870 millones de personas sufren desnutrición crónica

Manos Unidas denuncia que se podría garantizar la producción de alimentos en todo el mundo y no se hace

Manos Unidas ha presentado ayer miércoles en Madrid el informe «El desafío del hambre», un texto que pretende informar y sensibilizar a la población acerca de la problemática de la desnutrición crónica. Según el responsable de la elaboración de este informe, Marco Gordillo, el hambre es «un problema de accesibilidad», y no de producción.

(EP) Según la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura (FAO), la desnutrición crónica afecta a más de 870 millones de personas en el mundo. «Nunca hemos bajado de la barrera de los 800 millones, una cifra terriblemente trágica si tenemos en cuenta que hoy en día, gracias a los avances técnicos, podríamos garantizar la producción de alimentos en todo el mundo, pero no lo hacemos», ha lamentado Gordillo.

Además, tal y como advierte el informe, el escenario de la globalización ha hecho emerger nuevas y diferentes problemáticas que se suman a las ya conocidas y que inciden en la seguridad alimentaria y nutricional de nuestro mundo de manera decisiva. Entre ellas, Manos Unidas destaca el cambio climático, la producción de biocombustibles, el acaparamiento de tierras y la volatilidad de los precios de los alimentos en el mercado internacional.

«Paradójicamente, los habitantes de los países menos desarrollados, que apenas contribuyen al deterioro medioambiental del planeta, son los que más sufren sus consecuencias», ha apuntado Gordillo. Para Manos Unidas, la ONG católica que nació en 1960 con el objetivo de acabar con las fronteras del hambre en el mundo, la lucha contra la pobreza y la desnutrición se ha convertido en más que un desafío diario.

Por su parte, el moderador del coloquio, el periodista de El País Gonzalo Fanjul, ha advertido de que la situación precisa de una solución urgente. «Millones de personas se acuestan cada día sin saber si podrán comer al día siguiente, un problema que tarde o temprano se convertirá en un bumerán que se volverá contra nosotros», ha declarado Fanjul.

«El hambre es algo más complejo que la fotografía del niño con la barriga hinchada que nos llega a través de los medios de comunicación», ha comentado Fanjul. «Precisa de una solución inmediata, un mensaje que no es fácil trasladar a la población en esta época de crisis, donde no se distingue lo urgente de lo importante», ha añadido. «Estos asuntos se escapan de nuestras preocupaciones diarias: de Bárcenas, de la crisis... Sin embargo, son asuntos de máxima importancia», ha concluido.

Podríamos poner solución

El presidente de la Plataforma Rural, Jerónimo Aguado, que también ha participado en el acto, ha apostado por las alianzas con los pequeños productores como posible solución al problema del hambre. «Hemos perdido el derecho a la soberanía agroalimentaria, tanto en los países del norte como en los del sur. Sin embargo, los pequeños productores nos demuestran día a día que es posible producir alimentos con muy pocos costes energéticos», ha declarado.

«Es una locura y un derroche producir un alimento en Cantabria, procesarlo en París y consumirlo en Guatemala», ha ejemplificado. «Esta misma mañana cuatro personas me han pedido limosna en el metro para poder comer, lo que me ha hecho sentir indignado como campesino, pues soy consciente de que, con las políticas adecuadas, podríamos poner solución a esta situación de pobreza», ha agregado.

Inmaculada Cubillo, responsable de la campaña Derecho a la Alimentación de Cáritas, ha asegurado que «el mundo, tal y como está organizado ahora, no es viable ni ético para nadie». Según Cubillo, uno de los principales problemas en la lucha contra el hambre es que «no somos capaces de mirar el problema con ojos nuevos para aportar soluciones nuevas». Para Lourdes Benavides, de la campaña CRECE, de Intermón Oxfam, uno de los mayores inconvenientes a la hora de aportar una solución global a la problemática es la concentración del mercado.

«Tan sólo un puñado de empresas se encargan de tomar las decisiones que afectan al sistema alimentario mundial», ha alertado Benavides. A la pregunta sobre qué podríamos hacer los ciudadanos para ayudar a subsanar la situación, Benavides ha comentado que «hay actitudes que realmente empoderan a los consumistas, como escoger en qué banco deposito mi dinero y apoyar a aquel que haga las políticas más justas».

