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4.04.09

Uriarte: un obispo caducado y claudicante

En Libertad Digital se puede leer este sumario de la noticia:

“El obispo de San Sebastián ha vuelto a defender los “derechos humanos” incluso para los “mayores culpables". Para Uriarte, hay que recortar las aspiraciones para “convivir pacíficamente” con los que apoyan la violencia. Uriarte también expresó recientemente su cercanía a los familiares de etarras.”

A los pocos días de expresar su cercanía a los familiares de etarras; al día siguiente de la constitución del nuevo parlamento vasco, donde populares y socialistas han pactado una presidenta popular y van a desalojar del gobierno autonomo a los nacionalistas, que llevan treinta años en el poder, un señor obispo caducado, ya que presentó su renuncia por motivos de edad al Papa Benedicto XVI hace meses, se convierte en claudicante ante el mundo de los asesinos pidiendo unos derechos humanos para los mayores culpables, cuando los asesinos no tuvieron la más minima forma humana de tratar a sus víctimas, que solamente pueden ser visitadas por sus familiares en el cementerio.

Los obispos, rendidos al dios del nacionalismo, deben ser apartados de su puesto rapidamente. La lentitud de la Nunciatura en España para proveer las diócesis con obispo caducado produce en los cristianos locales y del resto de España situaciones como la que estamos señalando con el dedo.

La postura del obispo Uriarte es aquella de la gente que dice:!A mí ya me da todo igual; digo lo que me da la gana, porque nadie va a tomar medidas canónicas¡. Después de los 75 años es una barbaridad que no se quite a estas personas que en vez de pastores, son lobos vestidos de pastores.

Si se desea caminar en una nueva etapa de convivencia en el País Vasco, tras las últimas elecciones, ¿por qué este señor se pone, en nombre de la Iglesia y de la caridad mal interpretada, a meter palos en las ruedas para que el carro descarrile?. Desde luego, existen motivos para que mucha gente hable mal de una Iglesia rendida al nacionalismo en todos los aspectos de la vida. Una Iglesia que esté a los pies de cualquier nacionalismo es una esclava de una dictadura mental.

Y, por lo tanto, no es la Iglesia del Señor Jesús, que desde mañana lo veremos entrar en Jerusalén para que los ciegos hipócritas nacionalistas de aquella época lo lleven el Viernes Santo hasta el patíbulo de la Cruz. Menos mal que resucitó al tercer día.

Tomás de la Torre Lendínez

Comentarios vivos al Ideario de Cope (III)

Seguimos con los comentarios vivos al Ideario de la Cope. Hoy tenemos lo siguiente:

II. Servicio a la verdad, con espíritu de convivencia y criterio independiente.
Tanto en sus servicios informativos como en los programas de debate y opinión, los profesionales de la COPE comprobarán con rigor la verdad de los hechos y la fiabilidad de sus fuentes noticiosas, aún dentro del apresuramiento que impone la celeridad de la radio. En la expresión de opiniones propias y ajenas, la COPE observará como regla de estilo el respecto a las personas y el diálogo civilizado, rehuyendo el apasionamiento unilateral y la crítica sistemática.

En el tratamiento de los temas ideológicos y políticos ejercerá la libertad constitucional de información y de expresión, con sentido de la responsabilidad y criterios de independencia, sin involucrar a la Cadena ni a ninguno de sus espacios en opciones partidarias.

III. Línea editorial y libertad interna.
Sin mengua de su carácter de cadena profesional y comercial, la COPE se sitúa en el ámbito de aquellos medios informativos que se comprometen con un cuadro de valores y asumen opciones sociales, educativas, culturales y espirituales. Para no quedarse en vagos enunciados, estos propósitos deben traducirse en una “línea editorial” de la Cadena, inspirada en su ideario y en consonancia con él; comprometida con las necesidades y aspiraciones profundas de nuestra sociedad; e identificadora claramente de este “Medio", ante las demás emisoras y ante la opinión pública.

Es función de los órganos rectores de la empresa establecer los componentes básicos de esta línea editorial y definirla en determinados momentos ante las cambiantes situaciones de la actualidad.

