martes pidió un encuentro privado entre el papa y los familiares de los desaparecidos, lamentó que no haya un esfuerzo para abrir un espacio en la agenda para que Francisco sostenga un diálogo directo con las víctimas.
«Es lamentable que las realidades más crueles y violentas que vive México se tengan que ajustar a un momento litúrgico», afirmó el también defensor de los inmigrantes.
Si los familiares de los desaparecidos, en especial los padres de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, no tienen un lugar en la agenda de la visita a México, «entonces ¿cuándo y dónde los va a oír el pontífice?», preguntó.
«Eso es responsabilidad del Gobierno, que tal vez presionó, o de la falta de sensibilidad de los pastores», aseguró el religioso, quien consideró que las familias de los desaparecidos no van a ganar nada si van la misa en Ciudad Juárez, y se preguntó si el fin último es que estos «aplaudan al papa».
Solalinde pidió que se recapacite. «Tienen la obligación moral de hacerlo porque, entonces, ¿qué tipo de México le están presentando al papa?», afirmó.
Sin embargo, estimó que «el Vaticano sí se puede mover», pero «donde debe haber sensibilidad es aquí».
Agenda de la visita del Papa
Según la agenda oficial, el Papa llegará el 12 de febrero a la Ciudad de México y al día siguiente se reunirá con el presidente Enrique Peña Nieto, se verá con los obispos en la catedral y oficiará una misa en la basílica de Guadalupe.
El domingo 14 de febrero visitará el central Estado de México y el lunes estará en la capital del suroriental estado de Chiapas, Tuxtla Gutiérrez, así como en San Cristóbal de las Casas, donde celebrará una misa con la comunidad indígena.
El martes 16 de febrero se desplazará a Morelia, capital del occidental estado de Michoacán, y al día siguiente concluirá su recorrido en Ciudad Juárez, donde también visitará reclusos y sostendrá un encuentro con el sector laboral.