No es posible no cuestionar a Naciones Unidas

Por su parte, Henry Morales, coordinador del movimiento guatemalteco Tzuk Kim-Pop, ha criticado algunas de las decisiones tomadas en los últimos años por la ONU. «No es posible no cuestionar la labor de Naciones Unidas», ha afirmado.

«¿Cómo es posible que mientras unos organismos tratan de aplicar medidas nobles y humanitarias, otros propongan al mismo tiempo medidas tan contradictorias como la economía verde, un modelo basado en el crecimiento económico y que no establece ningún elemento que consiga la redistribución de la riqueza?», ha cuestionado Morales. «Los estados, evidentemente, no están dando a los problemas la importancia que realmente tienen», ha añadido.

El economista Carlos García, del Instituto Socio Ambiental-ISA de Brasil, que también ha participado en el encuentro, ha alertado concretamente del caso de la Amazonia brasileña, una región que, a raíz de su entrada en el sistema de producción mundial de alimentos, ha visto arrasados más de 700.000 kilómetros de selva amazónica. Los destructores son bien conocidos: el comercio de madera, la agricultura y la ganadería.

7 comentarios

enric
Quizás el comienzo, la clave: “del comienzo del fin del hambre”, esté, en una palabra: AYUNO.

Convocar un día de ayuno mundial en el que participen todas las personas de Buena Voluntad, de cualquier religión, ateas, agnósticas, de cualquier raza o país.

Que el énfasis esté en “dar de comer al hambriento y de beber al sediento” por la sencilla razón: que no es justo que mueran de hambre (o por las consecuencias de una desnutrición deficitaria) de 10.000 a 20.000 personas diariamente, cuando se hacen régimenes para adelgazar, cuando en el primer mundo se despilfarra la comida, etc, etc, etc.

Este día además serviría para reflexionar y buscar soluciones que impliquen al sistema bursátil mundial en el sentido: que es legal que las personas se puedan enriquecer, casi casi, hasta “el infinito” pero moralmente lícito aún cuando mueren de 10000 a 20000 personas diarias:NO.Creo que esto lo sentimos así todos en el fondo de nuestro corazón.

Por ello, debemos manifestar que la inmensa mayoría del mundo estamos decididos a erradicar el hambre y que una minoría, aunque muy poderosa, debe reflexionar y colaborar de forma justa para que, entre todos, consigamos pasar la página de la historia en la que en el mundo “podían” haber muchas muertes de personas diariamente por hambre o por las consecuencias de una desnutrición deficitaria.

