14.11.08

En la naturaleza con Dios

Cuando el día acaba, tambien ha terminado una jornada junto a un grupo de alumnos de cuarto de sencundaria por el interior de uno de los parques naturales de Andalucía.

El paisaje en otoño tiene un color amarillento. La mayoría de las hojas han caido de sus estables lugares en las copas de los árboles que mudan su follaje desde ahora hasta la primavera. En otras especies de hoja fija se mantiene el verde, pero al darles el sol otoñal el cromatismo es especial.

El paseo por la naturaleza en otoño es un regalo para la vista, el oido, y el olfato. Las especies animales siguen sus cursos vitales, lo mismo en unas estacandas aguas de una picifactoría, que en las corrientes y rumorosas de un río que casi acaba de nacer y alberga alevines de truchas.

Una larga jornada, deteniendose en los centros de interpretación de las especies de flora y fauna; observando las fotografías que han dejado para siempre esa pareja de buitres leonados, o de los recién llegados quebrantahuesos, que son los reyes del aire de la sierra.

En varios momentos hemos detenido nuestra marcha. Hemos elevado el corazón al Señor para darle gracias por sus grandes maravillas, que a veces manchamos con el fuego, con la basura, con el ruido y con la contaminación. La naturaleza nos ha elevado el espíritu, nos ha hablado de la obra creadora de Dios, nos ha traido al recuerdo a San Francisco de Asís o a San Juan de la Cruz, quienes en sus secillez de pobres frailes nos dejaron en la palabra escrita el sentimiento cristiano ante la naturaleza bella creada por Dios para nuestra satisfacción espiritual y nuestra expansión material y cognoscitiva.

Realmente la jornada ha valido la pena. Hemos dado y damos gracias al Señor por un día de trabajo fuera del aula de cuatro paredes y entrar en el inmenso salón que es la naturaleza salida de las manos creadoras de Dios. El gran libro abierto del paisaje nos ha hablado de Dios en la pequeña seta, en el regato de agua cristalina, en el ave ráuda camino de su nido, en el diálogo compartido y en el silencio buscado.

El viento nos traía el diálogo de lo creado con el Creador, quien nos ha invitado a volver por aquellos parajes, donde en otoño nadie acude y los pocos que pasamos podemos oirle mucho mejor. !Gracias, Séñor¡.

Tomás de la Torre Lendínez

13.11.08

Los tres curas cantores

Hace unos días ha tenido lugar en el Colegio Español, de Roma, un simposio sobre la formación sacerdotal, con motivo del quince aniversario de la Exhortación Apostólica postsinodal “Pastores dabo vobis", de Juan Pablo II, sobre la formación del clero.

Desde España se hizo presente, el obispo presidente de la Comisión Episcopal de Seminarios, monseñor Saiz Meneses, quien en las palabras de cierre remarcó dos elementos importantes en la formación de los futuros sacerdotes: el primero, incidir, inscribir, grabar, causar efecto, repercutir, influir en los seminaristas la consistencia personal para el sacerdocio; el segundo, la consistencia, que significa solidez, firmeza, fortaleza, seguridad, duración, fuerza moral. Debe obtenerse el trimple sentido: solidez, estabilidad y coherencia.

Es necesario, afirmó el obispo, que la formación humana, tenga como fundamento necesario la perfección humana que brilla en Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote.

Dentro de unos dias actuará en Madrid, en la parroquia de San Jerónimo el Real el grupo The Priests, formado por tres sacerdotes irlandeses, dos de ellos son hermanos, que se conocieron en el instituto y vieron que sus voces estaban hechas para alabar a Dios con el canto religioso. Tras pasar por sus Seminarios de formación sacerdotal, y completar sus graduaciones en Roma, fueron ordenados de presbíteros y situados en parroquias irlandesas, donde apacientan a su grey lo mejor que pueden, pero cuando se unen en la voz son unos cantores angelicales, cuyo repertorio es esencialmente religioso y litúrgico.

Una casa discográfrica le ofreció la oportunidad de grabar un disco. Fue un completo éxito. Más tarde les propusieron cantar por varios países. Ahora llegan a Madrid.

