(GaudiumPress/InfoCatólica) En la ciudad francesa de Estrasburgo, ubicada cerca de la frontera con Alemania, cada año en el mes de diciembre se lleva a cabo una gran Feria de Navidad con el fin de celebrar esta gran fiesta.
El evento conlleva una gran preparación y, dentro de su estructura, se encuentra una lista de los artículos permitidos y prohibidos en las ventas. La lista la alabora la comisión «Estrasburgo-Capital de la Navidad». Así, hay artículos que año tras año están prohibidos, tales como la cerveza caliente, productos italianos, delicias regionales. Otros productos suelen estar prohibidos, como el champán, las palomitas de maíz, etc.
Según se indica en la lista de este año, los crucifijos solo podrán venderse «bajo reserva». Muchas personas empezaron a manifestar su indignación mediante redes sociales, principalmente, afirmando la incoherencia del hecho, pues es imposible comprender la Navidad sin la Cruz. Además, recuerdan que el nombre original del Mercado de Navidad de Estrasburgo es Christkindelsmärik, lo que traducido significa «Mercado del Niño Jesús».
El subdirector de animación, Guilherme Libsig, explicó al respecto que uno de los principales objetivos de la lista es regular y evitar la venta de productos de baja calidad en la feria y que, si se trata de un producto relacionado con la Navidad y es de alta calidad, se podrá vender.
