Para rezar en tiempos de coronavirus
Abandono y confianza bajo la protección divina
Tú que habitas al amparo del Altísimo, / que vives a la sombra del Omnipotente,/di al Señor: “Refugio mío, alcázar mío,/ Dios mío, confío en ti”.
Él te librará de la red del cazador,/ de la peste funesta./ Te cubrirá con sus plumas,/bajo sus alas te refugiarás:/ su verdad es escudo y armadura./ No temerás el espanto nocturno,/ ni la flecha que vuela de día, /ni la peste que se desliza en las tinieblas,/ ni la epidemia que devasta a mediodía” (Salmo 91, 1-6).
Súplica ferviente
Santo Dios, Santo Fuerte, Santo inmortal, ten misericordia de nosotros.
Padrenuestro, Avemaría y Gloria.