Ánimo y un abrazo.
25/04/13 9:36 AM
Javier
Gracias por el articulo es muy bueno. Me agradaria hacer algunas reflexiones. Soy cientifico retirado y he trabajdao toda mi vida en el estudio cualitativo d elos alim,entos y puedo dedcir ahora sin temor a ser barrido por la mafia que el problema de los alimentos es que se le ha quitado a la gente la posibilidad de producir su propio alimento y sus costumbres ancestrales. Se han metido a presion los cultivos "de plastico" d elos transgenicos para hacer dos favores el primeroa la industria que necesita vender insumos caros el segundo a las empresas que agregan genes a lo que existe para hacerlo adaptado a lo que el negocio de
la industria produce.Es mas barato fabricar una soja a medida para el producto quimico que hace la industria que adaptar o investigar otro producto quimico respetando el cultivo. pero esto no seria tan greave si el cultivo se pudiera comer . Lo peor es quer se hace un cultivo que sirve para los cerdos y para combustible y encima monocultivo o sea para las personas poco y nada. Las personas deben dejar sus semillas ancerstrales y comprar las nuevas transgenicas por que los rindes de sus antiguas semillas no alcanzan acubrir los altos costos de los insumos. Asi un agricultor en nuestra niñez( y ya soy bastante demas alla de la mitad del siglo pasado), guardaba sus semillas y producia menos pero de varias cosas, con gran trabajo si pero se alimentaba el y su familia y todavia le sobraba. Hoy porduce unos maices, o soja abundantes pero incomibles para el
25/04/13 2:27 PM
ALFONSO GERONA LÉRIDA
Si hay hambre en el mundo es por desorden y por los crápulas dicadores de esos países con hambre.
Con las subvenciones que se dan en el norte de España para sacrificar vacas y dejar de producir leche, por las "leyes del mercado", se podría dar de comer y beber a medio África, por ejemplo.
Lo del hambre es cuestión de voluntad política, no de falta de recursos naturales ni nada parecido, y menos de manipulados cambios climáticos estúpidos e irracionales, como desgraciadamente he oído en algunos anuncios de Manos Unidas.
25/04/13 11:17 PM
javier
lastima que mi comentario no llego entero y no tengo copìa para enviar el resto. Pero deseo decir que el problema del hambre es un problema de enajenacion d elas personas y de hacerlas cada vez mas dependientes. se han desalojado los pequeños agricultores y trabajadores rurales que se apiñan en los cinturones d epobreza y viven del recicloe de la basura en vez de producir sus alimentos. Asi se han perdido tecnicas y tecnicos altamente desarrollados en la agricultura. El hombre moderno ha despreciado las tareas tecnicas como la producciond e alimentos pero esta tarea exige un enorme trabajo intergeneracional de observacion y prueba y error cada agricultor es a su manera un cientifico experimentador y sobre todo observador. Con la agricultura moderna la produccion de alimentos esta en muy pocas manos y los que otrora los p`roducían ahora mendigan en las calles d elas grandes ciudades o juntan papel y carton y los cambian por unas monedas con las que compran alimentos industriales. Si esa energia la emplearan en producir alimentso alimentarian no solo a ellos mismos sino a muchas otras personas. Creo que el esquema del nuevo orden mundial es simplemente que el control de los alimentos este n muy pocas manos como el petroleo o la minmeria. Y el hambre pese alos esfuerzos caritativos no se solucionara mientras no se permita al agricultor desarrollarse independientemente. La dependencia de semillas altamente modificadas( entre ellas las tarnsgenicas con el killer algunas) hace que
26/04/13 4:07 AM
Juana
El capitalismo tiene la necesidad de tener esclavos y para ello lo mejor es que los posibles esclavos vean como viven los parías de la sociedad.
La Iglesia Católica debería luchar contra esto, en vez de estar con las élites... en Un mes esto estaba resuelto. Pero es mejor preocuparse de otras cosas para ayudar a controlar a los pueblos.. Espero que Jesús regrese a impartir justicia lástima que esto solo sea un cuento como el de los REyes Magos y los regalos de navidad... solo es comercio, una forma de hacer religiosa una fiesta pagana.
26/04/13 2:34 PM
Luis Fernando
Juana, explícanos como se resolvería esto en un mes.
26/04/13 2:35 PM
enric
Juana y Luis Fernando:

Para solucionar el hambre, en un mes, tendríamos que manifestarnos muchos miles millones de personas en el mundo. Somos unos 7000 millones actualmente y la inmensa mayoría tendríamos que expresar nuestra voluntad y comenzar.

Supondría, al mismo tiempo, el fin de los conflictos bélicos y de las guerras pues el hambre es la primera consecuencia, además de las muertes propias de la violencia de las guerras.

También supondría una gran alegría mundial el ver que ya no muere nadie por hambre. Las noticias de todas las televisiones del mundo estarían centradas en el gran acontecimiento del fin del hambre y de las guerras.
Simplemente empezaríamos a vivir como hermanos en un momento en el que, gracias a Dios, con el desarrollo tecnológico existente, es posible.

¿Cómo? Pues con voluntad firme. Con la conciencia de que somos la inmensa mayoría del mundo. Miles de millones 5000, 6000, los 7000. Con la conciencia de: ¿por qué no lo hemos hecho antes? si era y es hoy posible.

Como decía, con el AYUNO podíamos empezar. El dinero no invertido en comida podía ser el inicio. Pero aún más importante es la reflexión y la firme voluntad de erradicar el hambre.
Todas las religiones proclaman el ayuno, incluso los no religiosos o no creyentes. El ayuno para solucionar el hambre nos une. Unidos podemos erradicarlo al igual que las guerras. Sólo tenemos que querer y empezar.

Ánimo y un abrazo.
27/04/13 6:32 PM

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