Esta línea será interpretada por los directores de programas y por los profesionales de la plantilla, con un amplio crédito de confianza, respetuosos con la responsabilidad y la creatividad de los mismos.

Las personas que son llamadas a cualquier responsabilidad de COPE, tienen el derecho y el deber de conocer previamente el Ideario y los componentes esenciales de su línea editorial. La aceptación de un cargo de índole redaccional implica también la asunción por el interesado de los compromisos morales y profesionales exigidos por el Ideario. El menosprecio, la hostilidad, la incongruencia profesional y el silencio sistemático o reiterado sobre los mismos, cuestionarían, en principio, su permanencia en el servicio, a salvo siempre su persona de cualquier arbitrariedad no constatada.

Los programas de la Cadena y de sus emisoras estarán siempre en consonancia con la línea editorial y ésta con el Ideario. Por lo demás, sus antenas han de estar abiertas a la expresión de otros pareceres, en entrevistas o debates, siempre que no atenten contra el significado de la Cadena, abusando de la hospitalidad de la Casa. En ella debe darse siempre un talento democrático y un respeto al pluralismo, cuidando siempre también que el oyente conozca adecuadamente en cada tema la posición al respecto de la Emisora.

Los dos primeros párrafos son muy interesantes. La llegada de los naúgrafos del “antenicidio” supuso que estos aspectos del Ideario tuvieran que adaptarse a los vaivenes cambiantes de la situación: la corrupción felipista era inmensa, los crímenes del Gal estaban en todas las portadas, la emergencia del Partido Popular, nacido en el congreso de Sevilla de 1990 aupó a Jose María Aznar a ser líder de una fuerte oposición contra con el “régimen” felipista. Las tertulias dirigidas por Antonio Herrero eran escuchadas en la Moncloa, la gente de Antena 3 radio se pasó en masa a Cope, la audiencia subía como la espuma. En en el Primero de la mañana, de Antonio, y en La linterna de Luis Herrero se daba estopa al felipismo.

Por las tardes, Encarna también largaba todo lo que podía y más. Y por la noche José María García descubría los manejos políticos en torno al deporte. La Cope llegó a ser un criterio de verdad objetiva, y la única cadena de radio donde la gente acudía para informarse, lo que el imperio de Polanco no daba. Las grandes batallas por los números del Estudio General de Medios eran importantisimas.

A nivel local, el director que no llegaba a superar los presupuestos aprobados en Madrid era fulminado del puesto. En el espacio de cinco años pudimos conocer a cuatro directores, y ninguno estaba allí con el espiritu y la letra del Ideario, que comenzó a hacer aguas, ya que las quejas contra la Cope, para hacerla desaparecer comenzaron a llegar a todas las esferas del poder, siempre alimentada por Polanco.

Los cinco siguientes párrafos fueron una meta muy buena, pero nunca cumplida del todo. La libertad editorial y la libertad interna quedaban muy bien sobre el papel del Ideario, pero en la práctica solamente se cumplía el aspecto editorial de la cadena, que elegía a sus editorialistas según soplaba el viento de la política, de la economía, del comercio y de la sociedad.

El aspecto de la libertad interna de cada director de la progamación era muy discutible. Estaba el que deseaba plegarse a la letra y solamente la letra del Ideario. Y los que no se plegaban ni a la letra ni al espiritu del Ideario. Un caso singular fue cuando una mañana Antonio Herrero comparó a una ministra socialista con una becaria cercana al presidente americano. Los palmeros polanquistas pedían la pena de muerte. Antonio y sus compañeros, unidos como una piña, pidieron perdón públicamente a la audiencia, que les premió con una total adhesión.

A nivel local existía total libertad en el campo de la información religiosa para realizar el Espejo de la Iglesia, desde 1993, situado de tres a cuatro de la tarde de los viernes y el programa informativo local colocada a las 9,45 de la mañana del domingo. Además el padre José Luis Gago apostó por transmitir la Santa Misa desde varias ciudades de España. Normalmente era una carrera de los directores locales para ganarse el favor de la letra y el espiritu del Ideario y poder ascender dentro del escalafón empresarial. Recordamos con gusto las Eucaristías emitidas y celebradas por el obispo local, quien se quedaba muy contento cuando le correspondía salir por las ondas para toda España.

