(InfoCatólica) Los informes de vidas salvadas del aborto están llegando desde Michigan, California, Virgina y otros estados del país norteamericano.
Entre los testimonios figura el de una mujer del condado de Orange, en California, que se acercó al grupo de oración con lágrimas en los ojos diciendo que no podía abortar a su hijo. En otro caso, otra madre se dirigió a los fieles explicando que ya tenía cuatro hijos y que pensaba abortar a las siete semanas de embarazo porque no tenía recursos económicos para seguir adelante. Cuando la aseguraron que tendría ayudas para criar a su nuevo hijo, decidió seguir adelante con su embarazo.
La campaña consiste en organizar encuentros de oración frente a las clínicas, sobre todo las de la multinacional abortista Planned Parenthood.
