(R.R/La Razón) Y una prueba de que la posmodernidad ha agravado aún más la situación moral de la sociedad es "el tratamiento legal dado al derecho a la vida, como si el Estado pudiera disponer ilimitadamente de él", en alusión a los Estados que legislan a favor del aborto, el suicidio asistido, la eutanasia o la experimentación con seres humanos en su fase de embriones. Otro ejemplo que puso el presidente de los obispos españoles fue el de quienes afirman que un chimpancé sano goza de un derecho a la vida superior al de un niño discapacitado, en alusión a las propuestas del académico Peter Singer, aunque el cardenal no mencionó ningún nombre concreto. Ante esta situación, aseguró, "urge dar una respuesta cultural del Evangelio" que "en un diálogo sincero entre fe y razón haga presente en la vida pública" al "Dios que es amor". Para conseguirlo, los laicos "deben ser los protagonistas más activos", concluyó. También habló ayer el cardenal arzobispo de Toledo y Primado de España, Antonio Cañizares, quien pidió una catequesis "seria, auténtica y renovada". El cardenal Cañizares insistió en el papel "insustituible y fundamental" de la catequesis en la transmisión de la fe.
El Sínodo, que acoge a 253 obispos de todo el mundo, se inició el pasado día 5 de octubre y se prolongará hasta el día 26. Ayer se presentó un primer resumen de las ideas de los padres sinodales que se han expuesto estos días.
