Villancico para la fiesta de Reyes: Juyzios sobre una estrella, de Francisco Guerrero

Así como el pasado 1 de enero traje al blog el precioso motete O magnum mysterium, compuesto por Tomás Luis de Victoria para la festividad de la Circuncisión del Señor que en el rito tradicional corresponde a ese día, quiero hacer algo similar en estas vísperas de la Epifanía. Propongo a los lectores la escucha y el disfrute de la villanesca Juyzios sobre una estrella de Francisco Guerrero, maestro de capilla de la catedral de Sevilla durante el siglo XVI. Esta bella composición fue publicada en 1589 en Venecia por su autor dentro de la colección llamada Canciones y villanescas espirituales.

El texto, en castellano, trata de los magos de Oriente, su observación de la estrella y de cómo son guiados por ella hasta Belén. Es también un ejemplo del género de composiciones en lengua vernácula que entraron en la liturgia de la Iglesia en unos tiempos en que toda ella se desarrollaba en latín. El profesor Ricardo Fernández, de la Universidad de Navarra, ofrece información precisa al respecto:

Respecto a los villancicos, sabemos que, desde el siglo XVI, se generalizaron en todas las capillas de música españolas, sustituyendo a los responsorios litúrgicos en latín unas composiciones en lengua vulgar, primero en la Navidad y algo más tarde en el día del Corpus y en otras celebraciones. El origen de tal costumbre se remonta a la segunda mitad del siglo XV, si bien el empuje final fue la decisión del primer arzobispo de Granada de introducirlos en aquella ciudad en los Maitines de Navidad, después de la reconquista de 1492, a modo de “cancioncillas devotas”, compuestas en parte por él mismo. Los biógrafos del cardenal y el mismo Padre Sigüenza insisten en que desde aquel momento “quedó la costumbre de hacer estas fiestas y regocijos de música en los Maitines y Oficio Divino”. 

Francisco Guerrero es uno de los grandes nombres de la historia de la música religiosa. Junto con Tomás Luis de Victoria y Cristóbal de Morales forma parte de la llamada trinidad o triunvirato de la polifonía española del renacimiento. 

Guerrero se diferencia de Victoria y Morales por una mayor diversidad en el estilo de sus composiciones. Victoria y Morales se ciñeron siempre al estilo grave y profundo de la polifonía litúrgica en lengua latina. Dos maravillosos ejemplos de Victoria han aparecido ya en el blog: los motetes Vidi speciosam y O magnum mysterium. Por su parte Guerrero, además de cultivar con extraordinaria maestría el estilo de la gran polifonía, utilizó en otras ocasiones un lenguaje más popular, con piezas en lengua castellana y ritmos más vivos. 

En este punto es necesaria una aclaración importante: Guerrero sostiene un altísimo nivel artístico en ambos géneros. En esto se diferencia de muchos compositores posteriores en los que, sobre todo a partir del siglo XVII, se va abriendo una cada vez mayor separación entre la complejidad y abundancia de recursos musicales que caracterizan a las composiciones en lengua latina y el lenguaje de las piezas en lengua castellana, más “popular” y que puede calificarse como estéticamente más avanzado (al menos cuando uno contempla a posteriori la evolución del estilo tal y como aconteció históricamente), pero objetivamente más simple e incluso, en no pocas ocasiones, mucho más pobre.

Guerrero en sus piezas castellanas mantiene la riqueza y sutileza del contrapunto clásico (combinaciones variadas y complejas entre las líneas musicales que van cantando cada una de las diversas voces), a las que añade unos ritmos mucho más vivos y complicados. Estos ritmos, que tienen su origen en las danzas populares , son integrados por Guerrero en un estilo sabio de muy alto nivel artístico.

Muy buena muestra de ello es la villanesca Juyzios sobre una estrella. En comparación con los dos motetes de Victoria señalados anteriormente, Juyzios tiene un ritmo más rápido, con los acentos de la música desplazados frecuentemente de su lugar natural o esperable. Eso sí, respetando las exigencias de acentuación del texto, como buena música post-tridentina.

Vimos en el artículo anterior cómo Victoria se sumaba al movimiento de su época en la búsqueda de una más íntima unión entre música y texto. En su prólogo a las Canciones y Villanescas de Francisco Guerrero esto es lo que dice el poeta Cristóbal Mosquera de Figueroa respecto a nuestro autor:

(…) el qual fue de los primeros, que en nuestra nacion dieron en concordar con la musica el rithmo, y el espiritu de la poesia, con ligereza tardança, rigor blandura, estruendo silençio, dulçura aspereza, alteración sossiego, aplicando al biuo con las figuras del canto la mesma significacion de la letra, como lo sentira el que quisiere en sus obras aduertirlo.

