La señorita Isabel.
Ha vuelto a aparecer la Srta. Isabel. Quizá para seguir explotando su gran éxito editorial: “Mujeres brújula…”, y ahí queda eso.
Bueno, ahí no queda: se ha marcado recientemente unas declaraciones en las que, en letras gordas, se destaca que: “En la Obra cabe gente de Podemos, siempre que defienda el Evangelio”. Y se ha debido sentir orgullosa, digo yo.
Sinceramente, no sé cuánta gente de Podemos debe conocer esta señorita para largar tamaña frasecita, ni de qué las conoce… quizá de predicar el evangelio. Pesonalmente, no conozco ninguno que, de ese grupo -ni de ningún otro: no nos engañemos-, defienda el Evangelio. Las excepciones, que puede haberlas, serían para anotar y premiar.
¡Vamos, si no lo defienden ni los “católicos oficialistas” -alguno incluso “de Misa diaria": como se decía antaño, para significar lo que proclamaban con su vida esas personas-, que han estado activos políticamente hasta su jubilación!
Bastaría citar al sr. Ollero que ha tenido retenido por ¡¡12 años!! el dictamen o declaración o lo que sea que tuviese que sacar, presentada incluso de su propio Partido, respecto a la INCONSTITUCIONALIDAD de la ley del aborto. Con un monto, así a bote pronto, de 1 MILLÓN de abortos en todos esos años. Que es para nota más que destacada. Una buena machada lo de este buen señor.
Y entonces, me entra la curiosidad, y no refreno las preguntas a la Srta. Isabel.
¿Se distinguen, los de Podemos -vale para todos los partidos políticos, en España y fuera de ella-, por su defensa del Evangelio? ¿Conoce a alguno en particular que lo haga? Si lo conoce, nos encantaría saberlo, con nombres y apellidos, para felicitarle muy efusiva y entrañablemente…
¿Entonces? ¿A qué vienen sus palabras? ¿A pasar por “moderna", por “brújula", por “sorora"? ¿Tiene necesidad, la srta Isabel, de pasar por eso? ¿No le basta y le sobra con pasar por ser del Opus Dei y estar en la cúpula?
Dado que es más que probable que no haya nadie de Podemos en ese horizonte en el que lo sitúa Isabel, y se sitúa ella misma, ¿a qué viene la frase “famosa"? Como las muñequitas esas, vamos…
Tampoco es que, a estas alturas de la peli, me extrañe demasiado; porque se están produciendo una serie de declaraciones de miembros del Opus Dei, en muy distintas situaciones personales, y referidas a temas de una presencia y de una realidad insoslayables, que, como mínimo, se me antojan dudosamente presentables.
Como si ya también, en el Opus Dei, infectado quizá del virus de la “oficialidad clerical” -que pasa por encima hasta de la limpia, hermosa y fiel racionalidad-, se puede decir y hacer de todo: con la “liberalidad” y la “soltura” que caracteriza a esta “nueva iglesita” donde cabe todo, hasta el pecado, hasta no ser católico siquiera. Casi, casi, como si bastase con ser hereje: cuanto más, mejor.
Por recordar algunas:
*Que un señor Obispo de la Iglesia Católica en Suiza, miembro del Opus Dei, diga que él, personalmente como Obispo, no tiene nada que decir a dos señoras lesbis, pues eso…
Por cierto: con esas palabras, lo que está proclamando a todo el que lo quiera oír y entender, es que RENUNCIA a proclamar la Palabra de Dios. ¡Glorioso, oigan!
*Que un Sr. Ministro de un Gobierno de España con Aznar, miembro del Opus Dei, acuda a una boda civil, con notoriedad y publicidad, pues eso… El ESCÁNDALO que pueda montar, a todas luces notorio, es lo de menos, a lo que se ve…
*Más lo de la Srta. Isabel y la “mujer burbuja” -lo confieso: no me he entretenido en pretender saber de qué iba, la verdad-, y ahora con la parrafada inclusiva sobre Podemos, pues eso… Con lo que manifiesta una notoria… (juzguenlo ustedes mismos).
*Claro que ya había un precedente: la Srta. Dña. Pilar Urbano, hace años, entrevistó a una sobrina-nieta de La Pasionaria, de apellidos rusos cien por cien -mujer que, atea, viene a España, aquí se establece, se casa, se convierte y luego -el triunfo de la Fe, que hace milagros-, se hace supernumeraria del Opus Dei.
