(Efe) "En la sociedad actual, donde por desgracia las fiestas que se avecinan están perdiendo progresivamente su valor religioso, es importante que los signos externos de estos días no nos alejen del significado genuino del misterio que celebramos", afirmó el obispo de Roma.
Benedicto XVI agregó que es necesario que el tradicional intercambio de "Feliz Navidad" no pierda su "profundo valor" religioso y que la fiesta religiosa se vea oscurecida por los aspectos externos, "que son bellos e importantes, pero no deben distorsionar el sentido cristiano y sagrado" de la Navidad.
El papa Ratzinger animó a los hombres a vivir con gozo el nacimiento de Cristo y aseguró que Dios está cerca de cada uno de nosotros "y desea que lo descubramos, para que con su luz se disipen las tinieblas que encubren nuestra vida y la humanidad".
"Invito a todos a celebrar una Navidad auténticamente cristiana, con la alegría de saber que el Señor vino al mundo para salvarnos. Al Niño Dios pediré por todos, especialmente por quienes pasan por duras pruebas. Que en estos días santos, la caridad cristiana se muestre singularmente activa con los más necesitados. Para los pobres no puede haber dilación", manifestó.