(Ep/InfoCatólica*) La secretaria general de la Provincia Eclesiástica de Madrid, María Rosa de la Cierva, afirmó hoy que las declaraciones del ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, sobre el "derecho a vivir dignamente", "no se compaginan" con lo expresado recientemente por el ministro de Sanidad, Bernat Soria, quien aseguró que "el derecho a una muerte digna es una asignatura pendiente de la sociedad española".
"El derecho vivir dignamente del que habla el ministro Bermejo no se compagina con lo que ha dicho su compañero de gabinete, el ministro de Sanidad, acerca de que la sociedad española ya está preparada para la eutanasia, así sin eufemismos", afirmó la religiosa.
De la Cierva matizó que si bien el titular de Justicia habló en términos de "vida digna", esto "tiene mucho que ver" con la eutanasia ya que "puede llegar el día en que, por enfermedad, el médico, los familiares o el mismo enfermo, consideren que no es vida digna".
No obstante, la religiosa recordó la postura de la Iglesia a favor de los cuidados paliativos porque "pretende que nadie sufra". "Es más, la doctrina es clara cuando la vida del hombre es vegetativa, cuando ya ha tenido una muerte biológica: ni los médicos ni la familia están obligados a mantener una vida artificial", aseguró. Ahora bien, la religiosa se mostró contundente al condenar el tipo de sedación que lleva "un proceso irreversible hacia la muerte".
Del mismo modo, condenó "sin paliativos" tanto la actual ley del aborto como su hipotética reforma. "Es un horror que se le llame ley del interrupción del embarazo, el único dueño de la vida es Dios. La Iglesia no la va a aceptar nunca", sentenció. Además, De la Cierva está convencida de que habría "muchos menos casos de aborto" si a las mujeres que optan por esta práctica "se les dijera la verdad, que van a matar a la criatura que llevan en su seno".
En este sentido señaló que "el mayor bien de una nación" son los hombres y las mujeres que la habitan, y que "se está destruyendo por miles la vida de los nascituros".
Con respecto a la modificación de la Ley de Libertad Religiosa, con la que Bermejo espera "igualar" las distintas confesiones, De la Cierva instó al Ejecutivo a tener en cuenta la "realidad sociológica de España".
"No se nos puede poner en parangón con el Islam, la religión judía o la religión evangélica", manifestó, aunque añadió que la Iglesia "no se opone a que se les atienda".