A Cope se le comenzó a llamar la “radio de las estrellas". Era verdad. La lista era de lujo: Antonio Herrero, Carlos Herrera, Encarna Sánchez, Luis Herrero, José María García…Pero las estrellas fueron decayendo: Encarna falleció de muerte natural. Antonio Herrero murió haciendo submarinismo. José María García se retiró aquejado de un cáncer…
Los dos curas: Herraéz y Gago estuvieron en los entierros de Encarna y Antonio.

A nivel local, el padre José Luis Gago se prestaba como un cura de toda la cadena a acudir al matrimonio de jóvenes trabajadores de la Cope; y hasta presentarse a predicar los cultos de Semana Santa de varias cofradías donde estaba inscrito el personal de la empresa.

Nosotros seguiremos estos comentarios vivos y vividos. Gracias por leerlos.

Tomás de la Torre Lendínez

3.04.09

La Pasión de arcilla

La inquisición, con minúscula, algunos la portan en la sangre. Siempre nos han tachado de inquisidores a los católicos por todos los desmadres históricos pasados. Ahora la postura mental y real de la inquisición la ejercitan otros.

Por ejemplo, un instituto de enseñanza secundaria obligatoria quita los carteles colgados, referentes a la Semana Santa, con imágenes de Cristo y la Virgen. Algunos pulcros ojos de laicistas ejercientes se sienten ofendidos por estas exhibiciones públicas de una religión que, según ellos, es una actividad privada. La contradicción la llevan en la sangre ya que algunos se han ido a ver “procesiones relgiosas” a una ciudad de Castilla la Vieja. Y otros, son miembros de una junta de gobierno de una cofradía, en cuya procesión llevarán su vara de mando en plaza vestidos de nazareno como el trueno de Machado.

Mientras, podemos leer en Religión en Libertad:

“El Vaticano expresó hoy su estupor por la resolución votada por el Parlamento de Bélgica que condenó oficialmente las declaraciones de Benedicto XVI sobre la ineficacia del preservativo en la lucha contra el Sida en Africa. “Suscita estupor dado que en todo país democrático es obvia la libertad del Santo Padre y de la Iglesia Católica de expresar las propias posiciones", declaró el portavoz de la Sede Apostólica, Federico Lombardi. Igualmente, los obispos católicos de Bélgica han expresado su pesadumbre por la resolución aprobada ayer por la cámara de diputados de este país.”

La libertad de expresión del Papa Benedicto XVI es mandada a paseo. Todo un parlamento no tiene otros problemas más acuciantes, como la crisis económica actual, por ejemplo, que votar una condena de las declaraciones del Papa sobre el manido y viejo asunto de sus declaraciones sobre el uso del preservativo en la lucha contra el Sida en África.

Menos mal, que un amigo me habla de un asunto muy interesante:
La parroquia de Nuestra Señora de los Ángeles, de Cabeza la Vaca, en la provincia de Badajoz ha presentado una exposición para la Semana Santa, donde a través de más de un centenar de imágenes de arcilla con sus edificios correspondientes, realizados por Rufi Belmonte, de tan solo 14 años, se puede ver los últimos momentos vividos por Jesucristo en la tierra, desde su Entrada triunfal en Jerusalén… hasta la Resurrección con el sepulcro vacío y su aparición a María Magdalena. Todo ello a través de nueve escenificaciones ilustradas con sus correspondientes textos bíblicos para que todos aquellos que la visiten puedan situarse en todo el contexto de la Semana Santa.

Según, mi amigo lo que se ha intentado es “dar unas catequesis ilustradas para los niños, pero ha sido tal la acogida y aceptación entre los adultos, que lo hemos tenido que ampliar y completar con más escenas, de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo. Lo que más le gusta a la gente es la Vía Dolorosa con la Crucifixión y lo que les llama la atención es el Sepulcro de Jesús”.

