En el santuario de Nuestra Señora de Consolación

España: Utrera acoge el domingo un Encuentro de la comunidad católica gitana

El santuario de Nuestra Señora de Consolación, en Utrera (Sevilla, España), acogerá el domingo 25 de mayo la Eucaristía que presidirá el arzobispo, Mons. Juan José Asenjo, con motivo del XVII aniversario de la beatificación de Ceferino Giménez Malla, ‘el Pele’. De esta forma se conmemora a la primera persona de raza gitana martirizada que subió a los altares.

(SIC/InfoCatólica) La Santa Misa comenzará a las doce del mediodía, y la jornada está organizada por la Delegación Diocesana de Pastoral Gitana, en colaboración con el Ayuntamiento de Utrera y la Hermandad de los Gitanos. Está previsto que la Misa cuente con las aportaciones musicales de un nutrido grupo de cantaores, entre ellos Chiquetete, Romerito de Jerez, Jesús Heredia, Paco Cruz, ‘Nano’ de Jerez, Tomás Perrate o ‘El Quincalla‘, que interpretarán varias piezas del Oratorio Gitano de ley.

Tras la Misa, se hará entrega de las medallas que la Delegación de Pastoral Gitana concede cada año a personas que se han destacado por su colaboración con las iniciativas de este colectivo. Este año, los agraciados serán el alcalde de Utrera, Francisco Jiménez; y el presidente de la Fundación Cruzcampo, Julio Cuesta.

Encuentro mundial en Roma para 2015

Por otro lado, las delegaciones de Pastoral Gitana de toda España están preparando el encuentro mundial que se celebrará en la capital italiana el próximo año, con motivo del 50º aniversario del encuentro del Papa Pablo VI con la comunidad gitana en Pomecia (Roma) en el que el pontífice se dirigió a los gitanos asegurándoles que «vosotros estáis en el corazón de la Iglesia».

XVII aniversario del primer beato gitano

Ceferino Giménez nació en Benavent de Segriá (Lérida) el año 1861. Hombre de profundas convicciones religiosas, se ganaba la vida con la venta de caballos, y en 1902 ingresó como laico en la Orden Franciscana Seglar. Durante la Guerra Civil fue detenido y murió fusilado en Barbastro, rosario en mano, el 9 de agosto de 1936. Juan Pablo II lo declaró beato en 1997, y el proceso de canonización está actualmente en su fase final. Según destacó san Juan Pablo II en la homilía de la misa de beatificación del ‘Pele’, «su vida muestra cómo Cristo está presente en los diversos pueblos y razas y que todos están llamados a la santidad, la cual se alcanza guardando los mandamientos y permaneciendo en su amor».

 

1 comentario

Luis I. Amorós
La rápida expansión del culto evangelista (la "Iglesia de Filadelfia") entre el pueblo gitano español en la década de los 90 sirvió, al menos, para despabilar a la pastoral del pueblo gitano, tan desatendida durante mucho tiempo. Los evangelistas les permitían celebrar sus cultos a Dios de una manera muy libre y no sacramental, por contra de la misa, que encuentran demasiado rígida (probablemente por falta de formación, pero... ¿cuántos católicos la tienen buena hoy en día?).

La forma tan particular de vivir su religiosidad entre los gitanos (por ejemplo, el celibato está mal considerado entre ellos, lo que dificulta la ordenación de sacerdotes o religiosos, distanciándolos de la jerarquía) ha causado siempre desencuentros y dificultades en el resto del Pueblo de Dios.

Aunque hoy en día la mayor parte de los gitanos son "evangélicos", la minoría católica persiste en su fe. Hay motivos para la esperanza: tradiciones como la religiosidad mariana o las cofradías advocadas a vírgenes o santos siguen formando parte arraigada de la fe de los gitanos, y en la Iglesia hallan su lugar natural.

Pidamos al Señor por la vuelta a la Iglesia de tantos gitanos conducidos al error.
21/05/14 9:03 PM

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