(ABC/Agencias/InfoCatólica*) La Jornada por la Vida, nació por iniciativa del Papa Juan Pablo II. Fue anunciada para la Iglesia Católica en su Encíclica 'El Evangelio de la vida'. Precisamente, en el contexto de esta jornada, la CEE lanzó hace unos días la campaña 'Protege mi vida' para "sensibilizar sobre la desprotección de la vida naciente y sobre el holocausto silencioso que supone el creciente número de abortos deliberados en España".
Durante las homilías, que se sucedieron a lo largo de toda la jornada, el mensaje de los prelados fue el mismo y sonó muy claro: "La auténtica justicia pasa por la custodia del niño que va a nacer y el apoyo integral a la mujer para que pueda superar las dificultades y dar a luz a su hijo".
Desde la Catedral de la Almudena, el presidente de la CEE, el cardenal Antonio María Rouco Varela, reclamó respeto hacia la persona humana desde el momento de su concepción e insistió en que "el hombre no se mide por sus cualidades físicas porque todos tenemos la misma dignidad". En este sentido, recordó que en Europa se han vivido tiempos en los que "ha costado mucho reconocer la dignidad del ser humano", lo que ha traído "consecuencias dramáticas". Por ello, insistió en que "ni el Estado ni el hombre pueden determinar cuándo una vida es digna de ser vivida".
En algunas diócesis, como Pamplona, la Vigilia de oración por la vida, presidida por mons. Francisco Pérez, se celebró en la víspera de la Solemnidad de la Anunciación, mientras que en otras diócesis, como Palencia, la celebración tendrá lugar el próximo viernes, convocada por mons. José Ignacio Munilla.
Los distintos prelados expresaron a los fieles de sus respectivas diócesis que la Iglesia y sus miembros están unidos para respetar y proteger al niño que va a nacer y a la madre que lo lleva en su seno. El arzobispo de Valladolid, monseñor Braulio Rodríguez, animó a los creyentes y "hombres de buena voluntad" a orar por la vida, porque, según dijo, "los cambios legales que se anuncian en nuestro país darán lugar a una situación en la que quienes van a nacer quedarán todavía más desprotegidos que con la actual legislación".
La comisión de Familia y Vida del Arzobispado de Valencia se sumó a las actividades organizando una Vigilia por la Vida, presidida por el obispo auxiliar de Valencia Enrique Benavent en la parroquia de Santo Tomás Apóstol y San Felipe Neri. El presidente de la comisión diocesana de Familia y Vida, Jose Enrique Pérez Asensi, ha manifestado que el objetivo de la vigilia es "reflexionar sobre el valor de la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural y orar por ella ante las amenazas que sufre en la actualidad".
Desde Guadalajara, monseñor José Sánchez, advirtió de que España vive "un momento muy delicado» con una reforma de la ley del aborto "que promete mayores facilidades, hasta impunidad, para abortar", por lo que hay razones para temer "una alarmante desprotección de la vida humana en su origen". También subrayó que la obligación de respetar el derecho a la vida del ser humano en el vientre de la madre no es sólo una obligación de los cristianos, sino "de toda persona".