(Asia News/InfoCatólica) En este momento la policía israelí ha identificado al menos 16 jóvenes, liberados más tarde. Diez de ellos, tal vez estudiantes de una yeshiva, fueron arrestados bajo sospecha de haber participado en el incendio, que causó heridas leves a dos personas que fueron intoxicadas por el humo. Los equipos de emergencia de los bomberos evitaron la propagación del fuego en el interior del edificio.
Detrás del atentado puede haber colonos judíos o israelíes extremistas, que han afectado a un nuevo lugar de culto cristiano. En el pasado reciente han sido atacadas las iglesias vecinas al Cenacolo, la basílica de Nazareth, otros lugares de culto católicos y griego-ortodoxos. Pero han puesto también en la mira mezquitas y lugares de culto mulsumanes. - de acuerdo a la lógica de la «price tag». El «precio de pagar» es un lema utilizado por los extremistas israelíes, que amenazan a los cristianos y musulmanes por haberles «quitado su tierra». Antes el fenómeno era generalizado sólo en las áreas en la frontera con Cisjordania y Jerusalén, pero ahora se ha extendido a gran parte del territorio.
En un comunicado la Embajada de Israel ante la Santa Sede condena el vandalismo, unas acciones que están «en total contradicción» con sus valores y tradicionales que «no representan de ninguna manera» al Estado de Israel.
El templo ya fue objeto de un ataque en abril de 2014, en vísperas de la visita apostólica del Papa Francisco en Tierra Santa. El P. Matías, administrador del templo, confirmó que el daño se limita a unas pocas habitaciones dispuestas alrededor del atrio. «La iglesia, gracias a Dios, está en buenas condiciones y estamos felices de que no se haya producido ningún daño».