La srta. Pilar acababa la entrevista añadiendo de su puño y letra, y como el Gran Colofón a lo narrado que, “si el Fundador del Opus Dei y La Pasionaria se hubieran conocido, se habrían entendido de maravilla: los dos eran almas que poseían grandes ideales” (la cita no es literal, sí el sentido). ¡Toma nísperos, Ramona, que son p’al verano!
*Sin olvidar lo del Sr. Ollero, por su…, al que lo del MILLÓN de asesinatos le parece secundario en relación a sus “razonadas sinrazones” para actuar como lo hizo. A lo que parece a todas luces…
No todas esas manifestaciones están en el mismo plano, por supuesto. Pero en todo esto, y en más casos y cosas que se podrían anotar con nombres y apellidos, hay un TUFILLO, a mi parecer, de que, como mínimo , algo no cuadra, algo rechina, escandaliza, no armoniza con la trayectoria casi centenaria del Opus Dei y su santificar las realidades temporales, que es lo propio de los hijos de Dios en su Iglesia en medio del mundo.
Cuando no, se opone frontalmente a lo que hemos visto y oído en san Josemaría, y hemos vivido, “en Paz y en Gracia de Dios”, por muchos años. Y todo, protagonizado por personas “relevantes” del Opus Dei; y no solo en España.
¿Algo está cambiando en esta parte de la Iglesia, reconocida hasta no hace mucho por su SERIEDAD y COMPROMISO, en todos los campos en los que los católicos han de vivir, seriamente, como tales? Sin “chalanear", como expresa señaladamente el Santo Fundador del Opus Dei.
¿Quizá como están cambiando tantas cosas -que no deberían cambiar-, en la misma Iglesia Católica? ¿Significa algo todo esto?
El tiempo lo dirá, si no lo está ya diciendo. Es cuestión de a qué se quiere mirar, y qué se quiere valorar; o si no se quiere mirar ni reconocer… Pero, como nos dice el Señor Jesús: por sus frutos los conoceréis.
Ya san Josemaría nos dejó dicho, hasta por escrito, que “las obras de Dios no se pierden por falta de medios, sino por falta de espíritu”. Aviso para navegantes de todos los tiempos… si llegan más tiempos: porque también se han podido acabar por falta de Fidelidad.
Lo que sobran son ejemplos -a escarmentar y a esquivar-, en la Historia de la Iglesia, de ayer y de hoy: cuántas Instituciones, más que enraizadas en Cristo -como la misma Iglesia Católica-, y con unos Fundadores que, todos ellos, se han manifestado como Santos y Preclaros Varones, y con cientos de años de vida significativamente ejemplar en la Iglesia, deberían hacernos temblar a todos. Porque, si esto pasa en el árbol verde, ¿del seco qué será?
Pues eso…
Para mayor relevancia, resulta que el Opus Dei, y así lo proclama; y así lo manifestó también el mismo papa san Juan Pablo II, en la Bula Ut sit: “ayuda en la práctica a llevar a cabo este ideal de Santidad". ¿Se compaginan estos hechos que hemos relatado con algo parecido a un “ideal de Santidad”?
Esto mío, que conste, no es más que una opinión; fundada, esto sí, en unos hechos, públicos por publicados todos ellos. ¡Nada me encantaría más que equivocarme! Lo digo de corazón. Con el corazón sangrante.
Y con ánimo de ayudar, como con todo y en todo lo que escribo desde hace ya unos años. Que lo escribo con mi nombre y apellidos, para que no haya duda alguna al respecto, de que todo es bajo mi más estricta decisión y visión personal.
Intento llevar a cabo aquello de Jesucristo, animándonos a “oír, ver y entender"; y así, alejarnos lo más posible, como si de una tentación diabólica se tratara -que se trata-, del disimular, del callar, del cohonestar con las cosas del mundo…, donde domina el Diablo y sus Ángeles: hoy, mucho más que ayer, pues ya no tiene ni medio impedimento por parte del personal.
No he sido Ordenado Sacerdote en el Opus Dei para CALLAR. Eso, ya lo hacen, y con notoriedad, muchos otros en toda la Iglesia. Yo, no: he sido Ordenado para HABLAR. O, como le dice la Virgen a Marga: “Necesito voceros de la Verdad".
Y el mañana, pues depende de nosotros: de lo que le dejemos hacer al Señor, haciéndolo con Él. Que a esto nos convoca a todos en la Iglesia.
Y sobre esto seremos juzgados exacta y minuciosamente.
