La defensa de la vida del señor Zapatero

            Nuestro presidente Rodríguez Zapatero se expresaba en Ginebra el pasado 24 de Febrero con estas bellas y afortunadas palabras en un alegato contra la pena de muerte: “nadie tiene derecho a arrebatar la vida de otro ser humano, absolutamente nadie” y “nuestro éxito será el éxito de los derechos humanos, el éxito de la dignidad de las personas, de la protección de la vida y el éxito de los Estados que respeten hasta el último instante la vida de todos y cada uno de los ciudadanos”.

Pero precisamente ese mismo día, el Senado español daba luz verde a la Ley sobre el aborto, impulsada personalmente por el señor Zapatero, hasta el punto que ni siquiera figuraba en el programa electoral, y en la que no  ha querido permitir a los diputados y senadores que puedan hacer uso del derecho humano fundamental a la libertad de conciencia y al uso de la objeción de conciencia, con lo que ha obligado a los legisladores de su partido a hacerse partícipes de colaboración con él en el crimen abominable del aborto. Quien califica así al aborto es el Concilio Vaticano II: “el aborto y el infanticidio son crímenes abominables” (“Gaudium et Spes” nº 51). La nueva ley declara el aborto libre hasta la catorce semana y lo convierte en un derecho. Después de esa fecha, especialmente si pueden estar presentes anomalías, se sigue permitiendo el aborto y se trata de favorecer a las clínicas abortistas evitándoles que puedan tener problemas jurídicos. Recordemos, como nos recuerda el caso Himmler, quien en su vida sólo presenció una ejecución, que para cometer un crimen no es necesario estar presente. Basta con ayudar a que se pueda hacer.

En pocas palabras, el Señor Zapatero, y en eso estoy de acuerdo con él, es contrario a que se pueda privar de la vida a un adulto, aunque sea culpable.  Pero en cambio le parece muy bien, e incluso de delito lo transforma en derecho, si se trata de un ser humano inocente antes de su nacimiento. Eso es desfachatez e hipocresía, palabra ésta por cierto utilizada por Jesucristo contra los escribas y fariseos (Mt 23,13-33).  Para un católico “el absoluto carácter inviolable de la vida humana inocente es una verdad moral explícitamente enseñada en la Sagrada Escritura, mantenida constantemente en la Tradición de la Iglesia y propuesta de forma unánime por su Magisterio”… “la eliminación directa y voluntaria del ser humano inocente es siempre gravemente inmoral” (Encíclica “Evangelium Vitae” de Juan Pablo II, nº 57). “La tolerancia legal del aborto o de la eutanasia no puede de ningún modo invocar el respeto de la conciencia de los demás, precisamente porque la sociedad tiene el derecho y el deber de protegerse de los abusos que se pueden dar en nombre de la conciencia y bajo el pretexto de la libertad” (EV nº 71). “El aborto y la eutanasia son crímenes que ninguna ley humana puede pretender legitimar” (EV nº 73). Ante las leyes que admiten el aborto o la eutanasia “nunca es lícito someterse a ellas, ni darle el sufragio del propio voto” (EV nº 73); “la defensa y la promoción de la vida no son monopolio de nadie, sino deber y responsabilidad de todos” (EV nº 91). Hemos llegado hasta tener un ministro, Bernat Soria, especialista en investigación en células madres embrionarias, investigación que sólo sirve para malgastar el dinero.

No es la única ocasión en que el señor Zapatero ha demostrado tener ideas muy extrañas sobre la defensa de la vida humana. Todos le recordamos en la legislatura pasada,  cuando calificaba de accidentes a los atentados terroristas con víctimas mortales, o cuando trataba de convencernos que los terroristas eran “hombres de paz” y “representan el futuro”, o cuando nos mentía diciendo que después del atentado en la T 4 de Barajas se habían roto las negociaciones con ETA. No nos olvidemos tampoco que la investigación del 11-M no ha tenido ni está teniendo facilidades, cuando saber quien mandó destruir los trenes no debe ser precisamente difícil.

Por nuestra parte debemos tener muy claro que la solución a nuestros problemas nos la indica Dios Padre en el evangelio de la Transfiguración, cuando se refiere a Jesús: “Éste es mi Hijo elegido, escuchadle” (Lc 9,35). Nunca olvidemos que el Bien es más fuerte que el Mal, que Jesucristo en su Pasión y Muerte ha derrotado al espíritu del mal y que, aunque en nosotros hay una inclinación hacia éste, también hay una gran y profunda aspiración al Bien, aunque para conseguir transformar la Sociedad, hemos de empezar por transformarnos a nosotros mismos, dejándonos ayudar por la gracia de Dios. Si la oración y el buen ejemplo de los que nos han precedido han contribuido a que en nosotros haya cosas buenas, también nosotros podemos contribuir con nuestra oración y buenas obras, a la mejora de los demás y de la Sociedad. En este punto no puedo por menos de recordar ese refrán que dice: “Reza como si todo dependiese de Dios, trabaja como si Dios no existiese y todo dependiese de ti”. No debemos perder la esperanza, pues siempre se puede hacer algo en cualquier situación, especialmente cuanto que en el momento actual hay cada vez más gente que, ante el extraño sentido de nuestros gobernantes de lo que hay que entender por valores, que  es lo que nosotros normalmente entendemos por aberraciones, se está concienciando de la necesidad de defender los valores humanos y cristianos de nuestra Sociedad.