The Priests no va a dejar de lado su labor sacerdotal, y el contrato firmado les permite no comprometerse con obligaciones profesionales musicales en perjuicio de sus actividades apostólicas. Tambien especifica que no estarán obligados a realizar ninguna actuación o actividad comercial ni promocional que entre en conflicto con sus creencias religiosas, y que su álbum se publicará en Roma, Reino Undo, Estados Unidos y norte de Europa, entre otros paises.

Fueron invitados por el Papa a cantar en la liturgia sagrada, algo que hicieron con un esmero y un sentido pleno de su compromiso conocedores de que los talentos que Dios les ha dado en sus voces ellos los saben devolver al Señor rezando en voz alta, como San Agustín llamaba a cantar en la celebración de los sacramentos.

Estos tres curas son sólidos, estables y coherentes. El 25 de noviembre a las 12 horas en la parroquia de San Jerónimo el Real, calle Ruiz de Alarcón 21, será un acontecimiento único y diferente.

Tomás de la Torre Lendínez

12.11.08

Adoración Nocturna y vocaciones a cura

Un lector de este blog me habla de un cura cordobés, que era un modelo de virtudes sacerdotales y que levantó, con su vida, un montón de vocaciones sacerdotales en la diócesis de Córdoba. Era la época en que los mismos sacerdotes eran instrumentos en las manos de Dios para llamar a otros a seguirles por el camino de la vida sacerdotal.

Don Ángel Carrillo Trucios nació en el pueblo de Priego de Córdoba el 2 de octubre de 1882. Se matriculó en el Seminario de Córdoba en 1900. Recibió la ordenación sacerdotal en Granada, el 21 de septiembre de 1912. Su primer destino fue la parroquia de Esparragal y Zagrilla, durante seis años. Trabajó con los hombres y los niños, buscando a aquellos en su trabajo, y a éstos en la escuela y en el catecismo.

Luego va de coadjutor a la parroquia de San Bartolomé de Baena por dos años, donde continúa trabajando con los niños. Le trasladan a Carcabuey, igualmente de coadjutor, desempañando este cargo doce años. Fundó unas escuelas de niños y de obreros. Trabajó eficazmente en el apostolado rural.

Por último en Priego, desde 1932, como capellán de la Hermandad de Jesus Nazareno en la iglesia de San Francisco durante treinta y ocho años. Su trabajo se centró de nuevo en los niños, en la Adoración Nocturna y en la Obra de vocaciones sacerdotales.

En 1962, con motivo de sus bodas de oro sacerdotales, y contra su más decidida voluntad, se le hizo un homenaje popular en Priego y Carcacabuey recibiendo la condecoración pontifica Pro Ecclesia et Pontífice. Durante los últimos años de su vida su salud se fue poco a poco debilitándose, hasta morir el 5 de marzo de 1970. Fue enterrado en el cementerio de Priego.

Pero el 24 de abril de 1975 sus restos fueron trasladados hasta la iglesia de San Francisco, donde reposan a los pies de su querido Jesús Nazareno.

La vida sacerdotal de don Angel Carrillo Trucios fue ejemplar en muchos sentidos. Tuvo dos vertientes esenciales: la promoción de las vocaciones sacerdotales y la Adoración Nocturna. En ambos casos tuvo siempre el apoyo de la Hermandad de Jesus Nazareno de la localidad de Priego de Córdoba, donde es admirado y recordado por un montón de personas, que pasan su fama de buen pastor de padres a hijos y nietos.

Una vez más la historia de la Iglesia nos demuestra que con la oración de adoración ante el Santísimo surgen vocaciones sacerdotales y que el magnetismo de una venerada imagen como la del Nazareno de Priego produce una profunda entrega de muchas personas a la practica del evangelio del Señor.

Tomás de la Torre Lendínez

11.11.08

El Divino Maestro

En Orense durante la década de los cuarenta apareció la Congregación de Misioneras del Divino Maestro, creada por el obispo de aquella diócesis gallega, don Francisco Blanco Nájera, natural de Logroño, donde nació el 24 de mayo de 1889. Esta creación religiosa está dedicada a la enseñanza en colegios repartidos por España, América del Sur y África. Cada 12 de noviembre se celebra en la congregación la fiesta del Divino Maestro, a quien el fundador puso como titular de su instituto religioso, a quien le ayudó la Madre Soledad Rodriguez.