40 comentarios
Un católico no debe asistir a una boda civil "de católicos", con las excepciones de rigor.
Por ejemplo, en Francia, unos católicos, para casarse por la Iglesia, deben ir primero al juzgado para "casarse" por lo civil, xq el Estado no reconoce el matrimonio eclesiástico.
No es el caso de España, ni de otros países, q sí lo reconocen.
Si los q se casan x lo civil no son católicos, y esa situación es conocida por todos, eso cambia tb las cosas, lógicamente, xq la situación no es la misma.
El trato con esas personas está en otro plano; especialmente con vistas a una posible conversión futura, q hay q pedir siempre a Jesucristo.
Que tu vida no sea una vida estéril: Sé útil, deja poso.
... Borra con tu vida de apóstol la señal viscosa y sucia que dejaron los sembradores impuros del odio...
Enciende los caminos de la tierra..."
Regnare Chrstum volumus...
Oremus...
Ave Maria, gratia plena, Dominus tecum...
2. Pero, ese "espíritu" no es otro que el gobernado por el Maligno.
3. Ya lo dice Nuestro Señor Jesucristo: "no se pueden servir a dos señores al tiempo." Y el señor del comunista/socialista es hacer esclavos "felices" mediante el divorcio, aborto, suicidio asistido o eutanasia, ideología de género, etc. etc. etc. Ídem para el liberal sin Dios.
Por otra parte, muchas bodas se han celebrado durante las últimas décadas que han sido sacrilegios palpables, y no parece que a nadie le haya parecido un motivo para no asistir ni para dejar de celebrarlas.
Siento no poder darte la razón, en ninguno de tus presupuestos. Lo q le pueda parecer a la sociedad civil, es problema de la sociedad civil. Y la mera presencia, si te refieres a asomarte e irte, bn; si es asistir como invitado, no s puede, como ya he explicado.
Lo q dices de las bodas como sacrilegios palpables, tendríamos q ser Dios para saberlo con certeza. Y no es el caso de nadie fuera de Él.
El q celebra una boda católica consciente de estar haciendo el paripé, comete un grave pecado.
Por cierto, en su relación de anomalías, echo de menos la cita del alcalde chileno legetebero Lavín y la del sacerdote italiano Mauro Leonardi, el James Martin de la prelatura.
¿No habrá que exhumar Las Tres Campanadas? tan actuales y más vigentes que nunca?
Nos quedamos ojipláticos oyendo comentarios de algunas cabezas de esa parte de la Iglesia ultimamente por decirlo suavemente.
Tenéis mi oración. Y mañana, en la Santa Misa, pediré x vosotros.
debo mucho, me apena mucho ver y oir estas cosas. Dios le bendiga por no callar.
¿Realmente se va a ceder en los colegios o hay alguna triquiñuela con que aparentar cumplir el requisito político para seguir recibiendo la aportación económica del gobierno autonómico?
¿No habrá pronto, por imitación, la misma táctica gubernativa en otras comunidades autónomas con tal de imponer ideología en vez de respetar las opciones que libremente se escojan?
En cuanto a personas que siendo católicas ocupan cargos de alta responsabilidad y presión política y económica, debería habérseles inculcado que no aceptaran el cargo si no se sentían con las fuerzas suficientes para desempeñarlo o si tenían dudas sobre su entereza para llevar a cabo su menester conforme a la fe católica. Así, lo más honesto en el caso de contrariedad o contradicción con el Evangelio creo que es presentar la dimisión, como la presentó un político hace unos años cuando se amplió la ley del aborto con mayoría a favor dentro de su propio partido.
Por lo mismo, si el Rey, católico, no es capaz decir no a las presiones de la masonería en forma de distinciones honoríficas (ver noticia de Infocatólica en 2019), se encontrará en la nada leve contradicción de cumplimentar de algún modo a la masonería a pesar de que esta ha sido condenada por la Iglesia varias veces. Uno se pregunta por qué la Iglesia no efectúa el recordatorio de estas condenas a la masonería cada equis años, pues hay mucha gente que se cree que es compatible con el cristianismo. También podría abdicar el Rey en caso de contradicción, aunque no podamos imaginar las consecuencias de que se derivarían. Todo, siempre, es muy difícil.
