(InfoCatólica) El acuerdo entre Icon Productions, la productora de Mel Gibson y Bruce Davey, y Lionsgate posiciona a esta última como instrumento fundamental para la difusión internacional del filme. Adam Fogelson, presidente de Lionsgate, ha calificado la cinta como «el evento cinematográfico más esperado en una generación» y la ha definido como «impresionante y espectacularmente épica», asegurando que «dejará sin aliento a los espectadores de todo el mundo». Por su parte, Gibson elogió el «espíritu valiente e innovador» de la distribuidora, asegurando que no podría haber encontrado un socio más adecuado para un proyecto de esta envergadura.
Una de las confirmaciones más esperadas es el regreso de Jim Caviezel en el papel de Jesucristo. Para asegurar la coherencia visual con la película anterior, se hace uso de tecnología de rejuvenecimiento digital («de-aging») en determinadas secuencias, herramienta que permite mantener la continuidad narrativa sin sacrificar realismo.
El inicio del rodaje está previsto para finales del verano de este año, en localizaciones de gran valor histórico y simbólico en Italia, como los estudios Cinecittà de Roma y la ciudad de Matera, escenarios que ya acogieron el rodaje de la primera película.
El guion, coescrito por Gibson junto a Randall Wallace —guionista de «Braveheart»— y Donal Gibson, hermano del director, apunta a una narrativa de gran calado teológico. Según ha adelantado el propio cineasta, la historia no se limitará a los acontecimientos inmediatos tras la crucifixión y resurrección, sino que abarcará un arco temporal y espiritual más amplio. La película abordará desde la «caída de los ángeles» —en referencia al origen del mal— hasta «la muerte del último apóstol», trazando así un recorrido por la expansión del cristianismo y la lucha entre el bien y el mal en el contexto de la historia de la salvación.