(CNA/InfoCatólica) Un amplio grupo de activistas provida, entre ellos seis obispos y un buen número de sacerdotes, se congregó el miércoles por la noche frente al Parlamento estatal de Nueva Gales del Sur (Australia), para protestar contra el Abortion Law Reform Amendment (Health Care Access) Bill 2025, una propuesta legislativa que busca ampliar el acceso a los servicios de aborto.
La norma, presentada en febrero por Amanda Cohn, diputada del Partido Verde australiano, plantea que los profesionales sanitarios con objeciones de conciencia solo estarían exentos de practicar abortos si proporcionan a la paciente información sobre cómo contactar con otro profesional que no tenga dicha objeción.
La medida ha encontrado una frontar oposición en el movimiento provida, que consideran que el texto vulnera la libertad de conciencia de médicos, enfermeras y hospitales con identidad confesional.
Fisher en la manifestación
«Fui uno de los seis obispos que asistimos a la concentración frente al Parlamento, junto con decenas de sacerdotes y miles de fieles de todas las religiones, y también no creyentes», escribió en redes sociales monseñor Anthony Fisher, arzobispo de Sídney. «Todos estaban unidos en su rechazo al radical proyecto de ley del Partido Verde.»
El proyecto contempla también que enfermeros y matronas puedan practicar abortos. Según sus impulsores, su objetivo es «aumentar el acceso a la atención sanitaria en materia de aborto». La ley llega seis años después de que el estado despenalizara el aborto y permitiera su práctica hasta la semana 22 de gestación.
El ex primer ministro Tony Abbott también intervino en la protesta, afirmando que se trata de «un ataque fundamental a la libertad de conciencia». En declaraciones a los medios, aseguró que «está diseñado para expulsar a los hospitales católicos y cristianos del sistema sanitario si no renuncian a sus principios. En el fondo, es un intento de cancelar la fe en la vida pública».