Nadie con sentido común y sobrenatural nos ha dicho que ser santo sea fácil: esto solo puede venir del demonio o de los acomodaticios: los "lapsi" de toda la vida. Jesús bien que nos previene al respecto: "Entrad por la puerta angosta, pues es ancha la puerta que lleva a la perdición". "No podéis servir a dos señores...". "El que crea se salvará". "¿De qué le sirve al hombre ganar el mundo si pierde su alma?".
Una pregunta necesaria: ¿Los mártires de ayer y de hoy han dejado de ser ejemplo y camino para los cristianos? Y que cada palo aguante su vela.
El verdadero tema es si queremos vivir en cristiano o no: y no hay más temas. Eso sí: cada uno recogerá lo que ha sembrado.
Agradezco su publicación y le animo a seguir dando testimonio.
El Señor le bendiga
Para un católico, "casarse por lo civil" es una declaración frontal de guerra a Dios, creador del hombre y del matrimonio. Es montarse la vida "como si Dios no existiese". Y un católico, por muy amigo que sea, tampoco si es un familiar, no puede estar ahí, dando "calor" y "compañía" a tal evento, que es una ofensa gravísima a Dios.
Si esas personas se han dejado ganar por un ambiente que vive y se maneja "contra Dios", es su problema. Y la forma que tenemos de ayudarles a reconocerlo es explicarles, con todo el afecto posible, el por qué de nuestra ausencia: en la ceremonia, y en la celebración posterior.
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No sé dónde lo valora, ni quién lo suscribe. Si se refiere a "por lo civil" y está hablando de "católicos", lo siento: es inaceptable. Porque es un PECADO, simpliciter. No es estar lejos del "ideal": está totalmente en contra.
El Matrimonio Católico no es un "ideal", sino que es un SACRAMENTO. Como todos los Sacramentos, está el servicio del camino de santidad de los católicos. Pero a nadie se le obliga a casarse, ni a confesarse, ni a rezar: cada uno siembra lo que quiere y como quiere. Eso sí: recogerá según ha sembrado.
El Sufrimiento siempre es Redentor cuando se vive unido a la Cruz de Cristo.
Para los católicos no hay diferencia entre "por lo civil" o "unión de hecho": todo es "arrejuntarse", como se ha dicho siempre: no como desprecio, sino como llamar a las cosas por su nombre, para significar lo que son, sin pretensiones de enmascarar nada.
Le cuento un caso concreto.
Una prima mía, sobrina de sacerdote, nos hizo saber en un momento dado que no era creyente, ni católica ni na. Dejó de ir a Misa los domingos, ya que solo iba por su tío ordenado. Está bautizada, con la Primera Comunión y la Confirmación celebradas. Todo eso antes de su pérdida de Fe. No hizo una apostasía formal, de papel firmado, pero sí oral. Cuando se casó lo hizo por lo civil, queriendo ser honesta. No asistí porque no me invitó, ya que el evento lo celebraron íntimamente, solo padres, hermanos... El tío cura asistió porque les unía mucha relación.
¿Si me hubiera invitado, ¿podría haber asistido?
¿Hizo bien el sacerdote de la familia en acudir?
A lo del sacerdote, mejor le preguntas a él. Respecto a si podrías haber ido, creo que ya he respondido a eso en otras contestaciones, y creo que estás contestada. El hecho de "dejar de practicar" no significa "no ser católico".
Creo que le entendido del todo. Muy agradecida por sus respuestas.
Está mal asistir a la boda de alguien que ha sido católico, al menos de derecho, y que se casa por lo civil.
Estoy de acuerdo y de alguna manera significa dar nuestra bendición y desde luego nuestra aprobación a un comportamiento de traidor.
Pero si asiste un cura, la respuesta es: Mejor le preguntas a él.
¿Corporativismo? Si está mal que acuda un laico cuanto más un sacerdote. La falta será la misma pero en el caso del religioso es una falta agravada porque un cura representa al mismo Cristo en todo momento.
Le he respondido eso, porque por las referencias que dio, eran todos familia cercana en mayor o menor grado, y he supuesto que tendría acceso al sacerdote. Tanto el sacerdote como la señora que me preguntaba, eran familia de la señora que iba "por lo civil".
Lo que he dicho al respecto de esos eventos vale para todos: con mayor gravedad y escándalo si uno es sacerdote.
Gracias P. Aberasturi por su fidelidad y también por su valentía, cuando dice que "no ha sido ordenado para callar". Qué pena, hasta el Opus.... !
Cuando la mayor de mis primas carnales se iba a casar me llamó para invitarme a su boda. Me dijo que era una celebración civil, que les casaba el alcalde en una de las bodegas más importantes y que luego habría celebración.