Francisco Guerrero, al igual que Tomás Luis de Victoria, era hombre de profunda piedad católica. Cerca del final de sus días pudo cumplir su sueño de peregrinar a Tierra Santa para conocer los lugares en los que transcurrió la vida terrena de Jesucristo. Acabo con sus propias palabras, extraídas del prólogo del libro que él mismo escribió a su regreso, El viage de Hierusalem.

Y como tenemos los deste officio por muy principal obligacion componer Chançonetas, y Villancicos, en loor del santissimo nacimiento de Jesu Christo nuestro salvador y Dios, y de su santissima madre la virgen Maria nuestra señora, todas las vezes que me ocupaba en poner las dichas Chançonetas y se nombrava Bethleem, se me acrecentava el desseo de ver, y celebrar en aquel Sacratissimo lugar, estos cantares en compañia y memoria de los Angeles y pastores que alli començaron a darnos lecion desta divina fiesta.


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8 comentarios

  
Tulkas
Nadie niega que pueda haber, que haya habido y que deba haber buena música devocional, extralitúrgica y paralitúrgica.


Victoria y Guerrero eran grandes amigos, por cierto.
06/01/13 4:32 PM
  
José María Iraburu
Raúl, te cuento.
Tus vídeos son como para recogerlos en un DVD inapreciable. Y me han inspirado una idea genial (como tantas otras mías).

Cuando tengamos ya hecho un buen número de preciosos vídeos, en los que se unen música, imágenes, textos y análisis tuyos, hacemos un vídeo en la Fund. GRATIS DATE, con varios miles de tirada, los vendemos, nos hacemos ricos (¡bieeeeeeeeeeeeeeeeennngg!), y podemos entonces permitirnos contratar una firma potente de abogados que nos saquen adelante de las innumerables denuncias que se nos vendrán encima por derechos de autor conculcados. Y nuestros abogados nos sacarán adelante. Seguro.
¿Es o no es una idea genial?
06/01/13 7:31 PM
  
Percival
Son piezas hermosísimas que muchos ignoran. El tesoro del arte y de la fe perdidos para la mayoría, especialmente para la juventud. Unas joyas que no llegan a ellos en medio del maremagnum alocado de todo tipo de música que pasa por sus oídos y corazones.
06/01/13 9:16 PM
  
Tulkas
A ver si un día nos pones algo de un gran organista y compositor católico como fue Bruckner, y nos dices qué opinas sobre las reconstrucciones del Finale de su novena sinfonía, dedicada "Dem lieben Gott".
07/01/13 1:04 AM
  
Raúl del Toro
Todo se andará. Por cierto, esa es una de las primeras obras de música clásica que conocí, siendo casi niño todavía.
07/01/13 6:37 PM
  
Tulkas
Pues yo fue una de las últimas. Ya esta "formado" musicalmente. Encontré la versión de Baremboim con la Sinfónica (o Filarmónica?) de Chicago y me costó mucho engancharme a ella.

El caso es ese tercer género de música religiosa. El primero la Litúrgica, el segundo la devociones y paralitúrgica, el tercero la música de concierto genuinamente religiosa.

Bruckner detestaría que se interpretara su Misa en fa menor o su Novena sinfonía en una iglesia. Y ahí están ambas: la primera una Misa y la segunda una sinfonía dedicada "Al amado Dios".

Y probablemente lo mismo Messiaen de mucha de su música de religiosa de concierto.

No conozco muchas otras obras dedicadas a Dios aparte del Officio de Semana Santa de Victoria. Digo explícitamente dedicadas.

En spotify están las últimas versiones del movimiento incompleto: la de Letocart (buena, pero es deshonesto su autor, lógico en los franceses...), la de Carragan (artísticamente la mejor) y la de Samale-Phillips-Cohs-Mazzuca 2012 que estoy escuchando ahora mismo y que tiene sorpresas con respecto a la previa más conocida de 1992.
07/01/13 11:27 PM
  
Tulkas
Traigo a colación lo de la música religiosa de concierto para exponer el panorama actual de la música religiosa católica:

- Música sacra -> relegada a los CD
- Música devocional -> en la Liturgia
- Música religiosa de sala de concierto -> en las iglesias
- Formación musical en colegios católicos y seminarios -> ni se la ve ni se la espera
07/01/13 11:35 PM
  
cítara
Raúl, este blog me parece un regalo. Me ayuda a profundizar en la piedad apoyada en la liturgia. Hay que ir sacando a la luz todos esos compositores cristianos, piadosos que escribían para la gloria de Dios.¿Existen hoy en día músicos así, o la propia Iglesia sigue encargando y pagando trabajos a agnósticos, ateos, no practicantes, desconocedores de la doctrina y la liturgia?
15/01/13 11:06 AM

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