 

Pedro Trevijano, sacerdote

7 comentarios

Anónimo
Exacto:hay solución para absolutamente todo,aún para lo que nos parece imposible cambiar,como es el caso del aborto en España.Lo único que debemos hacer para encontrarla es ponernos a la escucha como usted dice en la oración diaria y los sacramentos.Sólo Él sabe cual es el mejor camino.Únicamente es necesario escucharLe y confiar en Sus caminos,aun cuando en los momentos,que los hay,que nos parezcan una locura.
Y...cuantos más sigamos ese camino,mejor para todos,empezando por nosotros mismos,ya que sólo seremos verdaderamente felices cumpliendo Su voluntad,por ser Él quien mejor nos conoce.Mejor dicho,el único que verdaderamente conoce al hombre.
¡¡¡Ánimo y a rezar más todos!!!
3/03/10 6:48 PM
Yo no tengo ni idea de Teología, pero lo que no me cabe en la cabeza es que este señor que nos mal-gobierna apoye el aborto y a la vez esté en contra de la pena de muerte. Se me escapa por completo la línea argumental. ¿Amor a la vida? Sí, sólo cuando interesa.
4/03/10 4:09 AM
Dan
"investigación en células madre embrionarias, investigación que sólo sirve para malgastar el dinero." Demuestra que Vd.no tiene mucha idea sobre células madre. Sabe que se puede curar un infarto de miocardio con células madre. Le ruego que se ponga al día en este tipò de investigaciones y seguro que no dirá que es malgastar el dinero. Seguro
5/03/10 1:25 AM
Pedro Trevijano
A Dan: Distingamos entre células madres embrionarias y no embrionarias. El Instituto de Medicina Regenerativa de California ha reducido al mínimo la investigación con células madres embrionarias, es decir la que se hace destruyendo embriones humanos, para concentrar su investigación en las células madres adultas, o sea aquéllas cuya investigación no presenta problemas éticos. La razón es que después de gastarse sin resultados 3.000 millones de dólares en las células madres embrionarias van a concentrar sus esfuerzos en las células madres adultas o no embrionarias, donde sí se están logrando resultados.¿Queda claro?
5/03/10 10:36 AM
Dan
Mira Pedro, sino no están investigando a tope sobre células madre embrionarias es por la cantidad de cortapisas que están poniendo al tema. Cuestiones de tipo ético más que científico. No hay duda que las células madre adultas también ofrecen vias de investigación importantes. Sin duda. Pero lo que yo digo es que tanto las unas como las otras son válidas para llegar a objetivos científicos que radicalicen de una vez por todas las taras y las enfermedades que actualmente se padecen y que por estos experimentos se resolverían.
7/03/10 12:02 AM
Pedro Trevijano
Dan: ¿Me puede Vd. decir que los californianos y Bernat Soria han encontrano cortapisas a sus investigaciones por motivos éticos? Reconozco que me gustaría saber qué avances científicos se han conseguido con la investigación con células madres embrionarias, porque con las células madres adultas sí se han conseguido unos cuantos. Pedro Trevijano.
7/03/10 12:47 AM
Es con frecuencia desmoralizante tener que moverme en ambientes abiertamente hostiles a pensar - o peor aun, tener la osadía de hablar - en contra del aborto, pero prefiero y doy la bienvenida a cualquier represalia antes que sembrar a mis congéneres en placas de Petri o descuartizarlos para descartarlos en un contenedor de basura.

El proyecto para legalizar el aborto ya se está discutiendo en mi país (Uruguay) y es sólo cuestión de tiempo que se apruebe (tienen mayoría en ambas cámaras y un terrorista/presidente que ya afirmó que no va a vetar esa ley); pero con o sin contemplación del derecho a objeción de conciencia, mi negativa es rotunda e irrevocable.

La medicina y la biología molecular se han hartado de demostrar el carácter humano de esos niños, tan humanos como cualquiera de nosotros. ¿Una ley de escritorio pretende cambiar la naturaleza misma contenida en ese ovillito fascinante que es nuestro genoma? He de confesar que lo dudo: Dios hay uno sólo y no son un puñado de legisladores comprados con los millones que moviliza la industria abortuaria y de experimentación embrionaria (como si hubiera aportado algo mínimamente rescatable).

Seguimos esperando los resultados de la cura milagrosa. A mí no me ha llegado ninguno en estos 4 años de tránsito por facultad de medicina (y dudo que lo hagan en los 4 y medio más que me quedan todavía por delante); hasta ahora sólo el reflejo iridiscente de promesas inexactas en las turbias aguas de la experimentación embrionari
28/09/10 11:51 PM

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