Le contesté que no asistiríamos porque ella era cristiana bautizada y había recibido su Primera Comunión. Además el pueblo tiene una iglesia preciosa donde la novia se luce de manera especial. Le deseé que fueran felices en su enlace civil, aunque quién no asienta sobre Cristo y sólidas bases su matrimonio tiene muchísimo más trabajo para resolver las dificultades.
Aunque no le sentaría especialmente bien, tampoco se llevó ningún disgusto.
Nota: Por desgracia, hoy en día ya hay mucha gente que ni está bautizada, ni ha pisado una iglesia en su día. Con estas personas, si por compromiso, me invitan a su unión civil (hombre/mujer) acudo a la celebración que no al acto civil, sin mayores problemas. Y si en alguna ocasión me solicitan como testigo alego que es mucho mejor se lo ofrezcan a sus familiares.
yo he mamao Opus Dei desde la cuna y es evidente que este OD no es el de entonces. Y ahí está el problema, que a toque de corneta lo que antes era A ahora es B y lo que antes era B ahora es A.
Sinceramente uno ya no sabe qué es lo correcto, pero lo que está claro es que alguien que va defendiendo a capa y espada lo que hace 20 años era anatema y lo atacaba con uñas y dientes pues como que poca credibilidad tiene. Además sin solución de continuidad, que ahora le niegan a uno que hace nada enseñaban lo que enseñaban y cómo lo enseñaban: esquizofrenia pura.
Que ahora está guay ir a las bodas civiles de amigos, pero hace no tanto a los supernumerarios se les decía que a una boda civil de un hijo no debían ir. Y así todo.
Respecto al matrimonio civil , el Código de Derecho Canónico de Benedicto XV , lo definía como público y notorio concubinato.
Hace ya tiempo que , como otros principios católicos, se pretende por la iglesia hoy dominante cambiar el chip.
Se pretende pactar con el Mundo y los resultados son demoledores.
Los católicos pecadores , como yo, nos sentimos burlados y los progresistas perfectos no se contentan nunca.
Que Jesucristo y la Virgen del Pilar tengan misericordia de nosotros .
Es decir recibieron unos sacramentos de pequeños, pero de mayores, que es cuando una persona decide el camino a seguir, o en lo que creer decidieron no creer en lo que dice la santa Madre Iglesia.
No tienen que firmar ningún papel, para atestiguarlo, simplemente han decidido que no quieren ser católicas.
Esto puede pasar en cualquier momento de la vida.
Católico es la persona bautizada, incluso con solo el deseo, si no le da para más. Con el bautismo, se recibe la inhabitación de la Trinidad. Se reciben las 3 virtudes teologales, Fe, Esperanza y Caridad infundidas por Dios directamente. Nos hace hijos de Dios, y herederos del Cielo. Comienza entonces todo un camino de santidad, que culminará con nuestro encuentro definitivo con Dios.
Ser católico no es hacerse miembro de un club social, que se abandona cuando se quiere.
Que se puede perder la Fe, culpablemente, es una posibilidad que siempre está al alcance de cualquiera. Como la Fidelidad. Porque el que crea se salvará, el que no crea se condenará.
De todos los que yo conozco, de este tipo, cuando yo les pregunto: ¿pero tú no crees en la existencia de Dios?Todos responden (unificando respuestas) algo tiene que haber pero lo que dice La Iglesia, no.
Y al preguntarles qué dice La Iglesia contestan: Pues eso: El Papa, los curas, ya sabes.
Vamos que no tienen ni idea.
El demonio va d triunfo en triunfo... Y cosecha a manos llenas.
Como ha observado, la cuestión moral de la asistencia a una boda civil ha generado un elevado número de consultas. Y es que lo que usted dice, no se oye a ningún eclesiástico últimamente (o en los últimos lustros). Al menos, a mí me ha sorprendido leer su explicación. Quizás haría falta un artículo suyo desarrollando sus respuestas a las dudas planteadas. Le animo a que lo considere.
Muchas gracias por tus palabras y tu sugerencia. Veré qué puedo hacer. Con todo, en mis respuestas, creo que lo fundamental del tema está resuelto "en católico".
Respecto a que no hay muchos eclesiásticos que digan esto mismo, es su problema. Yo, el mío, creo que, modestamente, lo tengo bien resuelto.
Como complemento a mi anterior comentario-petición, le planteo el siguiente caso real.
