(Begoña San Martín/EP) El centro será gestionado y atendido por los sacerdotes de San Vicente de Paúl.
Instituciones españolas y mexicanas, como la 'Alianza México por Haití' o Fomento Social Banamex, han sido los principales apoyos económicos para financiar este proyecto que ha costado 1,6 millones de dólares. "Estos niños que ahora viven en los campamentos van a contar a partir de ahora con un lugar donde estudiar y vivir", ha asegurado el padre Ángel a las autoridades mexicanas, al tiempo que ha deseado que "ojalá otros gobiernos no olviden a este pueblo".
Calderón ha felicitado a Mensajeros de la Paz por su trabajo y ha destacado la "generosidad, amor y entrega" del fundador de esta organización porque, a su juicio, "ha hecho posible que se reúnan todas las voluntades para levantarlo". Asimismo, ha subrayado que espera que este hogar-escuela sea "el principio de una vida mejor para muchos niños haitianos".
Este centro, que se sitúa en la zona de Tabarré-Tigalette, muy próximo a uno de los cuatro campamentos de desplazados atendidos por la Mensajeros de la Paz, tiene como objetivo la protección básica de los menores en el aspecto nutricional, sanitario, psicosocial y lúdico, pero con especial hincapié en lo educativo, ya que, para esta ONG, "la educación es el seguro para el futuro de las naciones, además de un derecho de la infancia".
Para ello, se ha construido un pabellón con 15 aulas con capacidad para 25 estudiantes, biblioteca y ludoteca, baños, cocina, sala de juntas y secretaría; un pabellón residencial compuesto por dos dormitorios -unos para niñas y otro para niños--, sala de estar, comedor, cocina y despensa; y un pabellón sanitario, en el que se encuentran las consultas, salas de espera, gabinete psicológico y enfermería.
Muy cerca de este lugar se sitúa al centro de día 'IVAL', también de la organización del padre Ángel, que ha sido financiado por la familia española Fernández-Tapias. A este lugar acuden por la mañana unos 80 mayores y por la tarde un centenar de niños a los que las franciscanas Hijas de la Misericordia asean, dan de merendar y ayudan con las tareas escolares.
La labor de Mensajeros de la Paz en Haití comenzó dos días después del terremoto de enero de 2010. Desde entonces, personal de la ONG trabaja en las zonas más afectadas para prestar asistencia médica, social y material a los damnificados tanto en Haití como en República Dominicana.
Entre las principales actividades destaca el envío de más de 600 toneladas de medicamentos y material sanitario, el envío de médicos y enfermeras a hospitales, la atención y protección infantil, la atención a las familias de los campamentos de desplazados, así como la limpieza de estos terrenos.