Ricardo Barroso habla del taller de Encounter en Madrid, para llevar el amor de Dios a todo el mundo
Ricardo Barroso es ingeniero en telecomunicaciones por la universidad Anahuac. Casado, con 4 hijos y socio-fundador de Cargolift, empresa que dirige con su padre. Es consejero de His Way at Work, que es una organización que busca poner a Dios al centro de las empresas. Es Licenciado en teología y ciencias religiosas y durante la pandemia decidió ingresar en Encounter School of Ministries. Siente un fuerte llamado de enseñar, activar y equipar discípulos trayendo Encounter a México con un grupo de compañeros que toman con convicción compartir este regalo con más personas. Él, es Director de Encounter en México y de habla hispana.
¿Cómo nace Encounter Ministries y con qué objetivos?
Lo fundan un sacerdote, y un laico, el P. Matthias Thelen y Patrick Reis. Los dos venían de experimentar encuentros profundos con el ministerio y un apostolado principalmente con jóvenes y se daban cuenta que cada año tenían menos chicos. Se dieron cuenta de que a los jóvenes no les llegaba la forma con la que estaban dando a conocer a Dios, no les era atractiva.
Se dieron cuenta de que tenían que propiciar que los jóvenes tuviesen un encuentro personal con Dios. Y a raíz de ello crearon la escuela Encounter para propiciar que con un programa muy concreto la gente pudiese experimentar el amor de Dios.
Por lo tanto los objetivos de Encounter son enseñar, equipar y activar, desde nuestra herencia católica, a discípulos que quieran llevar el amor de Dios a sus círculos de influencia con el poder del Espíritu Santo. Es realmente una copia de la misión universal que nos deja Jesús en el último capítulo de Marcos, en donde dice a sus discípulos que vayan por todo el mundo a llevar su Palabra a todos los rincones de la tierra. Y luego afirma que al que crea le acompañarán estos signos: sanarán enfermos, expulsaran demonios, si les pica una serpiente no les pasará nada…etc. Cristo dijo que a sus discípulos que les convenía que Él se fuese, porque al irse les mandaría al Espíritu Santo y con Él harían las mismas cosas que Él hizo e incluso mayores.