Pareja, casada por la iglesia y divorciados de sus respectivos conyugues (que les abandonaron y traicionaron, es decir, ambos víctimas). Se conocen y se casan por lo civil. Al enlace acuden los hijos de cada uno, los hermanos. Tambien acuden los padres de él (ambos vinculados a organizaciones cristianas)
¿Cúal es su análisis moral de responsabilidad de los "aparticipantes de esa ceremonia?
Dato que añado, los padres intentaron convencer al hijo de que anulara el matrimonio eclesiástico con la mujer que le engañó y abandonó -madre de sus hijos.
Esas personas, católicas, víctimas, NO pueden ir "a lo civil". A partir de ahí, que cada católico actúe como tal...
• No podemos mirar y tratar como esposos a personas que ante Dios no lo son. No está permitido poner a una pareja ilegítima [católicos bautizados que pretenden casarse por lo civil, lo cual es unirse en concubinato] en plano de igualdad con una pareja casada, o tratarla de la misma manera.
Sería conceder un certificado de “normalidad” a una situación anormal, que ofende gravemente a la ley de Dios y al bien común. Actuar así sería dar muestra de espíritu mundano, de cobardía, y faltar a esa fe viva que debe guiar al verdadero cristiano en sus pensamientos, sus palabras y sus actos.
• El matrimonio cristiano no puede aceptar cohabitar con el concubinato. Así la familia católica no debe [celebrar la pretendida boda civil, que es el caso aquí discutido, ni] recibir a la falsa pareja con ocasión de una reunión familiar: recibirla en un contexto familiar sería un disolvente de la familia. La familia puede acoger a su propio miembro que vive en ese estado de pecado, pero solo.
La concubina o el concubinario no forman parte de la familia, el acceso al santuario familiar les está pues cerrado. Quizá el miembro de la familia invitado se negará a venir si su concubina o su concubinario no puede acompañarle, y de ese modo ninguno de los dos vendrá. Pero el bien y la protección de la familia son primordiales."
"• Si se les ve excepcionalmente a los dos -y por lo tanto fuera del marco familiar- debe ser en el espíritu de iluminar las conciencias, si existe alguna buena voluntad por su parte. Puede ser también para mantener lazos familiares entre padres e hijos, o entre hermanos y hermanas. Pero hace falta que las cosas estén claras, y que tales encuentros no puedan interpretarse por la falsa pareja, o por otras personas, como una aprobación o una caución dadas a su situación, incluso aunque hayan pasado años.
Conviene en particular evitar todo riesgo de ambigüedad entre los jóvenes o los niños que estarían al corriente de tales entrevistas.
• La firmeza en los principios debe ir a la par con la caridad hacia las personas. Debemos parecernos lo más posible al mismo Dios, Dios que une el odio al pecado y la misericordia hacia el pecador: a su imagen, nos es necesario ser intratables hacia el pecado y amar al pobre enfermo. Es la actitud de que nos dio ejemplo nuestro Salvador con los pecadores públicos con quien pudo encontrarse, como la Samaritana, María Magdalena o la mujer adúltera: “Vete, desde ahora no peques más.” Por lo tanto no se hiere inútilmente, se explica nuestra actitud con toda caridad.
Pero amar al pecador es precisamente intentar sacarlo de su pecado. Y amar a los demás, es hacer de tal manera que el mal no se extienda más por nuestra inacción."
Como escribió Balmes, son los conservadores los que conservan la revolución.
No sé de qué te sorprende; pero, en fin, tú mismo.
Las declaraciones de la susodicha señorita son de hace una semana, en el ABC. Y respecto a cómo ves las cosas da le impresión de que lo único q tienen q hacer los católicos es ACOMODARSE sí sí y siempre. Nada d tener criterio, y mucho menos en católico: siempre hay excusas para la acomodación. El problema es q, como dice Jesucristo: "el q me confiese delante d los hombres... El q me niegue delante de los hombres...". Y q cada palo aguante su vela.
Te puedo asegurar q no h leído nunca El Español.
Lo que yo veo personalmente en la Obra es justo lo que usted dice al final: callar, callar y callar. Y si algo te preocupa y lo dices obtienes el silencio por respuesta. Muy frustrante todo. Al menos para mí. Todo esto es evidente que está sucediendo por la deriva doctrinal emprendida hace años, agudizada últimamente, pero como esto ya se ha dicho y explicado en libros y libros, en artículos y artículos, sólo diré que el que no se entera es porque no quiere.