En el Viernes de Dolores me quedo con esta última noticia. Me prepara mejor a vivir los días santos de la Pasión del Señor.

Tomás de la Torre Lendínez

2.04.09

La Iglesia en la cárcel

En todos los medios de comunicación siempre sale como asunto diario: la situación de la justicia en España. Unas veces por una huelga; otras por falta de medios; otras por dejación de funciones; otras por tener un gusto especial a los fogonazos de las cámaras de fotos y televisión; otras por los repartos que realizan los partidos. Está claro que la justicia y sus asuntos sigue siendo noticia.

Para la Iglesia de España, de modo singular para la Comisión Episcopal de Pastoral Social y su Departamento de pastoral penitenciaria, la justicia también es objeto de estudio y diálogo. En este marco durante mañana y pasado tendrá lugar en Madrid un Encuentro de juristas y pastoral penitenciaria, que tratará el tema siguiente: Precariedad social, derechos humanos y sistema penitenciario. Dirige y coordina don José Luis Segovia Bernabé.

La primera conferencia la impartirá don Julián Carlos Rios Martín, profesor de Derecho Penal, de la Universidad Pontificia de Comillas, quien hablará sobre: Precariedad y derecho penal, nuevos retos para el ejercicio de la defensa jurídica. La segunda ponencia está a cargo de don José Miguel Sánchez Tomás, Letrado del Tribunal Constitucional, quien tratará sobre: Los derechos humanos y sistema penitenciario. El tercer asunto está en manos de don Andrés Martínez Arrieta, Magistrado de la Sala II del Tribunal Supremo, quien disertará sobre: Desigualdad social: enfoque jurisprudencial.

Se acabará al mediodía del sábado extrayendo unas propuestas legislativas del área jurídica. El lugar de las sesiones de trabajo es la casa de las Religiosas Franciscanas Misioneras, en la calle Santa Engracia 140, de Madrid.

La Pastoral Penitenciaria, promovida por la Iglesia de España, es un buen servicio cristiano que se ofrece en todas las prisiones españolas. Son los propios obispos diocesanos, quienes tienen un equipo englobado en la capellanía, donde colaboran laicos, religiosos y los mismos sacerdotes, nombrados por el obispo local.

Dentro de las agendas episcopales no falta la visita a la prisión que haya en su demarcación diocesana. Ayudar a los reclusos y sus familias sigue siendo una de las obras de caridad y misericordia de la Iglesia. Y todo lo que se haga en esta vertiente pastoral es necesario y plenamente evangélico.

Tomas de la Torre Lendínez

Comentarios vivos al Ideario de Cope (II)

Hacemos la segunda entrega de nuestros comentarios vivos sobre el Ideario de la Cope. Hoy nos fijamos en ésta parte:

“II.-Objetivos de la misma
Figuran señalados en el articulo tercero de los Estatutos de la Sociedad y son los siguientes:

1- Difundir la doctrina y actividades de la Iglesia Católica.
2- Orientar a la opinión pública con criterio cristiano.
3- Colaborar en la promoción humana, social y cultural de la sociedad en general.
4- Ofrecer programas informativos de noticias, comentarios, editoriales y demás servicios que pueden enmarcarse dentro de esta temática.
5- Ofrecer programas recreativos de sano esparcimiento.

B) COMPROMISOS PROFESIONALES Y ETICOS
La identidad cristiana y eclesial de la Cadena y sus fidelidades esenciales están llamadas a impregnar el talante y el funcionamiento empresarial, editorial y laboral de COPE, y debe concretarse en unos rasgos definitorios de la misma, en unos compromisos morales que configuren su fisonomía, hacia adentro y hacia fuera. He aquí algunos:

I. Rigor y calidad profesional
Fiel a una tradición inspirada en el Cardenal Herrera (ser un periódico, para poder serlo católico) la Cadena de Ondas Populares Españolas se impone a sí misma con rigor el empeño por la calidad profesional a todos los niveles : financiero, redaccional, laboral y publicitario. Sin competencias deshonestas, procurará ocupar una posición honrosa en el ámbito de la radiodifusión española y mantendrá relaciones leales con los otros medios, privados o públicos, del mismo carácter.