Tal fecha, el 12 de noviembre, los colegios del Divino Maestro, recuerdan cómo Cristo debe ser el modelo único de todo educador, y cómo las virtudes del Divino Maestro deben ser practicadas por todos los maestros, con minúscula, que están abriendo los caminos de la formación humana e intelectual de los actuales niños y jóvenes, que serán los responsables de la sociedad de mañana.

A este obispo orensano, fallecido el 15 de enero de 1952, se le abrió el proceso diocesano de beatificación en Orense, donde se encuentra enterrado en la casa principal de las religiosas del Divino Maestro. En el año 1999 se clausuró el proceso diocesano y toda la documentación fue enviada a Roma, a la Congregación de la Causa de los Santos, donde está en estudio y análisis.

Para comunicar favores y solicitar información pueden dirigirse a:

Hna. Teresita Herrera Rodil
Missionarie del Divino Maestro
Vía Barbaresco, 12
00166 Roma (Italia)

Actualmente la Congregación de las Misioneras del Divino Maestro pasan por la misma situación vocacional de todo instituto religioso. En España tienen pocas vocaciones. Por el contrario, en África y América del Sur sí cuentan con aspirantes y novicias.

Desde luego, este carisma eclesial deja huella en la educación en los niños, jóvenes y adultos, ya que también tienen una dedicación especial al sector de personas que por las causas que fueren no pudieron terminar sus estudios primarios, y desean obtener el grado correspondiente del país donde habiten.

Tomás de la Torre Lendínez

10.11.08

Tarjetas en el Vaticano

Estoy escribiendo este artículo en el portátil. Me encuentro en un local público, donde se está desarrollando una reunión, y donde tienen una zona wifi. Me consta que se cumplen estos dias los cuarenta años del diseño del primer ordenador portátil que hizo Alan Kay, que deseó fuera transportable y que pudiera almacenar datos suficientes.

Lamentablemente, el proyecto era demasiado ambicioso, las especificaciones finales fueron un poco mayores que las de la idea inicial, al igual que el peso, además de que el precio se habría disparado. De esta forma el ordenador portátil ultrafino, que concibió su creador nunca llegó a construirse, pero sí sentó las bases y sembró la inspiración de múltiples conceptos que nacieron tomándolo como línea de salida.

Por otro lado, he leido que en el Vaticano todos los trabajadores que son cerca de tres mil personas entre cardenales, arzobispos, obispos, sacerdotes, religiosos y laicos, a partir del 1 de enero tendrán que fichar para entrar a trabajar. Lo harán con una tarjeta para dejar constancia de su jornada laboral, además, podrán acceder con ella a los servicios de asistencia sanitaria, a los cajeros automáticos del Banco Vaticano, al mercado, a los comedores y a los distribuidores de gasolina.

La obligación de fichar ha suscitado el descontento, sobre todo entre los eclesiásticos, ya que algunos temen que exista un control demasiado rígido y no se tenga en cuenta su actividad pastoral fuera del Vaticano.

Estas tarjetas servirán para medir el nivel de trabajo de cada uno de los dependientes vaticanos para así poder establecer tanto eventuales aumentos de retribución como sanciones, que podrán llegar hasta el despido.

A mí, me parece muy bien que los trabajadores del Vaticano sean iguales a los del resto del mundo y de la Iglesia, donde también fichamos, aunque sea firmando en un boletín de presencia real, como es el caso de un instituto de secundaria, o en la parroquia, donde los fieles cristianos no deben soportar tardanzas injustificadas, faltas de puntualidad, excesos en los horarios de los curas que servimos sus necesidades espirituales.

Además, en el Vaticano es bueno que entren las tarjetas magnéticas, lo mismo que sí poseen ordenadores, páginas webs, que deben actualizarse metiendo dentro algún blog para que sean más interactivas y más consultadas por los millones de internautas, que navegamos por el ciberespacio.

¿Se imaginan que el Papa tuviera un blog donde pudieramos dejar comentarios a lo que él hubiese escrito?. Todo llegará.

Tomás de la Torre Lendínez