Reitero mi agradecimiento (la nada) a sus palabras.
(...) De cualquier forma, una cosa no quita la otra y me parece que es muy valiente
Saludos cordiales
Me gusta el comportamiento de carmelitas y cartujos: los pontífices llegan y se van, y nosotros a lo nuestro, a cumplir la finalidad para la que fuimos creados y para la que quisimos entrar aquí.
Cuando Isabel Sánchez escribió este libro, lo primero que dijo, y a mí me pareció muy honrado por su parte, que eran opiniones personales suyas; es más, que entendía que algunas personas desde la misma Obra no las compartieran. Dicho esto: ¿dónde está el problema? En mi opinión, si sirve de algo, pienso que la farse en cuestión de la Obra y Podemos, no es muy acertada, porque es un ejemplo excesivamente forzado. Pero de ahí a incluir a la Obra como institución, por muy secretaria general que sea, no comparto esa crítica. Advirtió ab initio que era su opinión personal. No habría que tergiversar.
Hacer responsable último a mi amigo Andrés Ollero de la no sentencia del Tribunal Constitucional sobre el aborto, cuando depende de doce magistrados, me parece injusto. Máxime cuando a este catedrático de Filosofía del Derecho le he oído en sus clases y sus publicaciones defender abiertamente la vida del nasciturus.
Que Federico Trillo acudiera a la boda civil de Álvarez Cascos es una decisión suya, no de la Obra. Juzgar a alguien sin saber por qué lo hizo me parece arriesgado; involucrar a la Obra como institución mucho más.
No me parece prudente sembrar dudas sobre la Obra, como se ha podido causar entre los lectores, cuando, en mi opinión, no existe motivo alguna. Con todo afecto y cariño expongo mis opiniones. Un abrazo.
Haces muy bien en exponer tus opiniones: "viva la libertad", diría San Josemaria. Dicho esto, te explico mi posición, q se enmarca en ese mismo horizonte.
De Ollero digo, con los datos en la mano, incluso con sus declaraciones al respecto, que no se pronunció, como y cuando debía hacerlo, pues él -era su obligación profesional y moral, pues a él le correspondia-, dar su Dictamen al respecto. No hacerlo, durante DOCE años, en los q s iban sumando abortos a mansalva - no 1 o 2 al año, q tampoco justificarían su postura-, "porque no iba a haber consenso...", Pues juzgalo tú mismo. Cosa q ya haces, exculpado d toda responsabilidad al Sr Ollero. No es mi caso, xq no hay comparación entre una cosa y otra; y xq para hacer bien su trabajo, tanto en el plano profesional como moral, lo q vayan a hacer luego sus "colegios" NO es SU PROBLEMA: era dictaminar... Y no lo hizo.
Su trayectoria profesional, anterior o posterior no hace al caso: o sí; pero sí ha sido positivo, según tú, aún hace todo más inexplicable y escandaloso su proceder.
Y podría contestar tb a tus otras aportaciones, pero no hace falta. Ya digo q: viva la libertad.
He hecho referencia a la Obra, después de hacer referencia a actuaciones publicas, como mínimo discutibles, de miembros relevantes de la misma. Como es pública mi actuación personal. Podría esconderme en un pseudónimo, y no lo h hecho, xq pretendo hacer un servicio a la Obra, no meterme con Ella, xq es mi vida.
O quizá es q la actuación pública de esas personas hay q asumirlas, por los demás miembros del Opus Del como una ampliación del CREDO: todo Dogma de Fe?
Y si no lo hacemos así, desbarramos?
Por su clarividencia y valentía, por el gran servicio y luz que acaba de hacer a la Obra, dormida y acomodaticia en muchos miembros, como esa pequeña muestra que menciona. Yo lo observo, y lamento, tambien en muchos otros. Creo que el clericalismo oficialista se ha posesionado de la Obra; que, por ejemplo, ha tenido una sumisión inexplicable junto con dicho oficialismo eclesial, a las normas totalitarias (paganas) de dos decretos del gobiero socialcomunista ILEGALES que, a mayor bochorno para dicho oficialismo clerical, no prohibían, sino que expresamente permitían, los actos de culto. Pues bien, en la Obra no sólo nadie se opuso ni levantó la voz contra este terrible atentado sin precedentes a los derechos de Dios y de los católicos de bien, sino que suspendió los medios de formación y ni siquiera permitió las confesiones y asistencia a Misa de supernumrarios en los centros mientras persistió el aberrante cierre de los templos. La farsa plandémica y vacunal no tuvo respuesta científica y rcional alguna por parte de la crème eclesial, que hast ahora era la Obra. Mucho más se podía decir (supresión de reclinatorios y de agua bendita, Comunión en la mano, en los templos llevados ñor sacerdotes de la Prelatura)... Un mutismo que el tiempo ya está juzgando.