En la transmisión de noticias, mensajes y valores, tendrá siempre en cuenta peculiaridades, posibilidades y limitaciones del medio radiofonico. COPE cuidará esmeradamente la formación inicial y permanente de sus profesionales en todos los ramos y niveles y, con especial énfasis, la de los responsables de la información, opinión, programación musical e inserciones publicitarias. Esta formación ha de cubrir los aspectos técnicos, culturales, deontologicos y humanistas que definen a la Cadena.

Al amparo de su propia “Fundación Radio Popular” organizará periódicamente para los profesionales de su propia plantilla, cursos de actualización, no tan sólo de carácter técnico, sino comprensivos también de la formación doctrinal y moral.”

En el primer párrafo encontramos los cinco objetivos que son básicos y fundamentales. Siempre hemos estado de acuerdo con ellos. Pero conocemos cómo se han ido descafeinando conforme han pasado los años. En el año del nacimiento del Ideario,en 1991, todos los directivos locales nos pedían que mejorásemos la información religiosa diocesana. A comienzos de 1992 nacieron los llamados Espejos de….Uno de ellos fue El Espejo de la Iglesia, que estuvo colocado en la franja horaria de las 20 a las 20,30. Detrás pusieron el Brocal de los decanos, llevado como hasta hoy por una persona inmejorable: el doctor don Esteban Pérez Almeida. Aquellos programas tenían que ser grabados porque el personal técnico plegaba cuando acababa el programa de Directamente Encarna. Mientras, el rezo del Rosario se cayó de la parrilla de programación local. La gente protestó. No se les hacía caso a las llamadas.

El segundo párrafo nos lleva a pensar en una idealización de la empresa Cope, desde el punto de vista cristiano. Valga solamente un ejemplo: Un obispo anunció con tiempo la Visita Pastoral a la emisora local, tal día y a tal hora. Cuando llegamos solamente nos recibieron dos personas: el administrador y el control. El resto brillaba por su ausencia. Si esto se llama:"impregnar el talante y el funcionamiento empresarial, editorial y laboral de Cope". Nosotros no lo calificamos así.

En el tercer párrafo encontramos que Cope desea ser una antesala de la vivienda de los ángeles celestes. Las competencias internas, las zancadillas personales, los empleados selectos, las relaciones inexistentes con el resto de medios de comunicación son moneda de curso legal. En el verano de 1992 desembarcaron en Cope: Antonio Herrero, Luis Herrero, José María García y Federico Jiménez Losantos. Eran las víctimas del “antenidicio” perpetrado contra Antena 3 Radio por la empresa de Jesús de Polanco. A nivel local las emisoras de la Ser tiraban con bala a la Cope local por recoger a aquellos naúfragos.

En los párrafos cuarto y quinto lo que está escrito se cumplió muy bien, la Fundación Radio Popular sirvió para la puesta al día de los profesionales de la Cope. Ya se había producido el traslado de la cadena hasta la calle Alfonso XI, dejando la sede de Juan Bravo para la actividad formativa de los cuadros de provincias. Todos, incluidos los responsables de la información religiosa, pasamos por aquellas instalaciones. Los maestros eran hombres de la Cope auténtica, vivían el espíritu fundacional, deseaban que el producto radiofónico mejorase, había un ambiente muy sano en los cursos que nos fueron dando. Allí conocimos a dos curas claves en Cope: Don Bernardo Herráez, vicesecretario de la Conferencia Episcopal para asuntos económicos; y el padre dominico José Luis Gago, director de la programación socio religiosa de la cadena.

Estos dos sacerdotes vivían el “estilo Cope” como deciamos y ayudaron a subir a la cadena a su más alto puesto en todos los órdenes. Lo que más admiramos en ellos es que sembraban la paz en todo: emisoras locales, regionales y en Madrid, la central.

Seguiremos con nuestros comentarios vivos de este Ideario. Es el momento.

Tomás de la Torre Lendínez