María, Pilar de la fe
“Oh Virgen del Pilar, Reina y Madre. España y todas las naciones hispanas reconocen con gratitud tu protección constante y esperan seguir contando con ella.
Obténnos de tu Hijo fortaleza en la fe, seguridad en la esperanza y constancia en el amor.
Queremos que en todos los instantes de nuestra vida sintamos que tu eres nuestra Madre.
Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.”
Para los católicos, tenemos en mucho a la Madre de Dios y la amamos de una forma por la que, muchas veces, se nos tilda de exagerados. Sin embargo, bien sabemos que todo el amor que mostremos por María, la Virgen Santísima e Inmaculada, será poco porque los méritos de la Madre de Dios y, también, el auxilio que nos proporciona cuando la requerimos, valen más que todo lo que el mundo pueda ofrecernos.