Una autoridad se deslegitima automáticamente en cuanto legisla contra Dios. X eso, un católico no puede aceptar esas leyes. X eso ha habido y hay mártires. Además, un bien posible no justifica un mal real.
Me apena mucho que personas de su calidad y condición opinen a partir de campanas que oyen, no saben dónde (Infovaticana, por ejemplo, paradigma de manipulación estercolera e interesada, de la que, lamentablemente la palma la lleva el viejo resentido y calumniador Cigoña, por mucho que sea su amigo).
A mi me apena lo de Ollero, lo tuyo, y alguna cosa más: ¡qué le vamos a hacer! Otra cosa es quién tiene razón en todo esto; que es el quid del tema.
Para decir lo que digo sobre el sr. Ollero, me baso en dos HECHOS: no en cosas inventadas por tu buenismo, o tu falta de entendimiento o yo qué sé: DOS HECHOS, innegables y bien a la vista.
Primero: el HECHO de los DOCE AÑOS. HECHO que para una persona -dada su pertenencia al Opus Dei de tantísimos años- que tiene como objetivo de su vida "santificarse con/en su trabajo ordinario" (o extraordinario, si hace falta), no esta nada mal como modelo de santificación. Ni aposta, oiga.
Segundo: sus declaraciones en El País o El Mundo (ahora no las tengo delante, y no recuerdo bien dónde las realiza: quizá lo sepas tú mejor que yo, dado que no comulgas en casi nada con él: ¡no te lo crees ni tú!). En ellas declara que no sacó su Dictamen porque no encontró "buena disposición" entre sus colegas, y no quería que volviese a pasar lo del "voto de calidad" de aquel presidente, de infeliz memoria de hace ya años.
NO da más explicaciones. Y todo esto, que NO ES SU PROBLEMA DE CONCIENCIA -no sé lo que le habrán "aconsejado" en todos estos años sus directores espirituales, que los ha tenido, fijo-, lo asume él como propio -no los abortos que estaban cayendo, sí o también-, y lo coloca por encima del MILLÓN de ABORTOS generados en esos doce años: que era lo que se ventilaba. "¡Vé, y cáscaselo", chaval!".
Esta decisión -¡callar por doce años!- es única y exclusiva del sr. Ollero, que era el Ponente. Si la sacaba y luego no salía: eso sí que no era su responsabilidad. Pero callar, cuando debía hablar: SÍ. No ha hecho su trabajo. Y, con lo que estaba y está en juego, eso es gravísimo de total gravedad.
Él y sus múltiples "acompañantes espirituales" sabrán. Yo también, y por eso digo lo que digo. Si te sabe mal, no sabes cómo lo siento...
Lo que dices sobre infovaticana y el Sr. de la Cigoña, para justificar al sr. Ollero, que no tiene ni media defensa sana y digna, se comenta por sí solo, y te retrata perfectamente. Es lo que pasa: que cada uno se retrata a sí mismo con lo que dice, con lo que escribe, y con lo que calla. Por esto yo hablo y escribo como lo hago. Y con mi firma.
Me remito a las palabras y a los hechos de sus autores: no a su "libre y aventurada interpretación", como haces tú.
Ya sé que lo del "contexto", bien sea "dentro" o "fuera" del mismo, es muy socorrido, y da para todo. Pero yo me limito a lo que hacen y dicen públicamente las personas, y lo pongo todo en relación a la Doctrina, y a la Vocación y Misión de cada uno: nada más. Guste o no guste: no es mi problema. Y lo hago, porque no son tiempos para tonterías: hay demasiadas. Sino para "ser Testigos", como nos encomienda el Señor Jesús. Los tiempos de las "prudencias" no son estos tiempos. Los tiempos de decir una cosa por "lo privado" y otra muy distinta por "lo público", no es de recibo. Y grava las conciencias. También no asumir lo que nos pide el Espíritu Santo en estos tiempos... "tan buenos, porque son tiempos muy malos".
Como cada uno es "esclavo" de lo que dice y de lo que hace, y "se retrata" así, si el retrato no es de tu gusto, no es mi problema.
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