EUTANASIA: por lo civil y por lo eclesiástico.
La EUTANASIA es un hecho cierto de puro visible: en bastantes países está ya -instalados, política y socialmente en las democracias liberales, en las tiranías marxistas o afines y en los países regidos ya por la directa, por los masones: todos ellos abiertamente anticatólicos-, introducida y apoyada por los poderes públicos que la han convertido en abiertamente “legal". Es la EUTANASIA.
Algunos eclesiásticos, como no pueden legislar por lo directo a su favor, por mor del “bicho” la han introducido e implantado de facto desde arriba -eclesialmente hablando-, y como el que no quiere la cosa. Pero ahí está también. Y lo explico más abajo.
Si en el ámbito político, que hace ya muchos años ha perdido el norte, el sur y los demás puntos cardinales, ninguna barbaridad, por cruel e inhumana que sea en sí misma, nos extraña ya nada; menos aún, una vez establecido el “aborto legal". Pero, algunos miembros de la Iglesia Católica -las “otras” en este momento, no me interesan-, extraña, y mucho. Por no decir, sencillamente, que ESCANDALIZA.
¿Por qué los poderes públicos han perdido el norte? No es difícil constatarlo, y es evidente. Por citar a san Juan Pablo II: “el Estado que legitima el aborto, se deslegitima automáticamente”. Por poner un poner. Y en esas están en casi todos ellos. Los motivos que puedan alegar para justificarlo, no son de recibo ninguno de ellos: ni intelectual, ni moral, ni socialmente justifican nada.